jueves, 9 de noviembre de 2017

EL BALCÓN EN INVIERNO


No sé, si como dice la "banda promocional" de Tusquets este libro es el "más sincero" de Luis Landero (significa eso que los otros eran mentirosos??) de lo que estoy segura es de que es muy-muy hermoso. Acabo de terminarlo y hay frases, pasajes que perduran y seguirán en mi memoria por mucho tiempo
"A lo mejor lo que yo recuerdo no es el contenido del relato ni la imagen del lector rodeado de sus... oyentes sino solo la música del lenguaje en el silencio de la noche." (pag. 41)

Y eso es, este libro, música en el silencio, prosa musical y cuidada, elegancia estilística pura para relatar la vida de un joven que va para escritor, de un joven que nace a la lectura y a la literatura, transitando "del caos al canon" por obra y gracia de un profesor en el Madrid de la inmigración interior, la miseria, la postguerra y el franquismo. Nada de ello se toca directamente, todo se ve de lejos y por eso el libro es tan especial, porque sólo el verdadero talento es capaz de narrar de esa forma la situación de un país, sin ser tan explícito que suene a trillado, ni tan abstruso que no se entienda.
Luis Landero se hizo un hueco en mi corazón con sus Juegos de la edad tardía, y nunca me ha abandonado, proporcionándome la misma alegría cada vez que uno de sus libros llega a mis manos.

De la primera a la última página, un placer deliciosamente literario y como el mismo cierra:
"Eso es todo y no hay más que contar. Un grano de alegría, un mar de olvido." (pág, 144)

Leed a Landero, no os arrepentiréis¡¡

Sinopsis (Ed. Tusquets)
Asomado al balcón, debatiéndose entre la vida que bulle en la calle y la novela que ha empezado a escribir pero que no le satisface, el escritor se ve asaltado por el recuerdo de una conversación que tuvo lugar cincuenta años antes, en otro balcón, con su madre. «Yo tenía dieciséis años, y mi madre cuarenta y siete. Mi padre, con cincuenta, había muerto en mayo, y ahora se abría ante nosotros un futuro incierto pero también prometedor.». Este libro es la narración emocionante de una infancia en una familia de labradores en Alburquerque (Extremadura), y una adolescencia en el madrileño barrio de la Prosperidad. Es también el relato, a veces de una implacable sinceridad, otras chusco y humorístico, de por qué oscuros designios del azar un chico de una familia donde apenas había un libro logra encontrarse con la literatura y ser escritor. Y de sus vicisitudes laborales en comercios, talleres y oficinas, mientras estudia en academias nocturnas, empeñado en ser un hombre de provecho. Pero dispuesto a tirarlo todo por la borda para ser guitarrista, y vivir como artista. Y en ese universo familiar de los descendientes de hojalateros, surge un divertidísimo e inagotable caudal de historias y anécdotas en el que se reconoce la historia reciente.

