domingo, 31 de diciembre de 2017

EL PRODIGIO


RESEÑA DE CLARA GLEZ para LIBROS, 31 de Mayo de 2017.
El prodigio - Emma Donoghue
Una novela emotiva, inteligente, apasionada, que conjuga el suspense psicológico con una historia de un amor que se enfrenta al Mal.
Quizás en estos momentos no me vea capaz de relatar lo que esta novela me produjo. La terminé anoche de madrugada. No quiero desvelar nada de lo que sucede, sino las impresiones que me causó.
Antes que nada decir , que soy creyente, pero quizás por eso, sea muy crítica con lo que acontece. Ya tuve mis peleas, con la jerarquía en varias ocasiones, y que por ello me animé a estudiar teología para seglares ( tres años , rango de licenciatura), en mis años críticos, para poder rebatir con conocimiento de causa.
Podría decir que me recordó a del color de la leche…que me rebelé, que casi lloré , que me gustó mucho, y eso sí…hay que ponerse en la época… pero aun así vi muchas situaciones semejantes es tiempos más cercanos. Y muy recientemente en unas declaraciones en la canonización en los pastorcillos de Fátima. Quizás esto sea una reseña demasiado personal, pero no puedo opinar de otra manera y necesito la necesidad de expresarlo. Hace unos días el Papa dijo al canonizar a esos niños, que los canonizaba por su fe, no por sus sacrificios para aplacar a un Dios justiciero ..Yo creo en Dios…no en un teniente coronel con ganas de matar al que se le rebele.
Y recomiendo leerla, es tierna, es “ real” , sus personajes están perfectamente descriptos, y tiene su intriga…eso si hay mucha jaculatoria de por medio, pero en mi opinión son necesarias para entender la historia.
Creo que hoy voy a tiras por uno de esos insípidos de mujeres que buscan amores con tipos guapos y con dinero. Porque creo que otra cosa no sería capaz e leer…o me voy a por mí Alfonso Ussia y su marqués de Sotoancho…que me arranque si puede unas risas.
Sinopsis
Irlanda, 1840. En un pequeño pueblo se corre la voz de que una niña de once años, hija de una humilde familia de granjeros, lleva cuatro meses sin comer. Anna O’Donnell es inteligente, devota y muy discreta. En un ambiente extremadamente católico, todos la creen una santa. El caso ha llegado a la prensa, y recibe a diario visitas que dejan a la familia limosnas y regalos.
Elizabeth Lib Wright, una joven enfermera inglesa, es contratada por un comité de ciudadanos del pueblo para vigilar a la niña durante dos semanas, con el objeto de otorgar credibilidad al «milagro».
Se turnará en esa vigilancia con una monja, la hermana Michael.
Lib no se fía de la eficacia de la religiosa, pero es casi imposible controlarla a ella también,
además de a la niña y los padres de esta. William Byrne es un periodista al que envían allí para cubrir el caso, y Liz acaba refiriéndole algunas de sus observaciones.
Está convencida de que se trata de un fraude, pero resolver el misterio no resultará sencillo.


Opinión de LIBROS sobre la novela, a continuación:
Cuando empecé a leer El Prodigio, que me recomendó nuestra amiga Clara Glez, no me di cuenta de que ya había leído una novela de esta autora; la polémica La habitación, en la que se narra el secuestro de una joven que vive aislada durante años e incluso da a luz en su encierro.
Esta nueva novela es, también polémica, por los hechos que narra y como lo hace. Creo que la autora ha ganado experiencia, fluidez narrativa y fuerza literaria. Los personajes y el ambiente opresivo en el que se desarrolla la historia están muy logrados.
Aunque el tema no es de mis favoritos, la historia merece la pena.
Me ha gustado. Gracias Clara!!!

Sinopsis  (Ed. Ediciones B)
Una novela apasionante, hipnótica y plena de misterio, por la autora de La habitación. Irlanda, 1840. En un pequeño pueblo se corre la voz de que una niña de once años, hija de una humilde familia de granjeros, lleva cuatro meses sin comer. Anna O'Donnell es inteligente, devota y muy discreta. En un ambiente extremadamente católico, todos la creen una santa. El caso ha llegado a la prensa, y recibe a diario visitas que dejan a la familia limosnas y regalos. Elizabeth Lib Wright, una joven enfermera inglesa, es contratada por un comité de ciudadanos del pueblo para vigilar a la niña durante dos semanas, con el objeto de otorgar credibilidad al milagro. Se turnará en esa vigilancia con una monja, la hermana Michael. Lib no se fía de la eficacia de la religiosa, pero es casi imposible controlarla a ella también, además de a la niña y los padres de esta. William Byrne es un periodista al que envían allí para cubrir el caso, y Liz acaba refiriéndole algunas de sus observaciones. Está convencida de que se trata de un fraude, pero resolver el misterio no resultará sencillo. Una novela emotiva, inteligente, apasionada, que conjuga el suspense psicológico con una historia de amor que se enfrenta al Mal.
«Una excelente novela histórica basada en hechos reales.» Stephen King , The New York Times Book Review
«Donoghue logra abordar los misterios más grandes de la fe sin sacrificar el lirismo de su lenguaje ni el suspense de su argumento.» The Washington Post
« Como en la mejor ficción histórica, El prodigio no trata del pasado sino del presente». Financial Times
«Una maravilla, una rareza en la ficción contemporánea... Logra hacer palpitar el corazón del lector.» The New York Times
«Una historia colmada de pasión y drama.» Newsday
«Extraordinaria.» Booklist
«Deliciosamente gótica. Intensidad y suspense claustrofóbicos.» USA Today
«Donoghue demuestra que es una maestra de la trama.» Time « Su tono, trama y complejidad moral son fascinantes.». The Boston Globe
«Un duelo pleno de suspense.»The Wall Street Journal
«Una tensa novela gótica». Toronto Star
«Prosa intensa y cinematográfica.» Ottawa Citizen


El Prodigio (fragmento)

1
ENFERMERA
Enfermera
para lactar a un bebé,
para criar a un niño,
para cuidar a los enfermos.

El viaje no fue peor de lo que esperaba. En tren de Londres a Liverpool, en paquebote nocturno hasta Dublín; en un tren lento de domingo hacia el oeste; hasta un pueblo llamado Athlone. 
Allí la esperaba un conductor.
- ¿La señora Wright?
Lib había conocido a muchos irlandeses, soldados, aunque eso había sido varios años antes, así que tuvo que esforzarse para entender lo que le decía aquel hombre.
Llevó su maleta a lo que él llamaba el coche de paseo. Un término irlandés poco apropiado, ya que aquella simple carreta no tenía nada que invitara a pasear en ella. Lib se acomodó en el único banco, con las botas colgando más cerca de la rueda derecha, de lo que hubiese querido. Abrió la sombrilla para protegerse de la llovizna. Al menos aquello era mejor que el sofocante tren.



LA MEMORIA SECRETA DE LAS HOJAS


RESEÑA DE CLARA GLEZ para LIBROS, 28 de Mayo de 2017.
La memoria secreta de las hojas – Hope Jahren
No me gusta escribir sobre libros que no termino, pero en este después del 60% leído me voy a atrever....
Lo empecé con ilusión, y después de ese 60% me parece que es más una tesis doctoral que un libro.
Al comienzo me interesó, pensando en leer una novela con una base científica detrás, peo al seguir y seguir, me vi en el departamento de botánica donde tuve mis prácticas, en el bioquímica, hace más de 40 años, cuando estudiaba, me aburrí soberanamente porque se cómo funciona un espectrómetro de masas , y si no lo supiera tampoco me sería necesario saber si andan a 200 V. o a 125. Me cansa las rutinas de cómo preparar un medicamento, para eso tuve la galénica, y creo que también es innecesario saberlo a quien lee una novela. Por muchas instrucciones que te detallen no sirven para nada, el que le toque prepararlas ya sabrá cómo y quién se dedique a otros menesteres excusa saberlo. En fin que no sé qué se pretende contar en ese libro…que mejor le valiera a la autora escribir un tratado de raíces, de plantas, de manual de prácticas en cualquier asignatura que lo precise….En resumidas cuentas en COÑAZO
Ahh eso si mucho respeto a la naturaleza y comen comida basura….muy edificante
Sinopsis
La memoria secreta de las hojas no es solo un libro, es el fascinante debut de una mujer consagrada a la ciencia, el retrato conmovedor de una larga amistad y una exposición sorprendente del mundo de las plantas que cambiará radicalmente nuestra forma de contemplar la naturaleza.
En su ópera prima, Hope Jahren nos presenta un revelador tratado sobre la vida de las plantas que además versa sobre el trabajo y sobre el amor, y sobre cómo se pueden mover montañas cuando ambos van a la par.

