lunes, 1 de enero de 2018

UN NIDO DE VÍBORAS


Vigésimosexta entrega de la serie de novelas protagonizadas por Comisario Salvo Montalbano, siciliano y vecino de Vigàta.

Cada día me gusta más Montalbano, o sea Andrea Camilleri, la sabiduría, la ironía y hasta la delicadeza con que se enfrentan a lo más podrido del alma humana crecen con los años y hacen sus novelas imprescindibles para mi.
Magnífica, Nido de víboras, a la altura de la hermosa e inquietante portada que Salamandra ha elegido para su traducción al castellano.
Como siempre, he disfrutado mucho!!

Sinopsis (Ed. Salamandra)
Con el paso de los años, las pesadillas que desvelan a Salvo Montalbano se han vuelto más sofisticadas y extrañas. En esta ocasión, el veterano policía cree encontrarse junto a Livia, semidesnudos, en una exuberante selva tropical. Pero no es una selva de verdad: los troncos y el follaje están pintados al óleo, y Livia y él se hallan dentro de un enorme cuadro de Henri Rousseau. Y cuando un trueno ensordecedor devuelve al comisario a la realidad, ésta se materializa con un vagabundo que busca refugio bajo el porche de su casa. Poco sospecha Montalbano que ese encuentro fortuito contiene un elemento clave de su próxima investigación, uno de los casos más turbios y difíciles de su carrera. Esa misma mañana aparecerá muerto el contable Barletta, con señales inequívocas de violencia. Al igual que la falsa jungla del sueño, el muerto no es lo que parecía. Lejos del tranquilo gestor jubilado que simulaba ser, Barletta se revela como un personaje de mil caras, a cuál más sorprendente e inesperada: un hombre de negocios implacable, un verdadero malabarista de la extorsión y el chantaje, y al mismo tiempo un padre de familia hipócrita y desalmado. A pesar de los numerosos casos a los que se ha enfrentado en su brillante carrera, Montalbano comprueba, una vez más, que el ser humano —con sus pasiones, sus deseos, sus debilidades— no deja de ser un misterio insondable.En esta vigesimoquinta obra de la serie, Andrea Camilleri logra superarse y se afianza como maestro de la novela negra contemporánea. Los lectores podrán disfrutar una vez más del singular sentido del humor del comisario Montalbano, un personaje que perdurará como ejemplo perfecto del savoir-vivre mediterráneo.

Un nido de víboras (fragmento)

1De la virginidad de la intrincada selva en la que, sin comerlo ni beberlo, habían acabado Livia y él no cabía la más mínima duda, porque una decena de metros atrás habían visto un letrero de madera clavado en el tronco de un árbol en el que, con letras grabadas a fuego, estaba escrito: «selva virgen.» Parecían Adán y Eva, puesto que estaban los dos completamente desnudos y se cubrían las llamadas vergüenzas (las cuales, pensándolo bien, no tenían nada de vergonzoso) con las clásicas hojas de higuera, en este caso de plástico, que habían comprado en un tenderete de la entrada por un euro cada una. Como eran rígidas, molestaban un poco. Claro que lo que de verdad molestaba era andar descalzos.
Cuanto más avanzaba, más se convencía Montalbano de que ya había estado en aquel lugar en otra ocasión, pero ¿cuándo? Una cabeza de león divisada entre los árboles, que no eran árboles sino helechos gigantescos, le ofreció la explicación.
— Livia, ¿tú sabes dónde estamos?
— Claro que lo sé, en una selva virgen. ¿No has visto el letrero?
— Pero ¡es que se trata de una selva pintada!
— ¿Cómo que pintada?
— ¡Estamos dentro de El sueño de Yadwigha, el célebre cuadro del Aduanero Rousseau!
— ¿Tú estás mal de la cabeza?
— Ya verás como tengo razón, dentro de poco vamos a tropezarnos con Yadwigha.
— ¿Y tú de qué conoces a esa señora? — preguntó Livia, con la mosca detrás de la oreja.
En efecto, al poco rato se tropezaron con Yadwigha, la cual, al verlos, se quedó tan tranquila en el diván, tumbada cuan larga era, aunque se llevó el dedo índice a los labios para pedirles que guardaran silencio, y dijo:
— Está a punto de empezar. En una rama se posó un pájaro, quizá un ruiseñor. Tras hacer una especie de reverencia a los visitantes, atacó Il cielo in una stanza.