El balcón en invierno (fragmento)
"También en la vida real la memoria funciona así, con pasajes subrayados y notas marginales, con detalles cargados de sugerencia, a veces convertidos en símbolos. Hay épocas de nuestra vida de las que apenas recordamos nada. Años que, por intrascendentes y rutinarios, que son casi todos, la memoria ha ido abandonando hasta entregarlos al más atroz de los olvidos. ¿Qué hice yo cuando tenía treinta y cuatro, veintiséis, cuarenta y ocho años? Imposible saberlo, fuera de algún episodio excepcional o del vago contorno de las tareas habituales, de las costumbres fuertemente arraigadas. Fuera de eso, y salvo que se escriba, porque lo que no se escribe se pierde sin remedio, recordamos si acaso un olor, un sabor, un gesto, un rostro, la pesadumbre de una lejana tarde de lluvia, y a menudo queda tan solo una sensación casi inefable, una sensación que es la experiencia destilada en el alma y hecha ya sentimiento. Y los sonidos, cómo no, la banda sonora de la memoria, porque a veces del pasado no nos llegan tanto las palabras y las cosas como las voces, los ruidos —el golpe de una garrota en la percha—, las risas, los murmullos, la honda significación del silencio en ciertos momentos definidos precisamente por las pausas, como ocurre a menudo en la música, en el teatro o en el cine.
Todo esto, estos párrafos de sabor proustiano, es algo que he sabido desde casi siempre, y sobre lo que he disertado y escrito en más de una ocasión, pero ahora, al enfrentarme de un modo tan directo con mi pasado, lo veo con una claridad nueva, deslumbrante. Y ayer, mientras ya me disponía a iniciar un breve viaje sentimental por mi biblioteca, de pronto miré a mi alrededor y, también con un repente de extrañeza, me quedé asombrado de la cantidad de libros que tenía. ¿Cuántos habría en la biblioteca de Emma Bovary? Ah, sus manos pecadoras en los libros, mordiéndose los labios mientras lee, mordisqueándose las uñas, deshilándose un mechón de cabello, preludiando caricias y suspiros que dentro de poco se consumarán en la realidad... ¿Cuántos? Yo debo de tener 4000 o 5000 libros, y eso sin contar los del trastero y los que he ido dejando, cientos y cientos, en los bancos de las plazas públicas para que los curiosos los hojeen y se lleven a casa los que quieran, como quien adopta a un animal abandonado.
Cuatro o cinco mil libros, se dice pronto. Quién me iba a decir a mí que iba a llegar a tener tantos y tantos libros. Entonces me acordé de los primeros que tuve en propiedad, del inicio de esta biblioteca, como el hilo de agua del manantial que llega a convertirse en un río caudaloso. Y de aquellos libros de entonces, me acordé especialmente de uno, que compré en 1969, que no llegué a leer pero que fue esencial para mi destino de lector y escritor. Sí, aquel fue un año singular, uno de esos años del que uno conserva muchos recuerdos, quince o veinte recuerdos por lo menos, y con una nitidez que parece que los viví ayer mismo.
Pensé que el día, tan llamado a ser un vano ayer, aún podía ser rescatado para la vida, aunque solo fuese por mediación de la memoria, de la reminiscencia de otros días que sí fueron vividos con plenitud, y que ahora acudían al rescate de un presente sin alma. "



miércoles, 8 de noviembre de 2017

VESTIDO DE NOVIA



No se si lo he leído en alguna parte o es de mi propia cosecha pero tengo la sensación de haber asistido a "las vueltas y revueltas del escritor en su laberinto".
Han calificado este libro de thriller, novela negra e, incluso, negrísima, y...., no sé que decir. Indudablemente Lemaitre escribe exquisitamente y es un placer leer cualquier novela que escriba, pero....., debe ser deformación por haber leído tanta y tanta negra de cualquier origen, una sensación me invade de que a esta le faltan cosas y le sobran muchas otras.
Uno de los requisitos principales de una buena novela negra es que sea creíble y por ahí patina Lemaitre y patina mucho. Aun así, la recomiendo porque es corta y está muy bien escrita, un placer leer Vestido de Novia pero no un placer inolvidable.



RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 6 de Noviembre de 2014.
Normalmente voy por libre en mis lecturas. Anoto lo que otros recomiendan en mis páginas favoritas pero, repito, voy por libre.
Pero a veces, cuando un libro se repite, y se repite, y se repite, y gente de la que me fío literariamente, porque compartimos gustos empieza a poner:
"adictivo"," no se puede parar", "no te suelta"," ahhh que entretenidísimo...".
Entonces, esas veces, suelto el resto de lo que estoy leyendo y sigo la corriente.
Y a veces, como ésta, dejarse ir haciendo la plancha por el río común, es sumamente gratificante.
Como dicen mis otros amigos de Tropa de libros, "Vestido de novia" es adictivo, no se puede parar, no te suelta...


RESEÑADO por Rosi Torres Marino para LIBROS,  el 30 de Enero de 2015.
Uhmmmm.... sí pero no, es lo primero que me viene a la cabeza cuando termino su lectura. No se puede negar que la primera parte es del todo intrigante, que pasa las páginas con avidez pero...el giro que da para mí ha sido pasarse de vueltas la tuerca. Aún así, se lee. Habrá adaptación cinematográfica? No creo que tarde mucho. Ideal entre lecturas densas, pero ya, hasta ahí.