Sinopsis (Ed. Ediciones Paidos)
La memoria secreta de las hojas no es solo un libro, es el fascinante debut de una mujer consagrada a la ciencia, el retrato conmovedor de una larga amistad y una exposición sorprendente del mundo de las plantas que cambiará radicalmente nuestra forma de contemplar la naturaleza.
En su ópera prima, Hope Jahren nos presenta un revelador tratado sobre la vida de las plantas que además versa sobre el trabajo y sobre el amor, y sobre cómo se pueden mover montañas cuando ambos van a la par.

La memoria secreta de las hojas (fragmento)

NO EXISTE NADA MÁS PERFECTO que una regla de cálculo. Su aluminio bruñido resulta frío al contacto con los labios, y, si la mantienes al nivel de la luz, puedes ver en cada una de sus esquinas el ángulo recto más perfecto de la creación. En cambio, si la pones de costado se transforma en un original florete que se dobla sin querer. Hasta una niña de corta edad puede blandir en el aire una regla de cálculo, sirviéndose del cursor como empuñadura. En mi memoria permanecen ligados de un modo indisoluble este juego infantil y los primeros relatos que me contaron, y, por ese motivo, no puedo evitar representar en mi mente a un angustiado Abraham justo en el momento en el que va a sacrificar al pobre Isaac alzando su mortífera regla sobre el pequeño.
Yo me pasé la infancia en el laboratorio de mi padre, jugando debajo de las mesas hasta que alcancé la altura suficiente para jugar sobre ellas. Mi padre enseñó durante cuarenta y dos años seguidos los rudimentos de la física y de las ciencias de la tierra en aquel laboratorio. Era profesor en una escuela de formación superior de una pequeña localidad de Minnesota. Él adoraba su laboratorio, y mis hermanos y yo compartíamos su pasión por aquel lugar.
No era más que una sala pintada con una gruesa capa de color crema; pero, si cerrabas los ojos y te concentrabas, podías sentir por debajo la textura del cemento. Recuerdo que llegué a la conclusión de que el revestimiento de goma de los laterales debían de haberlo pegado a la pared, porque no encontré ni una sola marca de clavos cuando medí la estancia con una cinta métrica que extendí más de treinta metros. Había largas mesas de trabajo en las que tenían que sentarse cinco alumnos, uno al lado del otro, mirando todos en la misma dirección. Aquellas superficies negras, frías como una tumba, estaban hechas de un mate rial imperecedero, de algo que ni el ácido ni los golpes de martillo podían destruir (pero no lo intentéis). Eran lo suficientemente robustas como para aguantar el peso de una persona, y tan duras que no se podían rayar ni con una piedra (pero no lo intentéis).

LAS MALDICIONES


RESEÑADO por Clara Glez. para LIBROS 26 de Mayo de 2017.

Tenía interés por leer este libro, más que nada porque había oído hablar de la maldición de la piedra fundacional de la ciudad de Buenos Aires. Y la verdad es que no me ha desagradado.
Aparte de tratar ese tema, que sirve para forjar la trama de la novela, es una lección magistral de las nuevas formas de la política. De cómo se trata la información para que haga su efecto en las masas.
En medio de todo ese mundo hay una historia que te hace leer y leer hasta ver su desenlace.
Sus personajes bien definidos. La historia con su intriga, su pellizco, y en medio la política, con todos sus matices: egoísmo, poder, ambiciones, miedo …
Me imagino que a los argentinos esta historia les será en parte conocida. Aunque en el fondo es una historia que desgraciadamente se repite en todas partes. A mí me ha gustado y lo recomiendo.
Y como consecuencia personal, me doy cuenta que no soy yo sola la que tiene el carnet del partido caducado.


Y esta es mi opinión, acerca de la novela:
La nueva novela de Claudia Piñeiro aborda la "nueva política" ¿hay algún tema más actual?.
La vida y obra de Fernando Rovira (cambien un par de letras del apellido) un líder "carismático" que va a cambiar la vida de los argentinos con sus "ideas".....
Con un estilo muy reconocible la escritora relata el desembarco de un político y sus asesores, paralelamente las vidas privadas llenan la novela de ...realidad, la realidad de "cambiar todo para que nada cambie", la realidad de considerar a los votantes menores de edad, la realidad del marketing y el engaño, la pura realidad!!!
Quizás le sobren datos históricos aunque a mí me ha gustado esa "contrahistoria argentina" pero con un mínimo de reflexión sientes un escalofrío de miedo recorriendo tu columna vertebral!!!
La recomiendo, mucho!!!
Sinopsis (Ed. Alfaguara)
Un joven ingresa al mundo de la política por las razones equivocadas y debe afrontar las dramáticas consecuencias.
Alguien puede llegar a la política por muchos motivos. Unos más legítimos, otros menos. También por error, por desidia. O por no saber decir que no.»

Román Sabaté entra al mundo de la política casi por casualidad, pero es allí donde se sella su destino. La permanente tensión entre la necesidad de trabajo de un joven de provincia y las ocultas intenciones del político que lo ha elegido como secretario privado es lo que mueve los hilos de esta novela: dos hombres en conflicto en una historia en la que hasta la paternidad está en juego. Magia, doble discurso o crimen, todo vale. Las maldiciones desnuda la verdad de la llamada "nueva política", basada en un pragmatismo absoluto que esconde la inescrupulosidad del engaño y la ambición sin límites.
Claudia Piñeiro ha escrito una novela certera, conmovedora y actual, que pone el foco en las perversiones de los gobernantes, pero que también les hace lugar a las historias de lealtad y amor más verdaderas.

Las maldiciones (fragmento)

1

Cada hombre, cada mujer, carga con su propia maldición. Hay quienes dedican toda su vida a desbaratarla, a vencerla; son los que se creen capaces de burlarse de ella, poderosos, y así pelean del primer día al último en una batalla absurda, desigual, inútil. Por otro lado están aquellos que no luchan contra su maldición sino que conviven con ella, los que aprenden a llevarla de paseo, como una mochila, intentando que pese lo menos posible; la observan de reojo, la controlan sin combatirla, saben que está ahí, de principio a fin, y aunque se preocupan por que no se ensañe con ellos, le prestan la mínima atención. Pero hay una tercera categoría, la privilegiada, la que integran los que ni siquiera son conscientes de que esa maldición existe. Román Sabaté es uno de esos privilegiados. Por más que, como todos, también esté maldecido, lo desconoce, y eso lo hace libre. A Román ni se le cruza por la cabeza que su vida esté condicionada por maldición alguna; es ignorante y, por lo tanto, sabio.
Sin embargo, Román hoy siente náuseas y un fuerte dolor en la boca del estómago. No advierte una relación entre ese dolor y una maldición. Busca su origen en lo que lo rodea. Mira a su alrededor. Huele. Cree que ese malestar que se le instaló en medio de las costillas lo provoca el lugar donde está, a la espera de que salga su ómnibus. Desestima el cansancio y los nervios; no son los que hacen que se sienta mal, menos aún la culpa. Tampoco el miedo. El bar de la terminal de Retiro le resulta un sitio horrendo. Busca otra palabra y no la encuentra; sabe muy bien quién la usa cada dos o tres frases. O solía usarla, se corrige. No quiere recordar esa palabra justo en este momento. Él no la usa, nunca la usó, preferiría no hacerlo ahora pero descarta cualquier otro sinónimo y se le impone a pesar del esfuerzo por evitarla: horrendo. La luz de tubo le lastima los ojos irritados de poco sueño, esa luz blanca y fría se le clava como una aguja justo en el lagrimal izquierdo. Las sillas de caño negro no ayudan; enclenques de tanto que deben de haberlas arrastrado de un lado a otro sobre el mosaico gris, con la cuerina rota que deja ver una goma espuma vieja, sucia, inflada, que se derrama deforme en cada tajo. El olor a comida se mezcla con el de un producto de limpieza indefinido pero potente que llega desde el baño, y el resultado de ese encuentro de olores es peor que el que cada uno de ellos podría producir por separado. Un aparato de televisión de última generación, instalado en un soporte gris que cuelga en un ángulo, casi del techo, está sintonizado en un canal de noticias, sin voz. Román sospecha que ese televisor, que desentona por su modernidad con el resto del mobiliario, debe de estar allí desde el último Mundial de Fútbol. Recuerda dónde vio la mayoría de aquellos partidos, en un LED de 60 pulgadas con HD que parecía un microcine, rodeado de sushi que él no comía ni come, y del equipo. Equipo, otra palabra que quisiera evitar.