CÍRCULOS CERRADOS


Segunda entrega de la serie de novelas protagonizadas por el  inspector de policía de Nacka, Thomas Andreasson y su amiga la abogada Nora Linde residente en la Isla de Sandham, integradas en la llama Serie Sandhamn (Suecia)


Para una tarde gris de fin de semana, nada como una novela intrascendente que no te "rompa" mucho la cabeza.....
Fiel a su peculiar estilo editorial Maeva edita ahora la segunda novela de la Serie Sandhamn, tras haber publicado previamente la primera, la tercera y la cuarta.....!
No importa, la "literatura" de Sten es comparable a esos seriales, radiofónicos o televisivos, en los que aunque te pierdas 50 capítulos, enseguida te pones al día...
Thomas Andreasson es policía, triste, desorganizado y, sobre todo, indeciso....Nora Linde es abogada, trabaja en un banco (aunque realmente no sé cuando trabaja) pero dedica la mayor parte de su tiempo a perder el tiempo y a discutir con su marido.....
Poco más puedo contar, tramas previsibles, personajes que parecen ocultar algo que cualquier lector descubre enseguida y toooodo muuuuy trillado!

Sinopsis (Ed. Maeva)
Los círculos selectos también esconden terribles secretos. Segunda entrega de una serie negra de éxito internacional.
Como cada mes de julio, la famosa regata del archipiélago de Estocolmo está a punto de empezar. Hay especial expectación ante quién será el ganador en esta edición. El nuevo yate de lujo del rico abogado y miembro del prestigioso Real Club de Vela, Oscar Julander, es el que cuenta con las mejores posibilidades. De repente, esta embarcación amaina la marcha y su capitán cae abatido de un disparo ante la estupefacta mirada de la multitud. Lo que a primera vista parece un desafortunado accidente, pronto se revela como el resultado de un juego sucio.
El detective Thomas Andreasson se alía nuevamente con Nora Linde, abogada local y amiga, para investigar el suceso.

Círculos cerrados (fragmento)


1
Domingo
Una voz femenina continuaba lentamente la cuenta atrás en la calle Dieciséis a través del transceptor. –Diez, nueve, ocho...
El mar era un hervidero de barcos. Los grandes veleros, con velas formidables y cascos relucientes, se concentraban en la línea de salida a un par de millas de la isla de Sandhamn. Fuera de la zona de salida, los espectadores maniobraban con sus barcos para conseguir la mejor posición. Con los prismáticos en la mano, seguían impacientes el espectáculo que se desarrollaba delante de sus ojos.
El barco que daba el pistoletazo de salida, un buque dragaminas prestado por la Marina, se encontraba a estribor de la línea de salida. Las grandes velas se desplegaban como globos para aprovechar la débil brisa al máximo.
Las perspectivas de una regata emocionante eran perfectas.
La voz continuó su cuenta atrás para anunciar la salida.
–Siete, seis...
Los veleros que participaban en la regata maniobraban hábilmente para tomar posición. Era un milagro que no chocaran. A veces, los separaban solo unos decímetros en su lucha por conseguir el mejor sitio, lo más cerca posible de la bandera naranja de barlovento.
–Cinco, cuatro...
Cuando faltaran tres segundos, se daría el pistoletazo de salida. El sonido tardaba unos segundos en escucharse.
El vicepresidente primero del Real Club de Vela de Sandhamn, el abogado Oscar Juliander, estaba de pie, con las piernas abiertas y seguro de sí mismo, al timón de su magnífico velero Swan, una elegante belleza bautizada con el nombre de Emerald Gin. Tenía setenta y un pies de eslora y contaba con una tripulación de quince hombres. Lo había comprado por una pequeña fortuna –más de doce millones– en el astillero de Nautors, en Finlandia.