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
No dejes que nadie te desvele nada de esta historia.

Sophie Duguet no entiende qué le sucede: pierde objetos, olvida situaciones, es detenida en un supermercado por pequeños robos que no recuerda haber cometido. Y los cadáveres comienzan a acumularse a su alrededor...
Y ya no podemos desvelar nada más de este thriller para así mantener intacto el escalofriante placer de la lectura y la adictiva búsqueda de la verdad por parte del lector.


Vestido de Novia (fragmento)

SophieEstá sentada en el suelo, con la espalda contra la pared y las piernas estiradas, jadeante. Léo está pegado a ella, inmóvil, y tiene su cabeza en el regazo. Con una mano ella le acaricia el pelo y con la otra intenta secarse los ojos, pero con movimientos desordenados. Llora. Algunos sollozos se convierten en gritos, chilla, le sale de las entrañas. Cabecea. A veces, la pena es tan intensa que se golpea la parte de atrás de la cabeza contra el tabique. El dolor la reconforta un poco pero no tarda en notar que todo se le vuelve a derrumbar por dentro. Léo se porta muy bien, no se mueve. Baja los ojos
hacia él, lo mira, le estrecha la cabeza contra el vientre y llora. Nadie puede imaginarse lo desgraciada que es.
1Aquella mañana, como tantas otras, se despertó llorando y con un nudo en la garganta, aunque no tenía ninguna preocupación concreta. En su vida, el llanto no es nada excepcional: las lágrimas la acompañan todas las noches desde que está loca. Si por las mañanas no se notara las mejillas empapadas,
podría llegar a creer que pasa noches tranquilas de sueño profundo. Por las mañanas, la cara llena de lágrimas y la garganta atenazada son mera información. ¿Desde cuándo? ¿Desde que Vincent sufrió el accidente? ¿Desde su muerte? ¿Desde la primera muerte, muy anterior? Se ha enderezado apoyándose en un codo. Se seca los ojos con la sábana mientras busca los cigarrillos a tientas y, al no encontrarlos, se acuerda de pronto de dónde está. Lo recuerda todo, lo que sucedió el día anterior, la velada… Recuerda inmediatamente que tiene que irse, salir de esa casa. Levantarse e irse, pero se queda ahí, clavada en la cama,
incapaz de un gesto mínimo. Agotada.

EN LAS FAUCES DEL LEÓN


Cuarta entrega de la serie de novelas protagonizadas por la subinspectora de homicidios de la jefatura de policía de Oslo, Hanne Wilhelmsen.

Una vez más, gracias a la errática política editorial de este país, he leído una "novedad" publicada en 1997, tras haber leído antes un par de libros de la misma serie publicados en 2006 y 2007.....
Todo ello contribuye a que las "aventuras" de Hanne Wilhelmsen y su amigo BillyT, en la Noruega de los años 90 me suenen a "ciencia-ficción del pasado" y es una pena, porque la primera novela de Holt  que leí (La diosa ciega) me pareció prometedora.
Pero es aburrido ir hacia atrás en lugar de hacia adelante.....
En todo caso, novela negra-nórdica ligera con toques de corrupción política (muy de actualidad) lo que demuestra que no hay nada nuevo bajo el sol (o la nieve) sólo cambia la maestría de quien lo relata.
Prescindible.