UNA LIBRERÍA EN BERLÍN


Inocentemente te tiras de cabeza a una novela que crees puede pertenecer a ese "género" de la Metaliteratura que tanto te gusta, inocentemente esperas una historia de huida y supervivencia trufada de libros, autores, citas literarias, heroicas aventuras con la literatura como acompañante e incluso como leit motiv y.......????
Te encuentras un diario de una señora que en algún momento de su vida regentó una librería en Berlín (creo que se menciona en las 20 primeras paginas) escrito con muy buena voluntad y el talento justito para no resultar una tomadura de pelo.
A esto le añadimos el prefacio laudatorio de Patrick Modiano y la historia de la señora que nunca escribió nada más y el hallazgo del manuscrito en un mercadillo y......, me recuerda peligrosamente a otro hallazgo reciente con un sustantivo en común.......!
Lo único que se me ocurre acerca de esta novela es: PRESCINDIBLE.
Por cierto, al genio de la editorial que decidió traducir el título de la novela “Rien où posser sa tête” por Una librería en Berlín habría que denunciarle por estafa en primer lugar y despedirle para que se dedique a otra cosa para terminar.
La recomiendo??? Pues no sabría que decir, se deja leer pero no tiene nada destacable, nada que no hayamos leído mil veces escrito con mayor talento, nada que nos sorprenda y, aunque parezca mentira, nada de librerías, nada de libros y nada de Berlín.

Sinopsis (Ed. Seix Barral)
En 1921, Françoise Frenkel, una joven apasionada por la lengua y la cultura francesas, funda la primera librería francesa de Berlín, La Maison du Livre.
Una librería en Berlín es un libro de testimonio en primera persona en el que la autora cuenta su itinerario: en 1939 huye de Alemania, donde ya es imposible difundir libros y periódicos franceses, y se exilia en Francia, buscando refugio. Pero, en realidad, tras la ocupación nazi de territorio francés, lo que le espera es una vida de fugitiva hasta que, en 1943, logra cruzar la frontera suiza de manera clandestina y encontrar en Ginebra, al fin, la libertad. Una librería en Berlín nos descubre, milagrosamente intactas, la voz, la mirada y la emoción de una mujer valiente cuya fuerte determinación la llevará a conseguir escapar de un destino trágico.

Una librería en Berlín (fragmento)

IAL SERVICIO DEL PENSAMIENTO FRANCÉS EN ALEMANIA
No sé muy bien a qué edad se remonta mi vocación de librera, en realidad. Ya desde muy niña me podía pasar las horas muertas hojeando un libro con imágenes o un gran volumen ilustrado.
Mis regalos preferidos eran los libros, que se acumulaban en las estanterías de las paredes de mi habitación de niña.
Por mis dieciséis años, mis padres me dejaron encargar una librería hecha a mi gusto. Mandé construir, según mis propios planos, un armario que, para asombro del carpintero, debía tener las cuatro caras acristaladas. Coloqué aquel mueble de mis sueños en medio de mi cuarto.
Para mi mayor satisfacción, mi madre me lo consintió todo, y yo podía contemplar a mis clásicos en las bellas encuadernaciones hechas por sus editores y a los autores modernos y contemporáneos forrados amorosamente con papeles de mi fantasía.

EL INVIERNO DEL LOBO


Duodécima entrega de la serie de novelas protagonizadas por Charlie "Bird" Parker, detective privado en Maine, desde que abandonó la policía neoyorkina.

Reencontrarse con Charlie Parker es volver a lo oscuro, a lo perdido, a la Norteamérica profunda en la que conviven dioses, monstruos y creencias llegadas de otros tiempos y otros lugares.
Volver a Charlie Parker es volver, también a Angel y a Louis, a una amistad inquebrantable sellada con sangre; volver también a los espíritus protectores y volver a la violencia que nace, siempre, del hombre.
El Invierno del Lobo es, quizás, atípica entre las novelas protagonizadas por Parker y eso le añade valor, el valor de Parker sin Parker y no digo más.
Piérdanse en Prosperous y no se arrepentirán o si???

Sinopsis (Ed. Tusquets)
Es necesario que Charlie Parker muera para que el pueblo de Prosperous sobreviva.
La comunidad de Prosperous, en Maine, siempre ha medrado mientras otros sufrían. Sus habitantes son ricos, sus hijos tienen el futuro asegurado. Rehúye a los forasteros. Protege a los suyos. Y en el centro de Prosperous se encuentran las ruinas de una antigua iglesia, transportada piedra a piedra desde Inglaterra siglos antes por los fundadores del pueblo… Unas ruinas que esconden un secreto.
Pero varios hechos, entre ellos la muerte de un sintecho, atraen a Prosperous al investigador privado Charlie Parker, obsesionado y letal. Parker es un hombre peligroso, al que le mueve no sólo la compasión, sino también la ira y el deseo de venganza. Los habitantes de Prosperous perciben en Parker una amenaza peor que cualquier otra que hayan afrontado en su larga historia. Parker, a su vez, encontrará en ellos a los adversarios más despiadados con los que jamás se ha enfrentado. Y es que se ha decidido que Charlie Parker muera para que el pueblo de Prosperous sobreviva.

El invierno del lobo (fragmento)

1
La casa era intencionadamente anónima: ni demasiado grande ni demasiado pequeña, ni muy bien conservada ni deteriorada en modo alguno. Ocupaba una reducida parcela próxima a los aledaños de Newark, en el condado de New Castle, zona densamente poblada del estado de Delaware. La ciudad había sufrido un duro golpe cuando en 2008 cerró la planta de montaje de Chrysler junto con Mopar, el cercano centro de distribución de piezas. Así y todo, albergaba aún la Universidad de Delaware, y veinte mil estudiantes pueden gastar mucho dinero si se lo proponen.
No era de extrañar que el hombre a quien pretendíamos dar caza hubiese elegido Newark. Estaba cerca de las líneas divisorias de tres estados —Pensilvania, Nueva Jersey y Maryland—, y a sólo dos horas de la ciudad de Nueva York en coche. Aunque, claro está, sólo era una más de las numerosas guaridas que se había procurado, adquiridas en el transcurso de los años por el abogado que lo protegía. El único rasgo distintivo de esta casa residía en el nivel de consumo energético: las facturas de los suministros eran más altas que las de otros inmuebles que habíamos descubierto. Daba la impresión de que éste se utilizaba con regularidad. No se trataba de un mero almacén para las piezas de su colección. Venía a ser una base de operaciones.
Ese hombre se hacía llamar Kushiel, pero nosotros lo conocíamos por el sobrenombre de "El Coleccionista». Había matado a un amigo nuestro, Jackie Garner, a finales del año anterior. El Coleccionista, conforme a su versión de la justicia, diría que se había limitado a aplicar la ley del talión, pues en verdad Jackie cometió un craso error y, como consecuencia del cual, murió una mujer cercana al Coleccionista. En venganza, éste, sin la menor compasión, abatió de un tiro a Jackie, que estaba desarmado y de rodillas, y además dejó claro que ahora nos hallábamos todos bajo la mira de su arma. Posiblemente intentábamos dar caza al Coleccionista por lo que le había hecho a uno de los nuestros, pero también porque sabíamos que, tarde o temprano, él decidiría que quizá bajo dos metros de tierra representaríamos una amenaza menor para él. Así que nuestro propósito era acorralarlo y matarlo mucho antes de eso.

