Ha generado tanta polémica este libro entre los lectores (la critica especializada es unánime en sus alabanzas) que, he dudado mucho antes de leerlo, no había leído antes nada de Manuel Vilas, escritor y poeta, tal vez he comenzado por el libro equivocado.
Ordesa son 157 capítulos y 10 poemas; los capítulos son cortos, una suerte de pildorazos o disparos de realidad que, a veces, te llevan de la mano a tu infancia o adolescencia (el autor es de mi generación), el problema es la repetición, a partir de un cierto momento el autor se repite incesantemente, quizás sea intencionado, cuando estamos tristes la obsesión repetitiva se apodera de nuestra mente y creo que eso es lo que quiere mostrar el autor. Tiene, el libro, un tono lúgubre de derrota y autocompasión que resulta un tanto exagerado y hace que la empatia inicial se transforme en impaciencia. Nada gravísimo le ha ocurrido al autor; sí, han muerto sus padres (a una edad bastante avanzada); sí, se ha divorciado; sí, sus hijos le ignoran...como a tantos otros, nada justifica el tono apocalíptico y lastimero del autor y le resta credibilidad e interés, al menos para mi.
Menos páginas y menos autocompasión hubieran generado un libro mejor porque es indudable que el autor escribe bien y tiene " intención", pero le puede la aspiración de ser original. Ni tan bueno, ni tan malo, para mí, decepcionante.🌞
Sinopsis ( ed. Alfaguara)
"Escrito a ratos desde el desgarro, y siempre desde la emoción, este libro es la crónica íntima de la España de las ultimas décadas, pero también una narración sobre todo aquello que nos recuerda que somos seres vulnerables, sobre la necesidad de levantarnos y seguir adelante cuando nada parece ha erlo posible, cuando casi todos los lazos que nos unían a los demás han desaparecido o los hemos roto. Y sobrevivimos.
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