Sinopsis (Ed. Literatura Random House)
«Anne holt es la madrina de la novela negra noruega.»
Jo Nesbø
La primera ministra noruega ha sido asesinada. Tras apenas seis meses de mandato, su cadáver aparece en el despacho oficial con un tiro en la cabeza. ¿Se trata de un asesinato político o de una venganza personal?
Así da comienzo la investigación de un caso que una vez más recae en la inteligente Hanne Wilhelmsen. El asesinato ha conmovido hasta la médula a la sociedad noruega: nunca antes la violencia había hecho acto de presencia con tal intensidad en el país. Hanne debe manejar la información con prudencia: los ciudadanos deben estar debidamente informados y a la vez debe protegerse la privacidad de la víctima; por todo ello, el caso se convierte en el trabajo más delicado de su carrera. Además, el rastreo del asesino es complicado: se persigue a neonazis, rivales políticos y personas implicadas en escándalos de hace más de treinta años.
En las fauces del león, cuarto título de la serie de Hanne Wilhelmsen, es una novela que reflexiona sobre las mentiras, la manipulación y la persecución del poder a cualquier precio.
Un House of Cards escandinavo.

En las fauces del león (fragmento)

VIERNES, 4 DE ABRIL DE 1997


.47 Gabinete de la primera ministra (SMK)

Una mujer vestida de azul esperaba frente al despacho de la primera ministra. Su ansiedad iba en aumento mientras fijaba la vista alternativamente en el teléfono y en las puertas dobles. Vestía una elegante chaqueta de corte clásico, falda a juego y un pañuelo de colores algo excesivos. A pesar de que estaba finalizando una larga jornada laboral, iba perfectamente peinada, con un corte estiloso aunque algo pasado de moda que hacía que aparentara más edad. Podía dar la sensación de que era intencionado, de que esas sienes despejadas y el recogido alto pretendían darle una dignidad que sus cuarenta y tantos años no le aseguraban. Tenía mucho que hacer, pero en contra de lo que era habitual en ella, no conseguía acabar nada. Durante un largo rato se limitó a estar allí sentada. La creciente sensación de que algo iba terriblemente mal se intuía únicamente en sus dedos. Eran largos, bien cuidados, con las uñas pintadas de un rojo intenso y dos anillos de oro en cada mano. A intervalos regulares las levantaba hasta tocarse las sienes como si quisiera alisar unos invisibles cabellos rebeldes. Luego golpeaba rítmicamente la mesa produciendo un ruido sordo, como una serie de disparos de pistola con silenciador. Se levantó de golpe y se acercó a la ventana que daba al oeste.


ASÍ EMPIEZA LO MALO


Desde el cuadro elegido para la portada (Stepping out the Bath - Balthus 1957), pasando por la frase del título (“Thus bad begins and worse remains behind" William Shakespeare) , hasta la última frase de la novela (Y no, nada de palabras) he asistido durante un tiempo corto a una explosión literaria tan maravillosa que todavía estoy sobrecogida por la belleza de la historia y las palabras que la componen.
Durante la Transición Española (tan traída y llevada últimamente) tres personajes principales y muchos secundarios viven, hablan, discuten y pontifican sobre la verdad y la mentira. Hay personajes reconocibles o, casi reconocibles, de la historia reciente de nuestro país y hay una historia construida sobre una base endeble que, en algún momento, caerá sobre sus protagonistas. Hay, sobre todo, amor, pasión, engaño, celos y literatura en estado puro.
Me ha encantado¡¡¡

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
Una novela sobre el deseo, el rencor y la arbitrariedad del perdón.
Libro del año 2014 según Babelia.
Así empieza lo malo cuenta la historia íntima de un matrimonio de muchos años, narrada por su joven testigo cuando este es ya un hombre plenamente adulto. Juan de Vere encuentra su primer empleo como secretario personal de Eduardo Muriel, un antaño exitoso director de cine, en el Madrid de 1980. Su trabajo le permite entrar en la privacidad de la casa familiar y ser espectador de la misteriosa desdicha conyugal entre Muriel y su esposa Beatriz Noguera.
Muriel le encarga que investigue y sonsaque a un amigo suyo de media vida, el Doctor Jorge Van Vechten, de cuyo indecente comportamiento en el pasado le han llegado rumores. Pero Juan no se limitará a eso y tomará dudosas iniciativas, porque, como él mismo reconoce desde su edad madura, -los jóvenes tienen el alma y la conciencia aplazadas-. Así descubrirá que no hay justicia desinteresada, sino que está siempre contaminada por el rencor personal y por los propios deseos, y que todo perdón o castigo son arbitrarios.
«Es un libro sobre el deseo, como uno de los motores más fuertes en la vida de las personas, que a veces lleva a pasar por encima de cualquier lealtad, consideración e incluso respeto en el trato con los demás. Otro de los temas de la novela es la impunidad y la arbitrariedad del perdón y del no perdón. Cómo la idea de justicia que la gente reclama a veces tiene mucho que ver con que el acto en sí nos afecte o no.» Javier Marías