TODO ESTO TE DARÉ


Gracias a Chelo Casas y otras amigas de esta página he leído la novela premiada de Dolores Redondo y la he leído en un tiempo record, os preguntaréis ¿tan buena es?, pues......., es un thriller entretenido, muy entretenido que ahonda en los vicios de las últimas novelas de Redondo, a saber:
- Lenguaje un poco pedante, pero con errores tan obvios como "harmonía", "seto de gardenias", "bacteria botulínica", "cloro en el aire", "queso de Urzúa", "narcótico efecto de precipitación y alerta"......, esto último referido a un desmayo o lipotimia producido por calor y humedad excesivos. Podría seguir, pero para muestra valen estos botones.
- Longitud excesiva, mucho "marear la perdiz", a veces sin propósito o con propósitos que como lectora, se me ocultan.
- Personajes poco desarrollados, por decirlo de alguna manera, los malos son maaaaalísimos, los buenos unos santos y los que son "un poco malos y un poco buenos" resultan patéticos en sus arrepentimientos.
- Situaciones estereotipadas, los ricos, los pobres, la guardia civil, los yonkis......
- Ese raro gusto por el "esoterismo" que ya mostró en la trilogía del Baztan, que no aporta nada a la novela y en todo caso si quería incluirlo, Nosa Señora do Corpiño da para mucho más....

No quiero abundar más en los defectos de la novela porque la verdad es que me ha resultado muy entretenida, me ha sorprendido la ubicación del cultivo floral de gardenia en Galicia, cuando el tradicional es de camelia y alguna otra cosa...., pero puedo admitirla como licencia poética y la resolución precipitada del caso, que ya se adivinaba desde la mitad del libro, en fin, no está mal pero ese "bombo y platillos" de los medios me parece excesivo aunque coincide con la tendencia habitual en nuestro país y es lo habitual en los Premios Planeta.
¿La recomendaría?
Para pasar el rato.

Sinopsis (Ed. Planeta)
Una muerte inesperada. Un oscuro secreto familiar. La búsqueda de la verdad en el corazón de una tierra legendaria. 
En el escenario majestuoso de la Ribeira Sacra, Álvaro sufre un accidente que acabará con su vida. Cuando Manuel, su marido, llega a Galicia para reconocer el cadáver, descubre que la investigación sobre el caso se ha cerrado con demasiada rapidez. El rechazo de su poderosa familia política, los Muñiz de Dávila, le impulsa a huir pero le retiene el alegato contra la impunidad que Nogueira, un guardia civil jubilado, esgrime contra la familia de Álvaro, nobles mecidos en sus privilegios, y la sospecha de que ésa no es la primera muerte de su entorno que se ha enmascarado como accidental. Lucas, un sacerdote amigo de la infancia de Álvaro, se une a Manuel y a Nogueira en la reconstrucción de la vida secreta de quien creían conocer bien.

La inesperada amistad de estos tres hombres sin ninguna afinidad aparente ayuda a Manuel a navegar entre el amor por quien fue su marido y el tormento de haber vivido de espaldas a la realidad, blindado tras la quimera de su mundo de escritor. Empezará así la búsqueda de la verdad, en un lugar de fuertes creencias y arraigadas costumbres en el que la lógica nunca termina de atar todos los cabos.

Todo esto te daré (fragmento)

SALVAVIDASLa llamada a la puerta sonó autoritaria. Ocho golpes seguros, rápidos, de quien espera ser atendido con diligencia. El tipo de requerimiento que jamás podría confundirse con la llamada de un invitado, de un operario o de un repartidor. Más tarde, pensaría que al fin y al cabo es así como uno espera que llame la policía.
Durante un par de segundos observó pensativo el cursor parpadeante al final de la última frase. La mañana se le estaba dando bien, mejor que en las últimas tres semanas, porque, aunque odiaba admitirlo, escribía más a gusto cuando estaba solo en casa, cuando trabajaba sin horarios, liberado de las rutinarias interrupciones para la comida o la cena, y simplemente se dejaba llevar. En aquella fase de la escritura siempre era igual, Sol de Tebas estaría terminada en un par de semanas, quizá antes si todo iba bien. Y hasta entonces aquella historia sería lo único en su vida, su obsesión, lo que le ocuparía día y noche, lo único en lo que pensaría. Lo había experimentado con cada novela, una sensación a la vez vital y demoledora, como una inmolación que adoraba y temía experimentar a partes iguales. Un acto privado que, por experiencia, sabía que en esos días no le convertía en la mejor compañía. Levantó la vista para dirigir una rápida mirada hacia el pasillo que separaba el salón donde escribía de la puerta de entrada, y de nuevo al cursor que parecía palpitar cargado ya de las palabras que tenía que escribir. Un engañoso silencio se apoderó de la estancia creando por un instante la falsa esperanza de que el intempestivo visitante se hubiera rendido. Pero no lo había hecho; percibía la presencia de su energía imperativa y quieta al otro lado de la puerta. Volvió la mirada de nuevo hasta el cursor y acercó las manos al teclado decidido a terminar la frase. En los segundos que siguieron llegó incluso a contemplar la posibilidad de no hacer caso a la llamada que, insistente, retumbaba de nuevo en el pequeño recibidor.

ZAPATOS ITALIANOS


"La vida es una frágil rama que se mece en el abismo" (Zapatos Italianos).
Reconozco que durante años me he resistido a leer libros de Mankell no protagonizados por Wallander, es tal la perfección del personaje que me ha resultado muy difícil "superarlo" e imaginar a Mankell escribiendo para otros protagonistas.
Esta semana he terminado Zapatos Italianos, obra de 2012, que narra la "post-vida" de Fredrik Wellin, cirujano jubilado, que ha huido de todo para vivir en una isla acompañado de un perro, un gato y un hormiguero....., visto así no anima a la lectura pero es comenzar y el universo Mankell te inunda como un tsunami ártico, te congela y descongela el corazón en una frase y "revuelve" todos tus sentimientos.
Zapatos Italianos es una novela sobre las oportunidades perdidas, la cobardía, el egoísmo, la desesperación y el amor.
Con personajes no tan alejados de Wallander, como pudiera pensarse, el autor se pasea por las relaciones familiares con una elegancia y una sensibilidad tan agudas que la historia fluye sin freno ante tus ojos y en tu mente, dejando un poso difícil de olvidar y muy difícil de digerir.
Me ha gustado muchísimo¡¡¡

Sinopsis (Ed. Tusquets)
El emocionante relato de un hombre sacudido por la tragedia al que le ha llegado el momento de afrontar su propio pasado.
Fredrik Welin, médico retirado, vive solo y alejado del mundo en una isla junto a la costa sueca; pero su reclusión voluntaria se ve perturbada un día por la llegada de un antiguo amor al que abandonó en el pasado. Se trata de Harriet, quien, gravemente enferma, ha venido a pedirle que cumpla una antigua promesa de juventud: llevarla a una laguna del norte del país. Con su presencia, Harriet saca a Fredrik de la apatía en que éste vive sumido y es el detonante para que él se decida a saldar viejas cuentas con su pasado. Entre otras, el terrible secreto que lo alejó de la profesión y por el que decidió huir del mundo, o el conocimiento de Louise, la hija que Harriet tuvo de él y cuya existencia le había ocultado. Los vínculos que se establecen entre padre e hija mientras cuidan de Harriet durante su lento y doloroso final ayudarán a Fredrik, al tiempo que expía su propia culpa, a recuperar la capacidad de vivir sin esconderse de la realidad.

