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domingo, 17 de septiembre de 2017

EL AMIGO ANDALUZ



RESEÑADA por Ricardo Cortat para LIBROS, el 4 de Mayo de 2014
Cosas que hacen que un libro chirríe: Una leyenda en la portada en la que ponga algo parecido a 'Mejor que...' o a 'Llega la novela que te hará recordar a...'
Tengo en las manos un libro que pone, traduzco, "... monumental, entre Stieg Larsson y The Sopranos'. Para salir corriendo.
A eso ayuda también la imagen de la portada, un tipo morenote de pelo oscuro y ojos verdosos. En la versión en castellano incluso tiene reflejos rubios. Típico, muy típico. Vamos, que se le presupone guapo, pero guapo, guapo.
He acabado 'El amigo andaluz' de Alexander Söderberg, un thriller sobre una enfermera que no sabe donde se mete ni con quien anda hasta que ya no puede salirse ni puede dejar de andar.
Se parece a Larsson como un huevo a una castaña (de Tony Soprano no opino porque no tengo el gusto) pero tiene un ritmo que ayuda.
Una novela donde los tiros van que vuelan, donde  los protagonistas,  los secundarios y  los extras reciben más palos que si salieran en una película de Steven Seagal y donde todo es lo suficientemente enredado para que encaje finalmente. ¡Que menos!
Palomitas puras y duras. Bien cocinadas y bien servidas pero ya está.
Nada de Larsson. Ya le gustaría.

Sinopsis (Ed. SUMA)
Lars Vinge es un policía que acaba de ser ascendido a una unidad de investigación criminal. Todo iría bien de no ser porque su nueva jefa es una persona corrupta y despiadada y sus nuevos colegas lo humillan constantemente, despertando en él unos deseos de venganza que le hacen recuperar sus viejos hábitos de automedicación, nefastos para su ya de por sí maltrecha salud mental. Una de las investigaciones los conduce hasta Héctor Guzmán, un andaluz residente en Estocolmo que, tras la fachada de un editor de libros, resulta ser un capo dedicado al tráfico de drogas y otros negocios sucios en el país. Inesperadamente, Guzmán tiene un accidente y lo que en principio parece un mero atropello fortuito al final parece ser un intento de asesinato. Una serie de circunstancias hacen que Héctor se cruce en el destino de Jens, un pequeño traficante de armas, que se verá envuelto en una conspiración que le viene muy grande...Con un estilo directo y un argumento trepidante, que al mismo tiempo indaga en la fragilidad y la humanidad de sus personajes, El amigo andaluz es una novela redonda que consigue combinar de manera magistral lo mejor de Tarantino con la prosa sin concesiones de Jens Lapidus y la sutileza psicológica de Patricia Highsmith.

El amigo andaluz (fragmento)

Prólogo

Su mirada alternaba entre el espejo retrovisor y la carretera. Ella no podía ver la moto, no en aquel momento. Hasta hacía un instante había estado allí, llenando el espejo y desapareciendo de nuevo. Conducía por el carril derecho de la autopista, intentando buscar la protección delante de otros coches.
Él no paraba de mirar hacia atrás. Estaba tratando de dirigir la conducción desde el asiento del copiloto, pero ella no oía sus palabras, solo percibía el pánico en su voz.
La silueta de la moto aparecía y desaparecía en el espejo retrovisor, y así continuaba mientras maniobraba para abrirse paso entre los coches que iban tras ellos. Llevó el coche al carril izquierdo y pisó el acelerador. El motor vibró por las altas revoluciones. Metió la quinta y última marcha, estaba mareada.
Sintió un soplo de aire junto a los pies, las balas tenían que haber entrado por ahí abajo. Los agujeros producían un silbido que se mezclaba con el rugido del motor, el ruido la atravesaba por completo. No recordaba cuánto tiempo llevaban en el coche cuando empezaron los disparos; había sucedido de manera repentina e irreal. Había visto que el piloto de la moto llevaba un casco azul con visera oscura, y que el sicario con el fusil automático que iba detrás llevaba un casco negro sin visera. Se habían cruzado las miradas por un momento, había visto el vacío en sus ojos.