LA VIDA INVISIBLE DE EURÍDICE GUSMÂO


Porque Eurídice, para que lo sepáis, era una mujer brillante. Si le hubieran dado cálculos elaborados, habría proyectado puentes. Si le hubieran dado un laboratorio, habría inventado vacunas. Si le hubieran dado páginas en blanco, habría escrito clásicos. Pero lo que le daban eran calzoncillos sucios que Eurídice lavaba muy rápido y muy bien para, después, sentarse en el sofá, mirarse las uñas y ...pensar en qué debería pensar.”
Gracias a mi querida Clara Glez.  he leído esta opera prima de la joven escritora brasileña Martha Batalla y el debut es prometedor, muy prometedor.
Discrepo de la "publicidad oficial" de la editorial que cuenta que se trata de "la divertida historia de dos hermanas cariocas, Eurídice y Guida...", la novela es la historia de Eurídice narrada en tercera persona y tangencialmente la de Guida y otros personajes de la novela; divertida es una palabra que jamás utilizaría para definir esta novela, se me ocurren otra muchas, sensible, imaginativa, triste.....con un toque mágico que la vincula directamente a las de Laura Esquivel o Ángeles Mastretta, pero divertida no, definitivamente no.
He disfrutado mucho de la lectura y, además me ha hecho pensar.
La recomiendo y agradezco a Clara su recomendación!!


RESEÑA DE CLARA GLEZ para LIBROS, 28 de Abril de 2017.
La vida invisible de Eurídice Gusmão - Martha Batalha

Hace tiempo escribí un esbozo de cuento sobre los gusanos de seda. En como crecían para convertirse en mariposas a las que se guardaban en cajas de zapatos.
Leyendo este libro, con el que me he divertido, he vuelto a pensar en mis célebres gusanos. Más que en los gusanos en las mariposas en que se convertían. Esas mariposas que aunque tuviesen alas no podrían salir de la caja de zapatos en donde se les confiscaban y en donde ponían sus huevos.
Eurídice es un poco como aquellas mariposas. Parecía ser libre pero sin salir de la caja de zapatos donde le tocó vivir. En esa caja que parecía cambiar cada vez que emprendía una nueva forma con la que rellenar su tiempo, su vida. Esa caja que al fin de cuenta, y por muy bonita que fuera era su cárcel.
Una novela con mujeres , mujeres de muchos tipos, que te pueden hacer reír y llorar en un abrir y cerrar de ojos.
La forma de narrar, me ha encantado. Me recuerda a Angeles Mastretta .No puedo más que recomendarla.


Sinopsis (Ed. Seix Barral)
Una divertida novela sobre dos hermanas cariocas, Eurídice y Guida, quienes, en los años cincuenta, tomaron caminos muy diferentes. Mientras Guida se escapa de casa para vivir su amor con un prestigioso doctor que acabará abandonándola y dejándola sola a cargo de una criatura, Eurídice, en cambio, se comporta de manera ejemplar y sigue lo que se espera de ella: su mejor perspectiva de vida es ser una buena esposa, ama de casa y madre. Pero en realidad ninguna de las dos es feliz con su elección, y deberá pasar mucho tiempo hasta que se den cuenta de que la felicidad que anhelan está escondida en los lugares más inesperados.