Así empieza lo malo (fragmento)
"Cuánto nos cambia la reacción adversa, pensé, o pienso que lo pensé sin las palabras precisas, al recordarlo ahora desde otra edad. ‘Cuánto nos hunde la denegación, y cuánto poder acumula aquel al que se lo hemos dado, en realidad nadie puede tomárselo si no se le entrega o confiere antes, si uno no está dispuesto a adorarlo o temerlo, si no aspira a ser querido por él o a su constante aprobación, cualquier ambición de ese tipo es un rasgo de fatuidad y es la fatuidad la que nos debilita y nos deja indefensos: en cuanto no se ve satisfecha o colmada inicia nuestra destrucción y se aplica a ella día tras día y hora tras hora, y es tan natural que eso suceda, que la insatisfacción predomine y reine desde el principio, y si no desde los primeros pasos, y si no antes o después... ¿Por qué habría de querernos el que señalamos nosotros con tembloroso dedo? ¿Por qué ese justamente, como si nos tuviera que obedecer? ¿O por qué habría de desearnos aquel que nos turba o enciende y por cuyos huesos y carne morimos? ¿A qué tanta casualidad? Y cuando se da, ¿a qué tanta duración? ¿Por qué ha de perseverar algo tan frágil y tan prendido con alfileres, la más rara conjunción? El amor correspondido, la lascivia recíproca, el enfebrecimiento mutuo, los ojos y las bocas que se persiguen simultáneamente y los cuellos que se estiran para divisar al elegido entre la multitud, los sexos que buscan juntarse una y otra vez y el extraño gusto por la repetición, volver al mismo cuerpo y regresar y volver... Lo normal es que casi nadie coincida, y si existen tantas parejas supuestamente amorosas es en parte por imitación y sobre todo por convención, o bien porque el que señaló con el dedo ha impuesto su voluntad, ha persuadido, ha conducido, ha empujado, ha obligado al otro a hacer lo que no sabe si quiere y a recorrer un camino por el que nunca se habría aventurado sin apremio ni insistencia ni guía, y ese otro miembro de la pareja, el halagado, el cortejado, el que se adentró en su nube, se ha ido dejando arrastrar. Pero eso no tiene por qué persistir, el encantamiento y la nebulosidad terminan, el seducido se cansa o despierta, y entonces al obligador le toca desesperarse y sentir pánico y vivir en vilo, volver a trabajar si todavía le restan fuerzas, montar guardia a la puerta y rogar e implorar noche tras noche y quedar a merced de aquél. Nada expone ni esclaviza tanto como pretender conservar al que se eligió e inverosímilmente acudió a la llamada de nuestro tembloroso dedo, como si se obrara un milagro o nuestra designación fuera ley, eso que no tiene por qué ocurrir nunca jamás...’
Beatriz Noguera se rehízo pronto, no tardó; volvió a engrandecerse y a adquirir sus formas, era como si durante unos instantes las hubiera perdido inexplicablemente o se le hubieran fugado. Se irguió de nuevo, alzó la cabeza, recuperó su llamativa corporeidad, miró de frente a Muriel. No podía verle bien la cara, pensé que sería difícil que no le hubieran saltado lágrimas al oír las palabras de su marido —‘Espero ser yo quien te entierre, quien te vea a ti sin vida, morir en tu palidez’—, pero si así fue no sollozó ni gimió, quizá sí tenía más memoria de la que le atribuía Muriel y ya nada la hería en exceso, quizá sus acechanzas nocturnas no se debían al inmediato olvido de lo sucedido ayer o anteayer, sino a su fe inquebrantable en derribar toda resistencia, en agotar al más reacio, si conseguía no ceder en sus tentativas, no retirarse ni abandonar el campo ni desmayar. Pero las palabras que la rondaban o que había retenido eran otras, las que más daño le habían causado. "


EL LEOPARDO


Octava entrega de la serie de novelas protagonizadas por Harry Hole, policía noruego que nos ha robado el corazón.