Zapatos italianos (fragmento)
"Entré y comencé a registrar metódicamente el interior de la caravana. Pese a ser tan pequeña, contenía una sorprendente cantidad de espacios de almacenamiento. Louise lo mantenía todo en perfecto orden. Le gustaba vestir prendas de color castaño, a veces de un rojo apagado, principalmente los colores de la tierra.
En un pequeño cofre rústico que llevaba la fecha de 1822 pintada sobre la tapa encontré, para asombro mío, una gran cantidad de dinero. Billetes de mil y de quinientas que sumaban un total de cuarenta y siete mil coronas. Después seguí revisando unos cajones que contenían documentos y cartas. Lo primero que encontré fue una fotografía firmada de Erich Honecker. En el reverso decía que había sido tomada en 1986 y que la había enviado la embajada de la República Democrática Alemana en Estocolmo. En el cajón había además otra serie de fotografías, todas ellas firmadas. De Gorbachov, de Ronald Reagan, así como de lo que supuse eran dignatarios de estados africanos a los que yo no conocía. Asimismo, hallé la instantánea de un primer ministro australiano cuyo nombre no pude descifrar.
Continué mi revisión con el siguiente cajón, que estaba lleno de cartas. Tras haber leído cinco de ellas, empecé a intuir a qué se dedicaba mi hija. Escribía cartas a los líderes políticos de todo el mundo para protestar por su modo de tratar tanto a sus ciudadanos como a las personas de otros países. En cada sobre había una copia de la carta que ella misma había enviado, escrita con su abigarrada caligrafía, y la respuesta recibida. A Erich Honecker le había escrito, en inglés y con tono apasionado, que el muro que dividía Berlín era una vergüenza. La respuesta a aquella carta había sido una fotografía en la que Honecker aparecía sobre un podio saludando a una borrosa masa popular. En otra carta, Louise le decía a Margaret Thatcher que debía tratar con decencia a los mineros del carbón que estaban en huelga. No hallé ninguna respuesta de la Dama de Hierro. O, al menos, el sobre estaba vacío, salvo por la fotografía de la mencionada dama blandiendo el bolso. Pero ¿de dónde había sacado Louise el dinero? No conseguí averiguarlo. "

EL NADADOR EN EL MAR SECRETO


Dice el autor que escribió este relato (apenas 45 páginas) de un tirón y con lágrimas en los ojos de la primera a la última página.
Yo lo he leído por recomendación de un amigo de LIBROS, también ha sido de un tirón y con lágrimas en los ojos de la mitad en adelante.
Describe Kotzwinkle los sentimientos más profundos del ser humano con una sensibilidad y un pudor que emocionan y estremecen.
Los dos momentos clave en la vida de una persona narrados con un lenguaje poético que sale del corazón del escritor hacia el corazón del lector, sin intermediarios, sin barreras, sin contención!!!!
Muy, muy recomendable!!!
Gracias Miguel.

Sinopsis (Ed. Navona)
Un pequeño libro con el mas grande de los temas: el nacimiento y la muerte.
Decir exactamente lo que pasa seria como parafrasear un poema.

El nadador en el mar secreto (fragmento)
"Se levantó y pasó junto a las otras visitas. Pasillo adelante una vez más, escaleras abajo, los pensamientos se le agolpaban: poner punto final a la tarea, recuperar la libertad.
Cruzó el aparcamiento deprisa y puso en marcha la camioneta. Con un vago recuerdo del paradero de la funeraria, circuló por la ciudad. Ellos se encargarán de todo y así no tendremos que intervenir.
Los quitanieves trabajaban aún y en algunos sitios se veía gente que retiraba a paladas la nieve de las aceras y de las entradas de las casas. Laski dobló una esquina y vio la casona colonial, con una placa en blanco y negro en uno de los grandes y viejos pilares. Era un lugar enorme, con muchas ventanas. Laski miró por la ventana principal y vio un largo recibidor flanqueado por ramos de flores y lámparas con pantallas opacas. El aparcamiento estaba lleno de coches. Había tres limusinas grandes llenas hasta arriba de flores y una cuadrilla de hombres profesionalmente sombríos, vestidos de negro, esperaban junto a la cuarta, que tenía cortinas grises de terciopelo en las ventanillas. Se abrió una puerta lateral del edificio y asomó el extremo de un ataúd hecho de madera oscura, tan pulida que brillaba con fuerza, y decorado con filigranas de plata y oro. Agarrados a los soportes de latón brillante iban los profesionales, con rostros de cera, silenciosos, acarreando el ataúd chillón y gigantesco hacia el coche fúnebre, cuyo conductor abrió con gestos suaves la puerta trasera y les ayudó a deslizarlo hacia el interior, lujosamente protegido por las cortinas. Laski siguió conduciendo, horrorizado. ¿Qué diablos estaba a punto de hacer?
Le temblaban las manos en el volante. Con los ojos en lágrimas, bajó la mirada hacia su cajita de pino, en el asiento contiguo, y apoyó una mano en su superficie, suave y lisa. "



BAILANDO CON ELEFANTE Y GATO


«Cerraba los ojos, se despojaba de sus fuerzas, interrumpía la respiración. En definitiva, se abandonaba a sí mismo y se arrojaba al mar del ajedrez. Se dejaba morir…» Bailando con elefante y gato
Editada por Funambulista con una bellísima factura, me traje de la biblioteca esta novela de Yoko Ogawa (la segunda que leo de la autora) y, aunque no resultó como esperaba (inconvenientes de no leer la... sinopsis y dejarse arrastrar por la cuidada edición) he disfrutado de la hermosa sencillez con la que Ogawa narra cualquier historia.
Quizás debería ser aficionada al ajedrez para apreciar en toda su plenitud esta historia protagonizada por un niño nacido con los labios sellados, criado por sus abuelos y "prisionero" de sus miedos.
En una suerte de fábula japonesa, el pequeño en lugar de adquirir seguridades, va adquiriendo miedos, el miedo a quedar atrapado, el miedo a crecer, el miedo a morir, el miedo a vivir.....y así entre jugadas de ajedrez, transcurre su vida relacionándose con adultos, cada vez más excéntricos, y perdiendo la perspectiva a medida que gana conocimientos ajedrecísticos.
No me ha apasionado la historia, pero me ha encantado la forma de narrar de Ogawa que hace de la historia más improbable un reto para disfrutar, sin más, de la belleza de sus palabras.

Sinopsis (Ed. Funambulista)
Un niño nacido con los labios sellados y que pasa mucho tiempo en la terraza de unos grandes almacenes —fascinado por la historia de la elefanta Indira, que se hizo demasiado grande para poder salir— descubre una mañana el cuerpo de un hombre ahogado en la piscina de la escuela. Tratando de averiguar quién era, el chico conocerá a un obeso jugador de ajedrez que vive en un autobús y que lo convertirá en su heredero espiritual: le enseñará a jugar como nadie, como si fuera ciego, escondiéndose debajo del tablero, sin ver ni a su oponente ni las piezas. Emulando las estrategias del gran Alexander Alekhine (1892-1946), insólito campeón mundial, nuestro protagonista se meterá dentro de un autómata para hacer frente a un rival inesperado: la tragedia de tener que crecer.
A través de la improbable relación de un niño con unos peculiares adultos en torno a una pasión compartida, como es la del ajedrez, Yoko Ogawa (autora de los acla­mados La fórmula preferida del profesor, Perfume de hielo y El museo del silencio) sigue explorando, con su exquisita sensibili­dad, los vínculos más ocultos que entretejen los seres humanos.

Bailando con elefante y gato (fragmento)

Comenzaré esta historia mucho antes de que a Little Alekhine le empezaran a llamar así, cuando no tenía más nombre que aquel común y corriente que sus padres le habían puesto.
Apenas cumplidos los siete años acompañaba a menudo a su hermano pequeño y a su abuela a un centro comercial, y esto se convertía en un pequeño motivo de alegría, a pesar de que los veinte minutos de trayecto en autobús se le hacían insoportables, como se le hubieran hecho en cualquier otro medio de transporte. A tal inconveniente se le añadía el hecho de que en ningún momento recibía la promesa de que fueran a comprarle un juguete o de que pudiera disfrutar de un menú infantil en un restaurante del centro comercial,  o de cualquier otra de las cosas que se hacen en estos lugares y, sin embargo, aquello no dejaba de ser una maravillosa experiencia para el.

sábado, 30 de diciembre de 2017

NOSOTROS EN LA NOCHE


RESEÑADA por Clara Glez. para LIBROS, 15 Diciembre de 2016.