La vida invisible de  Eurídice Gusmão (fragmento)

1Cuando Eurídice Gusmão se casó con Antenor Campelo, la añoranza que sentía de su hermana se había disipado. Ya era capaz de sonreír cuando escuchaba algo gracioso y podía leer dos páginas seguidas de un libro sin levantar la cabeza para pensar dónde estaría Guida en ese momento. Es verdad que seguía buscándola, escrutando por la calle los rostros femeninos, y una vez estuvo segura de haber visto a Guida en un tranvía rumbo a Vila Isabel. Después, ese convencimiento pasó, como todos los otros que había tenido hasta entonces.
Por qué Eurídice y Antenor se casaron nadie lo sabe con exactitud. Unos creen que la boda se consumó porque José Salviano y Manuel da Costa ya estaban comprometidos. Otros señalan la enfermedad de la tía de Antenor como responsable de la unión,ya que ahora no podía lavar la ropa del sobrino con el jabón especial de lavanda o prepararle la sopa de arroz con pollo con trozos transparentes de cebolla, porque aunque a Nonô le gustaba el sabor de la cebolla, detestaba su textura; un único trozo camuflado entre las alubias era capaz de provocarle náuseas y eructos una tarde entera a base de Alka­ Seltzer. Hay quien piensa, incluso, que Eurídice y Antenor se enamoraron de verdad y que esa pasión duró los tres minutos de un baile lento en una fiesta de máscaras del Clube Naval.


TE VERÉ BAJO EL HIELO


Primera entrega de la serie de novelas protagonizadas por la inspectora Erika Foster, policía en Londres (Reino Unido).

"El teléfono cesó de sonar y dejó un silencio ensordecedor. Entonces la vio. Justo debajo de donde se hallaba acuclillado, distinguió la cara de una chica. Los hinchados ojos castaños lo miraban con vacuidad. Un enmarañado mechón de pelo oscuro se había fundido con el hielo. Pasó un pez lentamente, rozando con la aleta los labios de la chica, que se hallaban ligeramente entornados, como si estuviera a punto de hablar." 

Ummmm.....Este es el tono general de la novela, demasiados adjetivos para mi gusto....., aunque la trama es interesante y los personajes tienen posibilidades; la he leído rápidamente, en parte porque cuando el autor empieza a adjetivar (nieve blanquísima rodeada de verdes árboles que destacaban sobre el cielo parduzco.....por ejemplo) me saltaba párrafos completos.
Me emocionó la sinopsis, nueva policía en Londres Erika Foster, comisaría jefe, vuelve a la ciudad, y......., para mi gusto le falta calidad literaria y le sobran frases rebuscadas, puede que sea un efecto de la traducción pero al leer la semblanza que la editorial hace del autor " Robert Bryndza, número uno, bestseller en Amazon, Usa Today....." creo que no.
En fin, prescindible, tanto como el "llamamiento" que el autor hace al final para que sus lectores le escriban y le digan su opinión....!

Sinopsis (Ed. Roca)
Su cuerpo está congelado.
Sus ojos cerrados han visto la muerte.
Sus labios parecen estar a punto de decirnos algo.
Un joven descubre el cadáver de una chica debajo de una gruesa capa de hielo en un parque del sur de Londres.
La detective Erika Foster será la encargada de dirigir la investigación del caso, mientras lucha contra sus propios demonios personales. Cuando Erika comienza a indagar en el pasado de la víctima, todo parece apuntar que su asesinato está conectado con el homicidio de otras tres mujeres que han sido encontradas con signos de estrangulación, las manos atadas y, sospechosamente, también bajo las aguas congeladas de otros lagos en Londres.
Poco a poco, Erika se aproxima a la verdad, sin sospechar que el asesino quizá también la observa y se acerca cada vez más a ella.

Te veré bajo el hielo (fragmento)

Prólogo
La acera relucía a la luz de la luna mientras Andrea Douglas-Brown se apresuraba por la calle desierta. Sus altos tacones resonaban en el silencio con frecuentes cambios de ritmo, a causa del abundante vodka que había ingerido. El ambiente de enero era helado y sentía pinchazos en las piernas desnudas. Ya habían pasado Navidad y Año Nuevo y habían dejado un vacío frío y aséptico. Los escaparates se sucedían junto a ella, bañados en una espesa oscuridad únicamente interrumpida por el rótulo parpadeante de una mugrienta tienda de licores. Había un indio dentro, inclinado sobre el resplandor de un portátil, pero parecía tan absorto que no llegó a ver a la chica que pasó dando airadas zancadas.