"Ay!!! Y ahora qué va a pasar con Harry Hole!!?? Cómo pueden tardar tanto las traducciones de sus libros!!?? Snif, snif, habrá que rellenar el tiempo con otros libros..."
Este comentario de mi querida Noelia Vallina no puede ser más acertado¡¡¡
Tras esta nueva entrega de la negra-nórdica por antonomasia nos preguntamos tod@s que puede pasar porque ya hemos perdido demasiados protagonistas en el camino y Harry Hole es, ahora, nuestro único puerto y salvación.
Una novela impresionante¡¡

Sinopsis (Ed. Literatura Random House)
HARRY HOLE ESTÁ EN APUROS...
Tras el horror que supuso la resolución del último caso, Harry Hole abandonó Oslo y el cuerpo policial. Ahora se ha visto obligado a regresar por cuestiones familiares y porque se sospecha que un asesino en serie anda suelto en Noruega y solo Hole es capaz de llevar a cabo la investigación.
EL ASESINO LE TIENE EN EL PUNTO DE MIRA...
Tras asesinar a varias mujeres de forma cruel, Hole tendrá que viajar a África para descubrir el origen de La Manzana de Leopoldo, un terrorífico instrumento de tortura jamás visto. El asesino parece estar jugando con la policía y con Hole, y se sospecha que quiere matar a un grupo de personas que pasaron una noche en una cabaña en la alta montaña noruega.
LA POLICÍA NO LE FACILITA LA INVESTIGACIÓN...
Hole es el único policía que parece ver tras el velo de las cosas, y eso despierta envidias y recelos entre sus compañeros... Además, tendrá que trabajar junto a Kaja Solness, una inteligente y bellísima policía con la que establecerá una peculiar relación...

El Leopardo (fragmento)

1


El ahogamiento
Se despertó. Parpadeó ante aquella oscuridad profunda. Abrió la boca y respiró por la nariz. Volvió a parpadear. Notó que le caía una lágrima, notó que disolvía la sal de otras lágrimas. Pero ya no le bajaba la saliva por la garganta, tenía la cavidad bucal reseca y dura. Se le habían tensado las mejillas por la presión interior. Tenía la sensación de que el cuerpo extraño que tenía en la boca fuera a reventarle la cabeza. Pero ¿qué era, qué era? Lo primero que pensó al despertar era que quería descender otra vez. Bajar a esa profundidad cálida y oscura que la había rodeado. El líquido que él le había inyectado seguía surtiendo efecto, pero ella sabía que el dolor se iba acercando, lo notaba en la percusión lenta y sorda del pulso y en el fluir atropellado de la sangre en el cerebro. ¿Y él, dónde se habría metido? ¿Estaría allí mismo, detrás de ella? Contuvo la respiración, aguzó el oído. No oía nada, pero sí sentía la presencia. Como un leopardo. Alguien le había contado que el leopardo era tan silencioso que podía acercarse y llegar al lado de su presa en la oscuridad, que podía ajustar sus jadeos y respirar a tu ritmo. Contener la respiración cuando tú contienes la respiración. Le dio la impresión de que sentía el calor de su cuerpo. ¿A qué esperaba? Dejó de contener la respiración. Y en ese momento, creyó notar en la nuca la de otra persona. Se giró, agitó los brazos, pero solo encontró aire. Se acurrucó tratando de encogerse, de esconderse. Inútil.
¿Cuánto tiempo llevaba inconsciente?
Empezó a pasarse el efecto de la droga. Fue solo una décima de segundo. Pero suficiente para darle el anticipo, la promesa. La promesa de lo que estaba por venir.