Ir cumpliendo años tiene sus ventajas y sus inconvenientes. la soledad, el poder repasar tu vida desde otra perspectiva, atreverte a cosas sin importante el que dirán...
En esta novela, cortita, entrañable, agridulce se manejan los sentimientos sin sobresaltos, con la serenidad que dan los años, y porque no decirlo también con la valentía que supone el haber recorrido ya mucha parte del camino.
Una septuagenaria, visita a su vecino para proponerle dormir juntos, no pasar frio por las noches ..y compartir "sus soledades" así empieza esta novela... y mientras se comparte almohada, se comparten confidencias, recuerdos, historias...
Merece la pena, la recomiendo.

Y esta es mi opinión sobre esta magnífica novela:
"Y entonces llegó el día en que Addie Moore pasó a visitar a Louis Waters. Fue un atardecer de mayo justo antes de que oscureciera.
Vivían a una manzana de distancia en la calle Cedar, en la parte más antigua de la ciudad, con olmos y almezos y un arce que crecían a lo largo del bordillo y jardines verdes que se extendían desde la acera hasta las casas de dos plantas. Durante el día había hecho ca
...lor, pero al anochecer había refrescado. Addie recorrió la acera bajo los árboles y giró ante la casa de Louis.
Cuando él salió a la puerta, Addie le preguntó: ¿Puedo entrar a hablar de una cosa contigo?" Our souls at night
Esta novela me la recomendó una amiga de LIBROS, gracias Clara, y yo os la recomiendo a tod@s!!!!!
No sé si calificarla de historia de amor o amistad, sé, eso sí, que es una joya literaria cuyo título original describe mucho mejor la profundidad de la obra, de los sentimientos y del encuentro de dos almas que en la noche comparten vida, pensamientos, desdicha, felicidad y alejan la soledad.
Me ha encantado!!!

Sinopsis (Ed. Literatura Random House)
Nosotros en la noche es una joya escondida: una historia concisa, conmovedora, agridulce pero a la vez inspiradora, con el revelador sentido del humor que solo poseen aquellos que han llegado a una edad en la que poco importa lo que puedan decir los demás.

Louis Waters y Addie Moore llevan gran parte de su vida siendo vecinos en la apacible localidad de Holt, en Colorado. Ambos enviudaron hace años y acaban de franquear las puertas de la vejez, por lo que no han tenido más opción que acostumbrarse a estar solos, sobre todo en las horas más difíciles, después del anochecer. Pero Addie no está dispuesta a conformarse. De la forma más natural, decide hacer una inesperada visita a su vecino: «Me preguntaba si vendrías a pasar las noches conmigo. Y hablar...». Ante tan sorprendente propuesta, Louis no puede hacer otra cosa que acceder.
Al principio se sienten extraños, pero noche tras noche van conociéndose de nuevo: hablan de su juventud y sus matrimonios, de sus esperanzas pasadas y sus miedos presentes, de sus logros y errores. La intimidad entre ambos va creciendo y, a pesar de las habladurías de los vecinos y la incomprensión de sus propios hijos, vislumbran la posibilidad real de pasar juntos el resto de sus días.

Nosotros en la noche (fragmento)

1

Y entonces llegó el día en que Addie Moore pasó a visitar a Louis Waters. Fue un atardecer de mayo justo antes de que oscureciera.
Vivían a una manzana de distancia en la calle Cedar, en la parte más antigua de la ciudad, con olmos y almezos y un arce que crecían a lo largo del bordillo y jardines verdes que se extendían desde la acera hasta las casas de dos plantas. Durante el día había hecho calor, pero al anochecer había refrescado. Addie recorrió la acera bajo los árboles y giró ante la casa de Louis.
Cuando él salió a la puerta, Addie le preguntó: ¿Puedo entrar a hablar de una cosa contigo?
Se sentaron en el salón. ¿Te traigo algo de beber? ¿Un té?
No, gracias. Puede que no me quede el tiempo suficiente para beberlo. Addie miró a su alrededor. Bonita casa.
Diane siempre tenía la casa bonita. Yo lo he intentado.
Sigue bonita. Hacía años que no entraba.
Addie miró por las ventanas al jardín lateral donde caía la noche y a la cocina donde una luz brillaba sobre la pila y las encimeras. Todo estaba limpio y ordenado. Louis la observaba. Era una mujer atractiva, a él siempre se lo había parecido. De joven había tenido el pelo moreno, pero ahora era blanco y corto. Todavía conservaba la figura, aunque algo rellenita en la cintura y las caderas.
Te preguntarás qué hago aquí, dijo ella.
Bueno, no creo que hayas venido a decirme lo bonita que está la casa.
No. Quiero proponerte algo.
¿Sí?
Sí. Tengo una propuesta.
Vale.
No es de matrimonio, dijo ella.
Tampoco se me había ocurrido.

En el año 2017 se estrenó la película basada en la novela, dirigida por Ritesh Batra e interpretada por Jane Fonda y Robert Redford, en los papeles protagonistas.
En el siguiente enlace todos los detalles y algunas críticas sobre la película:
https://www.filmaffinity.com/es/film356408.html





BOTAS DE LLUVIA SUECAS


He terminado esta mañana la última novela de Henning Mankell y todo el día he estado meditando que escribir sobre ella.....
En Botas de lluvia suecas el protagonista que conocimos en Zapatos Italianos tiene 8 años más y los mismos problemas, soledad, egoísmo, remordimientos, incapacidad de expresar sus sentimientos y un deseo irracional de "arreglarlo todo" en la última fase de su vida. Si todo es...to no fuese suficiente su casa se incendia y aquí se inicia una "trama" con claras reminiscencias "wallanderianas" de investigación, sospechas y muertes en cadena.
Escrita con la maestría habitual de Mankell es una novela en la que los temas importantes son personales pero tangencialmente se vuelven sociales, resultando una crítica contundente de una sociedad que quiere encerrarse en si misma y achaca todos sus problemas a lo que "llega de fuera" sin analizar que desde dentro, a veces, acecha lo peor.
Nuestro protagonista quiere unas botas de lluvia SUECAS y al final las consigue......
Muy recomendable.

Sinopsis (Ed. Tusquets)
Una entrañable narración sobre las ganas de vivir, y de enamorarse, en el otoño de la vida.
Una noche de otoño, Fredrik Welin —el protagonista de la exitosa novela Zapatos italianos— se despierta cuando un incendio arrasa su casa. A sus sesenta y nueve años, este solitario médico jubilado sale penosamente de entre las llamas, calzado con unas botas de lluvia (pero ambas pertenecen al pie izquierdo). Sólo quedan, a la mañana siguiente, unas ruinas malolientes: ha perdido su casa y todas sus pertenencias, y tiene que mudarse a un remolque, una caravana que pertenece a su hija. Cuando por el archipiélago se extiende el rumor de que él mismo ha provocado el fuego, la policía lo interroga, sin llegar a acusarlo. De pronto, Louise, la hija de Fredrik, viaja hasta la isla por motivos misteriosos. Todos esos acontecimientos sumen en el desconcierto a Fredrik, que ese otoño ve como se acerca a la vejez, también a la muerte, y desea saldar todas sus cuentas con la vida. Sin embargo, al conocer a Lisa Modin, una periodista que trabaja para el diario local y que investiga el incendio, se despiertan en él sentimientos que llevaban mucho tiempo muertos. Cuando en Nochevieja decide celebrar una fiesta a la que invita a sus amigos, se desata un incendio en otra casa del archipiélago.