LOS MANDIBLE Una familia: 2029-2047


" Mi padre se horrorizaría ante lo que me estás proponiendo, quemar libros es la antítesis de lo que los Mandible representamos...." Me ha costado un poco terminar esta novela en la que la ciencia económica ocupa un lugar tan importante que se hace, a ratos, un tanto "espesa".
Distopía en estado puro que transcurre en los EEUU post-crack del 29 (2029)....., tendría su gracia si no fuese tan terriblemente larga.
Sinopsis (Ed. Anagrama)
Estados Unidos, 2029. Un siglo después, ha vuelto a suceder. El dólar se desploma, la inflación se dispara, el país se dirige hacia la bancarrota.
Y la familia Mandible, protagonista de esta sagaz y feroz novela distópica que, llevándonos al futuro, nos habla de realidades muy reconocibles, va a padecer las consecuencias.
Prósperos y sofisticados, aunque también disfuncionales, los Mandible esperan la herencia del nonagenario patriarca. Pero como fallece en plena crisis, la lluvia de millones con la que contaban hijos y nietos se disipa en el aire. Y los miembros de esta familia de clase alta se ven envueltos en situaciones para ellos inauditas: Carter, incapaz de afrontar el pago de la residencia de su senil madrastra, se ve obligado a acogerla en su casa; Avery se indigna porque ya no puede permitirse comprar aceite de oliva; su hermana Florence tiene que alojar a familiares que se han quedado sin hogar en su pequeño apartamento; a Nollie, escritora que ha vivido felizmente expatriada en París, no le queda más remedio que regresar a un país que le resulta irreconocible... Sólo la generación más joven, representada por el adolescente Willing, bicho raro y economista autodidacta, es capaz de buscar salidas imaginativas a la crisis.
Lionel Shriver, con su colmillo retorcido y su mala baba marca de la casa, mueve con habilidad a unos personajes desbordados por la situación, a los que retrata con mirada penetrante y humor salvaje. Y nos presenta unos Estados Unidos en los que el sueño americano muestra su lado más oscuro: las vallas fronterizas ya no sirven para evitar que entren inmigrantes, sino para que los ciudadanos no escapen; algún estado declara su independencia; el presidente –de nombre latino– decide crear una nueva moneda para sustituir al desmoronado dólar...

Los Mandible. Una familia: 2029-2047 (fragmento)

2029
1. AGUA GRIS–¡No uses agua limpia para lavarte las manos!
Aunque pretendía ser un recordatorio amable, la reprimenda resonó como un grito severo. Florence no quería parecer eso que su hijo llamaba cacavieja, pero bueno..., las normas de la casa eran sencillas. Y Esteban las desacataba sistemáticamente. No hacía falta malgastar agua para dejar claro que no era un calzonazos sometido (en cierto modo) por una mujer mayor que él. Esteban era un hombre tan peligrosamente apuesto que ella, en casi todo lo demás, le permitía hacer lo que se le antojase.
–Perdóname, Padre, porque he pecado – dijo Esteban entre dientes, metiendo las manos en el cubo de plástico del fregadero donde recogían los residuos líquidos. Unas tiras de col flotaban en el borde. –Eso que estás haciendo ahora no tiene sentido, ¿verdad? – dijo Florence–. ¿Usar el agua gris cuando ya has usado la limpia?
–Sólo hago lo que me mandan – dijo Esteban.
–Eso sí que es una novedad.
–¿Qué te ha puesto de tan buen humor? – Esteban se secó las manos, grasientas ahora, en un paño de cocina más grasiento aún (otra norma: un rollo de papel de cocina dura seis semanas)–. ¿Algo va mal en Adelphi?
–En Adelphi las cosas sólo van mal – refunfuñó Florence–.Drogas, peleas, robos. Niños con eczemas... que no paran de chillar. Así son los albergues para indigentes. Si quieres que te diga la verdad, no entiendo por qué es tan difícil conseguir que los que viven ahí tiren de la cadena, algo que en esta casa es el máximo lujo.
–Ojalá encontrases otra cosa.
–A mí también me gustaría. Pero no se lo digas a nadie. Cambiar de trabajo arruinaría mi reputación de santa. – Florence siguió cortando la col, una verdura económica aunque costase veinte pavos. No sabía cuánta más col podría soportar su hijo.