DEMONIOS FAMILIARES



Desde la imagen de portada, el hermoso cuadro de Michael Thompson (Girl with a Hole in Her Stocking), hasta la última frase de la novela "....Como si hubiese aparecido un buen día debajo de una de las coles del huerto, que con tanto mimo trataba Mada”; todo en los Demonios Familiares es puramente literatura de calidad, literatura puramente Matute.
La he encontrado menos autobiográfica de lo que algunos críticos anunciaban, pero tan intima y real como siempre.
La voz de una adolescente nos guía por los prolegómenos de la Guerra Civil en un pequeño pueblo, y al "arrullo" de las balas, las explosiones y los estruendos se teje y desteje la vida de una familia y de todo un pueblo, es verdad que el final es ciertamente abrupto, se nota que no lo interrumpió una salida a tomar café, pero también es verdad que la frase final abre las puertas de la imaginación y me hace pensar en un guiño de la autora para hacer posible la invención de una historia nueva, cada un@ su propia historia¡¡¡
Me ha encantado¡¡

RESEÑADO por Rosi Torres Marino para LIBROS,  el 11 de Noviembre de 2014.
Me gusta tanto Ana María Matute tanto que esta vez esperaba mucho mas. He de ser justa, tenía que haberme echo a la idea de que leía una historia inacabada, interrumpida de forma abrupta, pero me sumergí en los personajes y el punto final me pilló desprevenida y me dio mucho coraje. Me parece que le faltaba mucho a la Matute, que su muerte guardará el secreto de como seguirían y como acabarían aquellos personajes pero también muchas correcciones, muchos mas detalles. Me ha gustado mucho la nota final, acercando un poquito mas la autora al lector...

Sinopsis (Ed. Destino)
Demonios familiares es una historia de amor y culpabilidad, de traiciones y amistad, al más puro estilo de la autora. Transcurre en una pequeña ciudad interior española en 1936, con una protagonista femenina que pronto será inolvidable


Demonios familiares (fragmento)

1Algunas noches el Coronel oía llorar a un niño en la oscuridad. Al principio se preguntaba quién sería, puesto que hacía muchos años que en la casa no vivía ningún niño. Solo quedaba, en la mesilla de noche de Madre, una fotografía sepia, una sonrisa transparente y errática — quién sabía y así de Madre o del niño—, flotando en la noche, como una luciérnaga alada. Ahora sus recuerdos, incluso los tenebrosos fantasmas de la campaña de África, se parecían cada día más a desperdicios, lo que queda, migas de pan en el mantel, de un antiguo festín. Pero su memoria recuperaba una y otra vez la imagen de Fermín, su hermano mayor. Encerrado en su marco de terciopelo malva, vestido de marinero, apoyado en un aro de madera, y siempre niño. Como un fantasma recurrente —«qué raro, es mi hermano mayor, pero yo tengo más años que él» —  , persistía allí, nadie lo había quitado de la mesilla, ni aun cuando Madre ya no estaba, hacía años que él se había casado, había nacido su hija, y Herminia, su mujer, había muerto.
Desde que empezó a anochecer, se había hecho colocar en su silla de ruedas, de espaldas al balcón abierto de la sala. Así quedaba frente al espejo que Madre había hecho colgar inclinado, de forma que quien se mirara en él, o cualquier cosa que se reflejara, parecía que iba a volcarse sobre uno mismo. Todo era entonces, como le gustaba decir a Madre, «un paso más allá de lo que parecía». Cuando él preguntaba por qué el espejo no estaba del todo contra la pared, como los cuadros, repetía ella: « Un paso más allá», con el aire misterioso de alguien que está y no está. Desde su muerte la sentía mucho más cerca que cuando vivía y se deslizaba por la casa sin ruido, siempre en zapatillas, misteriosa, como portadora de secretos y encomiendas guardadas entre algodones de silencio. Y estaba sintiendo más que recordando estas cosas cuando en el ángulo derecho del espejo surgió el resplandor anaranjado, ensanchándose en el cielo.
De pronto Yago estaba a su lado. Como en los tiempos en que aún no era su criado ­sombra (como él lo llamaba), cuando aún era su ordenanza, nunca le oía llegar, y simplemente aparecía a su lado.

