Mostrando entradas con la etiqueta Rosamund Lupton. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Rosamund Lupton. Mostrar todas las entradas

sábado, 26 de agosto de 2017

DESPUÉS


RESEÑADA por Amelia Ruíz para LIBROS, el 10 de Noviembre de 2013.
Mala.
“Después” de Rosamund Lupton.
Especie de thriller en que alguien quema un colegio y los espíritus de las dos heridas se encargarán de resolver el caso. Más o menos. La terminé porque me tenía fascinada el nivel de cursilería con que estaba escrita.
Pero este comentario es subjetivo.

Sinopsis (Ed. Principal de los Libros)
Un día perfecto, un crimen terrible. En una tarde tranquila, Grace advierte que la escuela donde estudia su hijo Adam, de ocho años, y donde trabaja su hija Jenny, de diecisiete, está en llamas. Consigue localizar a su hijo, que está fuera de peligro, pero se da cuenta de que su hija sigue en su interior, de modo que irrumpe en el edificio para salvarla.
Cuando recupera la conciencia, Grace se encuentra en el hospital y tanto ella como su hija están gravemente heridas, debatiéndose entre la conciencia y la muerte corporal, observando a médicos y familiares a su alrededor, pero sin poder comunicarse con ellos.
Pronto se descubre que el incendio fue provocado. La pregunta, sin embargo, es quién lo provocó y por qué, ya que en ese momento muy pocas personas se encontraban en el edificio. Grace, que intuye el peligro que aceha a su familia y teme por sus hijos, comenzará su propia investigación sobre los hechos para descubrir quién está detrás del complot contra su idílica familia.

Después (fragmento)

"No podía moverme, ni siquiera levantar el dedo meñique o parpadear. Ni siquiera podía abrir la boca para gritar.
Luchaba, tanto como podía, para mover la enorme y pesada masa en que mi cuerpo se había convertido, pero estaba atrapada bajo el inmenso casco de un barco que había naufragado y reposaba en el lecho del océano. No podía moverme.
Tenía los párpados cerrados como si estuvieran soldados. Los tímpanos, rotos. Las cuerdas vocales, arrancadas.
Oscuridad total y un silencio absoluto e implacable a mi alrededor; una milla de agua negra por encima de mi.
Sólo puedo hacer una cosa, me dije, pensando en ti, y me deslicé fuera del barco hundido que es mi cuerpo para ascender por la inmensidad del océano negro.
Nadé hacia arriba, hacia la luz del sol, con todas mis fuerzas."