domingo, 31 de diciembre de 2017

EL PRODIGIO


RESEÑA DE CLARA GLEZ para LIBROS, 31 de Mayo de 2017.
El prodigio - Emma Donoghue
Una novela emotiva, inteligente, apasionada, que conjuga el suspense psicológico con una historia de un amor que se enfrenta al Mal.
Quizás en estos momentos no me vea capaz de relatar lo que esta novela me produjo. La terminé anoche de madrugada. No quiero desvelar nada de lo que sucede, sino las impresiones que me causó.
Antes que nada decir , que soy creyente, pero quizás por eso, sea muy crítica con lo que acontece. Ya tuve mis peleas, con la jerarquía en varias ocasiones, y que por ello me animé a estudiar teología para seglares ( tres años , rango de licenciatura), en mis años críticos, para poder rebatir con conocimiento de causa.
Podría decir que me recordó a del color de la leche…que me rebelé, que casi lloré , que me gustó mucho, y eso sí…hay que ponerse en la época… pero aun así vi muchas situaciones semejantes es tiempos más cercanos. Y muy recientemente en unas declaraciones en la canonización en los pastorcillos de Fátima. Quizás esto sea una reseña demasiado personal, pero no puedo opinar de otra manera y necesito la necesidad de expresarlo. Hace unos días el Papa dijo al canonizar a esos niños, que los canonizaba por su fe, no por sus sacrificios para aplacar a un Dios justiciero ..Yo creo en Dios…no en un teniente coronel con ganas de matar al que se le rebele.
Y recomiendo leerla, es tierna, es “ real” , sus personajes están perfectamente descriptos, y tiene su intriga…eso si hay mucha jaculatoria de por medio, pero en mi opinión son necesarias para entender la historia.
Creo que hoy voy a tiras por uno de esos insípidos de mujeres que buscan amores con tipos guapos y con dinero. Porque creo que otra cosa no sería capaz e leer…o me voy a por mí Alfonso Ussia y su marqués de Sotoancho…que me arranque si puede unas risas.
Sinopsis
Irlanda, 1840. En un pequeño pueblo se corre la voz de que una niña de once años, hija de una humilde familia de granjeros, lleva cuatro meses sin comer. Anna O’Donnell es inteligente, devota y muy discreta. En un ambiente extremadamente católico, todos la creen una santa. El caso ha llegado a la prensa, y recibe a diario visitas que dejan a la familia limosnas y regalos.
Elizabeth Lib Wright, una joven enfermera inglesa, es contratada por un comité de ciudadanos del pueblo para vigilar a la niña durante dos semanas, con el objeto de otorgar credibilidad al «milagro».
Se turnará en esa vigilancia con una monja, la hermana Michael.
Lib no se fía de la eficacia de la religiosa, pero es casi imposible controlarla a ella también,
además de a la niña y los padres de esta. William Byrne es un periodista al que envían allí para cubrir el caso, y Liz acaba refiriéndole algunas de sus observaciones.
Está convencida de que se trata de un fraude, pero resolver el misterio no resultará sencillo.


Opinión de LIBROS sobre la novela, a continuación:
Cuando empecé a leer El Prodigio, que me recomendó nuestra amiga Clara Glez, no me di cuenta de que ya había leído una novela de esta autora; la polémica La habitación, en la que se narra el secuestro de una joven que vive aislada durante años e incluso da a luz en su encierro.
Esta nueva novela es, también polémica, por los hechos que narra y como lo hace. Creo que la autora ha ganado experiencia, fluidez narrativa y fuerza literaria. Los personajes y el ambiente opresivo en el que se desarrolla la historia están muy logrados.
Aunque el tema no es de mis favoritos, la historia merece la pena.
Me ha gustado. Gracias Clara!!!