lunes, 6 de noviembre de 2017

LO QUE EL DÍA DEBE A LA NOCHE



Tenía pendiente esta novela desde hace tiempo, las opiniones de mis amig@s me obligaban a leerla y, aunque, mis sensaciones con Yasmina Khadra oscilaron entre la maravilla de La trilogía de Árgel y la decepción de La ecuación de la vida; por fin he cumplido y acabo de terminar uno de los libros más emblemáticos del autor.
Lo que el día debe a la noche, me gusta desde el título hasta la frase final, ¿es una novela histórica?, no exactamente, aunque relata la historia de Argelia desde los años 30 hasta, casi, nuestros días; ¿es una historia de amor?, casi, pero no sólo una historia de amor, aunque los protagonistas se mueren de amor y se mueven por amor; ¿es una historia de amistad?, si pero no solamente amistad aunque esta nace, crece, se multiplica, muere y renace......
Así podría seguir interminablemente preguntándome de que va esta historia sin encontrar una única respuesta, porque Lo que el día debe a la noche es la historia completa de un pueblo, de un país, de varios países, de varios pueblos....a través de sus hombres y mujeres.
Una historia conmovedora en su realismo que conquista desde la primera página.
La recomiendo¡¡¡

RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 29 de Enero de 2015.
Y para ir terminando el mes de la mejor manera, un libro redondito.
Tiene todo lo que tiene que tener una buena historia: abandonos, tristezas, valentías, cobardías, guerras, amores, y tiempo curando y matando. Mujeres hermosas y amigos. De todas las calañas.
Si tiene ganas de empezar con el autor no se deje tentar por sus otros títulos. Empiece por éste.

Sinopsis (Ed. Destino)
Younes sólo tiene nueve años cuando su padre, arruinado por un especulador, pierde todas sus tierras. Totalmente agobiado, resuelve confiar el niño a su hermano, un farmacéutico integrado en la comunidad occidental de Orán. Es un sacrificio enorme que hace que acabe perdiendo el respeto por sí mismo.
Pero los ojos azules de Younes y su aspecto angelical ayudan al chico a ser aceptado por la clase acomodada de la población. Su nombre ahora es Jonas, y crece entre jóvenes colonos de los que se hace amigo inseparable. Descubrirá con ellos las alegrías de una existencia privilegiada que ni la segunda guerra mundial ni las convulsiones de un nacionalismo árabe en plena expansión pueden perturbar. Hasta el día en que llega a la ciudad Émilie, una joven fascinante que se convertirá en el objeto de deseo de todos ellos y que pondrá a prueba la complicidad fraternal de los cuatro amigos, divididos entre la lealtad, el egoísmo y el rencor que la guerra de la Independencia agrava.
La revuelta argelina será para Younes-Jonas sangrante y fratricida. Los lazos de amistad con sus amigos occidentales y el agradecimiento hacia quienes le han ofrecido una vida mejor no le van a hacer renunciar, sin embargo, a los valores inculcados por su padre y que conforman su identidad: la dignidad, el respeto hacia sus raíces y las costumbres de su pueblo y la fidelidad a la palabra dada, valores que ponen en peligro el amor desgarrador que siente por Émilie.
Yasmina Khadra relata una historia torrencial, apasionada y dolorosa que se despliega desde 1930 hasta el presente y que constituye una valerosa defensa de la doble cultura francoargelina, entre Occidente y el Islam, que, tanto de una parte como de otra, la Historia ha olvidado tantas veces.


Lo que el día debe a la noche (fragmento)
"acababa de descubrir que el árabe, el árabe bello, el árabe digno y generoso no era ni un antiguo mito ni aquello en lo que el colono lo había convertido... No tengo suficiente instrucción para explicarte lo que ocurrió dentro de mi cabeza aquel día, pero aquello cambió mi vida"