Botas de lluvia suecas (fragmento)

1
Mi casa se quemó una noche de otoño hace casi un año. Fue un domingo. Había empezado a levantarse viento a primera hora de la tarde. Al anochecer pude ver en el anemómetro que las ráfagas de aire superaban los veinte metros por segundo.
El viento era del norte y muy frío a pesar de que aún estábamos a principios del otoño. Cuando me acosté a las diez y media, pensé que esa era la primera tormenta otoñal que cruzaba la isla que había heredado de mis abuelos maternos.
Otoño, pronto invierno. Una noche, el agua del mar empezaría a helarse lentamente.
Era la primera vez ese otoño que me metía en la cama con calcetines. El frío lanzaba su primera embestida.
El mes anterior había arreglado el tejado haciendo un gran esfuerzo. Fue un trabajo enorme para un pequeño artesano. Había muchas tejas viejas y rotas. Mis manos, que una vez sujetaron bisturís en complicadas operaciones quirúrgicas, no estaban hechas para manejar ásperas tejas.
Ture Jansson, que había sido cartero aquí fuera, en las islas, durante toda su vida profesional, pero ya estaba jubilado, se había encargado de transportar las tejas nuevas desde el puerto. No quiso ni siquiera cobrar por ello. Como yo he instalado una consulta improvisada en mi cobertizo para ocuparme de todos los achaques imaginarios de Jansson, quizá pensara que debería devolverme el favor.
Durante todos estos años he examinado abajo, en el embarcadero junto al cobertizo, sus supuestos dolores de brazos y espalda. He alcanzado el estetoscopio colgado de un señuelo para cazar eíderes y he constatado que sus pulmones y su corazón sonaban como debían. En todos esos reconocimientos repetitivos, Jansson siempre ha demostrado encontrarse en perfectas condiciones. Su miedo a enfermedades imaginarias ha sido tan exagerado, que yo, durante los muchos años que ejercí de médico, nunca vi nada parecido. Ha sido cartero y, además, hipocondriaco a tiempo completo.

NADA CRECE A LA LUZ DE LA LUNA



Me conquistó la portada, me encandiló el título, me atrajo la editorial y me convenció la sinopsis:
"..en la estación de tren de una gran ciudad, un paseante, casi un voyeur, descubre a una mujer todavía joven que deambula solitaria ya de noche. La mujer sigue al hombre hasta la casa de éste, y allí le ofrece o su cuerpo o su historia, como en los cuentos del lejano Oriente. El hombre elige conoce...r la vida de la mujer...." Por tanto me traje esta novela de la biblioteca y me ha costado mucho trabajo leerla, la he terminado porque no me gusta dejar libros a medias y por si en algún momento la historia tenía "una vuelta" que la hiciese única; pero ha resultado un largo monólogo de una mujer patológicamente enamorada de un maltratador emocional, un individuo despreciable que ha arruinado su vida con la inestimable colaboración de ella, todo ello relatado prolijamente a un desconocido, con toques de análisis social de la clase trabajadora y crítica al ambiente opresivo de los pueblos pequeños. Teniendo en cuenta que la novela fue publicada en los años 40 he de reconocerle el mérito pero me ha resultado tremendamente aburrida.

RESEÑA DE CLARA GLEZ. para LIBROS, 4 de Abril de 2017

Nada crece a la luz de la luna - Torborg Nedreaas
Me cuesta trabajo escribir sobre este libro, con todo lo que me ha sacado, con lo que me hi...zo pensar.
No conocía a la autora, y llegó a mis manos de forma casual, leí un poco de su biografía y sin más me puse a leerlo, no suelo leer ni la sinopsis. Y de pronto una desconocida me pregusta si la dejo contarme su historia…Ella no podía dejar de hablar, y yo no podía dejar de escucharla.
Así de esta manera empieza el libro, con una desconocida contando su vida a un desconocido, entre vino y tabaco.
Tanto el hombre desconocido como yo no podíamos hacer otra cosa que escuchar su relato.
Un relato donde nos cuenta su vidas, sus amores, su vida agobiante en un pueblo noruego donde como en casi todos los pueblos hay unos visillos desde donde clasificar a la gente, juzgarla.
Una vida donde hay amores secretos, ocultos, miedo represión.
Una vida donde el desamparo, la soledad, el miedo, la incomunicación están presentes... Y de pronto esta mujer está dispuesta a contar su historia, a un desconocido. Puede que así le sea más fácil, puede que así pueda escaparse de esa cárcel en la que se ha convertido su vida.
No puedo dejar de oír el grito de este libro, el grito de mujeres condenadas a vidas y a decisiones difíciles , como el aborto, como la desigualdad… No puedo más que invitar a que lo leáis.
Y acabo con este párrafo que he releído varias veces:
"¿Sabes lo que me dijo un hombre una vez?… No, ya se desbocan mis pensamientos, pero quiero contarte lo que un hombre me dijo una vez. Me dijo: «Nada crece a la luz de la luna». Bueno, me desespero terriblemente porque no consigo expresar lo que quiero que entiendas ahora… Tenemos demasiado miedo a que nos dé directamente la ardiente luz del sol. Anhelamos el sol, pero nos sentimos más seguros bajo la luz de la luna. Lo entiendes, ¿verdad? En fin, tal vez lo entiendas cuando esta noche haya acabado."

Sinopsis (Ed. errata naturae)
Esta fascinante novela comienza de un modo tan sugerente como misterioso: en la estación de tren de una gran ciudad, un paseante, casi un voyeur, descubre a una mujer todavía joven que deambula solitaria ya de noche. La mujer sigue al hombre hasta la casa de éste, y allí le ofrece o su cuerpo o su historia, como en los cuentos del lejano Oriente. El hombre elige conocer la vida de la mujer.
Así, a lo largo de una noche sabremos quién fue ella, quién fue aquel profesor y amante al que veneró de jovencita, cuáles fueron sus deseos y sus esperanzas, sus ansias y sus frustraciones, cuál fue su amor tormentoso y clandestino. Café, alcohol y cigarrillos, los ruidos de la noche, unos pasos en el piso de arriba, un portazo que se oye en casa de algún vecino, un tranvía que frena al final de la calle… son los elementos que se acompasan con la voz de la desconocida. Pasan las horas, y la voz de la mujer, como un susurro a veces ingenuo, a veces desgarrador, entrega al hombre (pero en realidad a los lectores) su íntimo caudal de recuerdos, liberando así un apasionante relato que llevaba demasiado tiempo escondido. Publicada por primera vez en Noruega en 1947, Nada crece a la luz de la luna es uno de los grandes clásicos modernos nórdicos, leído por las distintas generaciones desde entonces, e incluso convertido en obra de teatro y película décadas después de su publicación. Es, seguramente, la novela idónea para presentar a los lectores en español la obra de esta autora clave, Torborg Nedreaas: maestra en atmósferas tan dramáticas como sensoriales y llenas de matices, muy crítica con las desigualdades sociales a la vez que atenta a la prodigiosa naturaleza de Noruega.

Nada crece a la luz de la luna (fragmento)"Lo que mi madre revelaba de la ignorancia de nuestra clase —esa que se nos impone, esa a la que se nos somete a la fuerza— era lo que convierte a muchas de nuestras mujeres en poco más que unas sucias rameras cuando se enfrentan a duras pruebas. En la desesperación de mi madre asomaba la detestable escoria de la estupidez, la obscena cara oculta de la estupidez, la estúpida crueldad de quien pierde la cabeza a causa de la impotencia y no logra superar la prueba.
Y mi padre se hallaba solo bajo la sombra de lo innegable, que se aproximaba sin tapujos. Era el hombre más solo que la muerte ha visto jamás. Yo debí haberle entendido. Era su hija. Pero huí. Me encerré en mí misma y me aferré con avaricia a mi felicidad sin querer adentrarme en la sombra de su agonía, pues la silenciosa lucha contra la mezquindad de mi casa, la lucha contra un cansancio que quería encadenarlo a una silla y apartarlo del trabajo, la lucha contra aquello que le quitaba el aliento con la intención de ahogarlo… Era una lucha contra una muerte horrible.
Ya lo he dicho. Traicioné a mi padre en el momento más difícil. Buscaba la embriaguez en casa de Johannes. Me aferraba a esa embriaguez sin querer ver nada más. Sólo en una ocasión sentí algo por los míos. Fue una noche en que mi hermana estaba llorando en la cama. Me acosté con ella para consolarla. Pero ya te he contado esto, ¿no?
Sentí algo vivo en su interior. Algo que vivía en su barriga. Y puesto que me sentía tan sola y… Bueno, fue muy extraño porque no había nada vivo en mi interior. Amaba, era feliz, pero sólo se trataba de mi cuerpo, nada dentro de él. Pero ya te he hablado de esto antes. No te impacientes. Bueno, voy a contarte ahora qué ocurrió.
Ocurrió durante el otoño. Una buena y mala época. Pero aparté a un lado lo malo y me desentendí de ello. Mi vida estaba junto a Johannes. Eran las noches en que me escapaba a su casa al amparo de la oscuridad y la lluvia otoñal. Él me esperaba y me amaba. Pero en casa se dieron cuenta. Se dieron cuenta de que pasaba las noches fuera y de que por la mañana estaba cansada y a menudo llegaba tarde a la oficina. La situación era incómoda en la oficina y mi madre se puso ordinaria, como las madres suelen hacer con la mejor intención. En casa yo era fría y rencorosa, pero me volvía cálida y alegre cuando salía en la oscuridad sabiendo que Johannes me esperaba sentado en su apacible salita de estar tras las cortinas cerradas.
Y entonces ya no pude más. Un día ya no pude más. Por supuesto, yo veía que me había vuelto insoportable en casa. Me defendía poniéndome en plan grosero. Me sentía vulgar y horrible por ello, y muy enferma. Y ya no pude más. "