Sinopsis  (Ed. Ediciones B)
Una novela apasionante, hipnótica y plena de misterio, por la autora de La habitación. Irlanda, 1840. En un pequeño pueblo se corre la voz de que una niña de once años, hija de una humilde familia de granjeros, lleva cuatro meses sin comer. Anna O'Donnell es inteligente, devota y muy discreta. En un ambiente extremadamente católico, todos la creen una santa. El caso ha llegado a la prensa, y recibe a diario visitas que dejan a la familia limosnas y regalos. Elizabeth Lib Wright, una joven enfermera inglesa, es contratada por un comité de ciudadanos del pueblo para vigilar a la niña durante dos semanas, con el objeto de otorgar credibilidad al milagro. Se turnará en esa vigilancia con una monja, la hermana Michael. Lib no se fía de la eficacia de la religiosa, pero es casi imposible controlarla a ella también, además de a la niña y los padres de esta. William Byrne es un periodista al que envían allí para cubrir el caso, y Liz acaba refiriéndole algunas de sus observaciones. Está convencida de que se trata de un fraude, pero resolver el misterio no resultará sencillo. Una novela emotiva, inteligente, apasionada, que conjuga el suspense psicológico con una historia de amor que se enfrenta al Mal.
«Una excelente novela histórica basada en hechos reales.» Stephen King , The New York Times Book Review
«Donoghue logra abordar los misterios más grandes de la fe sin sacrificar el lirismo de su lenguaje ni el suspense de su argumento.» The Washington Post
« Como en la mejor ficción histórica, El prodigio no trata del pasado sino del presente». Financial Times
«Una maravilla, una rareza en la ficción contemporánea... Logra hacer palpitar el corazón del lector.» The New York Times
«Una historia colmada de pasión y drama.» Newsday
«Extraordinaria.» Booklist
«Deliciosamente gótica. Intensidad y suspense claustrofóbicos.» USA Today
«Donoghue demuestra que es una maestra de la trama.» Time « Su tono, trama y complejidad moral son fascinantes.». The Boston Globe
«Un duelo pleno de suspense.»The Wall Street Journal
«Una tensa novela gótica». Toronto Star
«Prosa intensa y cinematográfica.» Ottawa Citizen


El Prodigio (fragmento)

1
ENFERMERA
Enfermera
para lactar a un bebé,
para criar a un niño,
para cuidar a los enfermos.

El viaje no fue peor de lo que esperaba. En tren de Londres a Liverpool, en paquebote nocturno hasta Dublín; en un tren lento de domingo hacia el oeste; hasta un pueblo llamado Athlone. 
Allí la esperaba un conductor.
- ¿La señora Wright?
Lib había conocido a muchos irlandeses, soldados, aunque eso había sido varios años antes, así que tuvo que esforzarse para entender lo que le decía aquel hombre.
Llevó su maleta a lo que él llamaba el coche de paseo. Un término irlandés poco apropiado, ya que aquella simple carreta no tenía nada que invitara a pasear en ella. Lib se acomodó en el único banco, con las botas colgando más cerca de la rueda derecha, de lo que hubiese querido. Abrió la sombrilla para protegerse de la llovizna. Al menos aquello era mejor que el sofocante tren.