LA NOVENA


Siempre es un placer leer a Marcela Serrano.
La novena es su décima novela en la que, aparentemente, un hombre es protagonista....., digo aparentemente porque la verdadera protagonista es una mujer y todas las mujeres que han vivido antes que ella, viven en ella y vivirán después de ella.
Es verdad que en esta ocasión Serrano recurre en demasía a los estereotipos sociales y culturales y trufa su novela de "casualidades" a veces un poco forzadas pero aun así es un placer leer su prosa sencilla y su relato de una época que aún está clavada en el corazón de Chile como si fuera un puñal.
Para no olvidar la ignominia, leed a Marcela Serrano es como un bálsamo que no cura pero alivia.
Sinopsis (Ed. Alfaguara)
La esperada nueva novela de la autora de Diez mujeres es la historia de una traición.
Un conmovedor relato en el que Marcela Serrano nos interna en los afectos de varias generaciones de mujeres que enfrentan el desgarro de ser traicionadas y el de traicionar a su vez.
«¿Quieres saber quiénes me han traicionado? Todos.»
Producto de un accidente absurdo Miguel Flores, un estudiante universitario, es detenido en una protesta contra la dictadura de Pinochet. Tras unos días en el calabozo del cuartel policial es enviado a una zona agrícola cercana a la capital, pero aislada de toda actividad política.
Sin recursos y obligado a firmar a diario en el retén de Carabineros, sus días transcurren en soledad y con el mínimo para subsistir. Su presencia genera temor u odio entre los lugareños, salvo en Amelia, una mujer de mediana edad, viuda y dueña del fundo La Novena. Ella acoge al relegado, le abre las puertas de su casa y con ello las de un mundo cultural y social que representa todo lo que Miguel más detesta.
Poco a poco la relación entre ellos hace que él cuestione sus prejuicios, en tanto que sus sentimientos pasan del profundo deseo de odiarla a una atracción y un vínculo permanente. Pero el azar y la actividad política de Miguel provocarán un giro en extremo, doloroso e irreparable para ambos.

La Novena (fragmento)

Santiago de Chile, septiembre 2005

Cuando alguna vez le preguntaron cómo soportaba nadar en las aguas tan frías del Pacífico sur, ella respondió, eso no importa, si ya estoy congelada. Con aquel testimonio en la memoria, Miguel Flores abre las puertas del viejo armario blanco y con el dedo sigue la huella de la pátina cobriza que recorre la veta de la madera. Ha aprendido que vestirse cada mañana es contar una historia de sí mismo. Aún no está seguro de qué debe contar, de qué quiere contar en este día. Verifica distraído que una de las bisagras de la puerta del armario está a punto de vencerse y romper toda complicidad con los pequeños tornillos que la sujetan. Rememora con alguna nostalgia su llegada al país y la mañana aquella en que compró este mueble en el Parque de los Reyes, lo complicado que fue el traslado hasta su departamento porque no cabía en el ascensor, y la mala cara de los de la mudanza al verse obligados a subir las escaleras con ese enorme trasto a cuestas. Mira sus trajes con esmerada atención: cuál será el más adecuado, de ningún modo el pantalón gris con chaqueta azul, no, odia por principio el rebaño de la ciudad, manso, aburrido, uniforme. Quiere ir muy atildado, presentar sus respetos vestido de un solo color, ojalá oscuro de acuerdo a las circunstancias, gris quizás, o tal vez ese terno marengo que usa para las reuniones con los clientes más importantes, buen corte, solo dos botones, la caída elegante e impecable, hasta lo confundieron con un miembro del directorio de la empresa a la que iba a asesorar la última vez que se lo puso, él en un directorio, para la risa. Sí, a Amelia le habría gustado este traje marengo, qué lástima, ella nunca lo vio bien vestido, un adefesio, le decía sin ningún escrúpulo, que cuál era el afán de andar tan desastrado. Los zapatos y los calcetines siempre deben ser negros, pero se pregunta por la camisa, blanca o celeste, no es tan obvio, aunque el blanco solemniza, por Dios, qué cantidad de camisas blancas, en qué momento las ha acumulado, tan prístinas y bien planchadas, qué trabajo se da la Brígida todos los martes, plancha que te plancha, porque los jueves cocina y pasa la aspiradora, ella tiene sus reglas. Elije la que más le gusta, roza el sólido algodón y la huele, qué placentero es el olor a limpio. Ahora la corbata. Como si con cierta pereza lo hubiese postergado porque siempre le resulta lo más difícil, mira el colgador donde tiene agrupadas las corbatas y se marea un poco, el celeste, el amarillo y el rojo son los colores que priman en ese revoltijo de sedas, rayas, círculos, óvalos, flores de lis, incluso algunos animalitos, no es que falte el diseño. Luego de una lenta inspección elige una azul oscura con un leve toque de amarillo, las líneas diagonales parecen ranuras de luz que se han ladeado, delgaditas, muy delgaditas, interrumpiendo la severidad del azul. Ya enteramente vestido se mira con descaro en el espejo, igual que Mary Anne en Manchester cada vez que salían de fiesta, tanto que te miras, le decía, y ahora es él quien lo hace porque algo adentro, bien adentro, le pide estar a la altura. De reojo, al partir, por décima vez, echa un fugaz vistazo al recorte de su barba.

UN HOMBRE OCIOSO


En una hermosa edición, muy propia de la editorial Gallo Nero, he leído la primera de las dos novelas escritas por Yusuf Atilgan, escritor turco desconocido, hasta ahora, para mi.
Y en Un hombre ocioso, Atilgan relata en cuatro estaciones la vida de C. un hombre que vive de rentas y dedica su tiempo infinito a oponerse a todo lo que conoce, a todos los convencionalismos y a todas las opiniones que considera alienantes y absurdas. Dedica su tiempo infinito, además, a la búsqueda de la mujer perfecta porque, en el fondo, C. es un hombre profunda y absolutamente solo.
Narrada con gran precisión en algunos momentos se hace pesada por la dificultad insuperable de empatizar con los personajes, aun así se trata de una propuesta literaria original que me ha gustado leer por la exploración de los sentimientos y el estilo narrativo.

Sinopsis (Ed. Gallo Nero)
«Amo a Yusuf Atilgan, el escritor intensamente turco que se inspiró en Faulkner.»
Orhan Pamuk
Un hombre que se opone a todo, que se enfrenta a todo, que resiste a todo: un hombre ocioso. Ni tan siquiera tiene nombre. «C.» es como Yusuf Atilgan lo llama, así, escuetamente.
C. no aguanta lo ordinario, lo monótono, las comodidades de la rutina, es superior a sus fuerzas. Hombre extraño y ansioso, desilusionado del amor, deambula por las calles de Estambul decidido a no sucumbir a las expectativas de la familia y de la sociedad.
Publicada en 1959 y a menudo comparada con El extranjero de Albert Camus, Un hombre ocioso desafió los valores de la joven República de Turquía poniendo de manifiesto el sentido de alienación del hombre moderno.

Un hombre ocioso (fragmento)

« A su lado pasaba un vendedor de roscas con la tabla en la cabeza y la hora pegada: lo paró y le compró una.»
"Como los asideros del tranvía. Te estiras y te agarras. Unos se agarran a su riqueza, otros a su puesto de director, otros, a su trabajo, a su arte. Los hay que se agarran a sus hijos. Todo el mundo cree que su asidero es el mejor, el más alto. No ven que es ridículo."