LA MEMORIA SECRETA DE LAS HOJAS


RESEÑA DE CLARA GLEZ para LIBROS, 28 de Mayo de 2017.
La memoria secreta de las hojas – Hope Jahren
No me gusta escribir sobre libros que no termino, pero en este después del 60% leído me voy a atrever....
Lo empecé con ilusión, y después de ese 60% me parece que es más una tesis doctoral que un libro.
Al comienzo me interesó, pensando en leer una novela con una base científica detrás, peo al seguir y seguir, me vi en el departamento de botánica donde tuve mis prácticas, en el bioquímica, hace más de 40 años, cuando estudiaba, me aburrí soberanamente porque se cómo funciona un espectrómetro de masas , y si no lo supiera tampoco me sería necesario saber si andan a 200 V. o a 125. Me cansa las rutinas de cómo preparar un medicamento, para eso tuve la galénica, y creo que también es innecesario saberlo a quien lee una novela. Por muchas instrucciones que te detallen no sirven para nada, el que le toque prepararlas ya sabrá cómo y quién se dedique a otros menesteres excusa saberlo. En fin que no sé qué se pretende contar en ese libro…que mejor le valiera a la autora escribir un tratado de raíces, de plantas, de manual de prácticas en cualquier asignatura que lo precise….En resumidas cuentas en COÑAZO
Ahh eso si mucho respeto a la naturaleza y comen comida basura….muy edificante
Sinopsis
La memoria secreta de las hojas no es solo un libro, es el fascinante debut de una mujer consagrada a la ciencia, el retrato conmovedor de una larga amistad y una exposición sorprendente del mundo de las plantas que cambiará radicalmente nuestra forma de contemplar la naturaleza.
En su ópera prima, Hope Jahren nos presenta un revelador tratado sobre la vida de las plantas que además versa sobre el trabajo y sobre el amor, y sobre cómo se pueden mover montañas cuando ambos van a la par.

Sinopsis (Ed. Ediciones Paidos)
La memoria secreta de las hojas no es solo un libro, es el fascinante debut de una mujer consagrada a la ciencia, el retrato conmovedor de una larga amistad y una exposición sorprendente del mundo de las plantas que cambiará radicalmente nuestra forma de contemplar la naturaleza.
En su ópera prima, Hope Jahren nos presenta un revelador tratado sobre la vida de las plantas que además versa sobre el trabajo y sobre el amor, y sobre cómo se pueden mover montañas cuando ambos van a la par.

La memoria secreta de las hojas (fragmento)

NO EXISTE NADA MÁS PERFECTO que una regla de cálculo. Su aluminio bruñido resulta frío al contacto con los labios, y, si la mantienes al nivel de la luz, puedes ver en cada una de sus esquinas el ángulo recto más perfecto de la creación. En cambio, si la pones de costado se transforma en un original florete que se dobla sin querer. Hasta una niña de corta edad puede blandir en el aire una regla de cálculo, sirviéndose del cursor como empuñadura. En mi memoria permanecen ligados de un modo indisoluble este juego infantil y los primeros relatos que me contaron, y, por ese motivo, no puedo evitar representar en mi mente a un angustiado Abraham justo en el momento en el que va a sacrificar al pobre Isaac alzando su mortífera regla sobre el pequeño.
Yo me pasé la infancia en el laboratorio de mi padre, jugando debajo de las mesas hasta que alcancé la altura suficiente para jugar sobre ellas. Mi padre enseñó durante cuarenta y dos años seguidos los rudimentos de la física y de las ciencias de la tierra en aquel laboratorio. Era profesor en una escuela de formación superior de una pequeña localidad de Minnesota. Él adoraba su laboratorio, y mis hermanos y yo compartíamos su pasión por aquel lugar.
No era más que una sala pintada con una gruesa capa de color crema; pero, si cerrabas los ojos y te concentrabas, podías sentir por debajo la textura del cemento. Recuerdo que llegué a la conclusión de que el revestimiento de goma de los laterales debían de haberlo pegado a la pared, porque no encontré ni una sola marca de clavos cuando medí la estancia con una cinta métrica que extendí más de treinta metros. Había largas mesas de trabajo en las que tenían que sentarse cinco alumnos, uno al lado del otro, mirando todos en la misma dirección. Aquellas superficies negras, frías como una tumba, estaban hechas de un mate rial imperecedero, de algo que ni el ácido ni los golpes de martillo podían destruir (pero no lo intentéis). Eran lo suficientemente robustas como para aguantar el peso de una persona, y tan duras que no se podían rayar ni con una piedra (pero no lo intentéis).