sábado, 2 de septiembre de 2017

EL ENIGMA DE CHINA


Octava entrega de la serie de novelas protagonizadas por el inspector jefe Chen Cao, que ejerce en la policía la ciudad de Shanghái. China, post-Mao.

Abandono Shanghái con la sensación de no haber salido de España, políticos corruptos, sobresueldos, privilegios, regalos de lujo, ocultación, mentiras, control, cada vez más diferencia entre ricos y pobres, enchufes.......¿se habrá extendido tanto la globalización?
En esta novela el inspector jefe Chen Cao llega a una encrucijada y no sabremos, por ahora, como la resolverá.
Después de un tiempo sin haber leído nada de Qiu Xiaolong, he vuelto a los poemas tradicionales, la filosofía china y la comida, mucha comida....todo tan diferente y todo tan parecido¡¡¡¡
Recomiendo esta serie para los que quieran algo diferente en novela negra.

Sinopsis (Ed. Tusquets)
El inspector jefe Chen Cao se encuentra en una situación delicada: el Partido le encomienda investigar la muerte de Zhou Keng, el hijo de un destacado miembro del Partido que dirigía el Comité para el Desarrollo Urbanístico de Shanghai cuando varias de sus prácticas corruptas se denunciaron en internet. Tras ser despojado de su cargo y sometido a una detención extrajudicial, Zhou aparece ahorcado. Pese a que los dirigentes del Partido aguardan con impaciencia que su muerte sea declarada suicidio y que el inspector jefe Chen avale dicha conclusión, algunas piezas no encajan en la secuencia de acontecimientos. Chen tendrá que decidir: o renuncia a que se haga justicia, o investiga la muerte de Zhou como posible asesinato, con lo que se arriesga a incomodar a los poderes fácticos.

Un poema de nuestro policía-poeta, para animar a la lectura:

Esbelta, ágil, tan joven,
como el extremo de un capullo de cardamomo
a principios de primavera
(Chen Cao)

LA MARCHA RADETZKY


Joseph Roth, nada que ver con Philip excepto su origen judío, este Roth nació en Volinia cuando pertenecía al Imperio Austrohúngaro, y actualmente incluida en Ucrania. Hoy cumpliría 120 años si no hubiese muerto a los 45 tras una vida azarosa, peligrosa y con los vahos del alcohol como compañeros inseparables.

Autor con gran producción su éxito absoluto se produjo en 1932 con la publicación de la Marcha Radetzky (Radetzkymarsh), historia del Imperio Austro-Húngaro a través de tres generaciones de la familia Trotta (luego Von Trotta), guerreros, soldados y nobles encarnación de las familias aristocráticas de centroeuropa. Ascensión y caída de una familia Austriaca relatada con sobriedad y pericia. Un clásico que añadir a nuestras lecturas.

Su prosa elegante está a la altura de otros escritores centroeuropeos como Stefan Zweig y Robert Musil y el siguiente fragmento de esta novela lo acredita:

" Todo lo que crecía, requería de mucho tiempo para crecer. Y todo lo que desaparecía necesitaba largo tiempo para ser olvidado. Todo lo que había existido dejaba huellas tras de sí y entonces se vivía de los recuerdos, como ahora se vive de la capacidad de olvidar rápida y decididamente. "

La Marcha Radetzky (fragmento)

PRIMERA PARTE

CAPÍTULO UNO

"Los Trotta no eran de antiguo linaje. El fundador de la dinastía había obtenido el título de noble después de la batalla de Solferino. Era esloveno. Fue nombrado señor de Sipolje, ya que así se llamaba, el lugar de donde era oriundo. El destino le había escogido para una hazaña especial. Pero él procuró que los tiempos venideros se olvidaran de su persona.
En la batalla de Solferino se hallaba como teniente de infantería al mando de una sección. El combate se prolongaba desde hacía media hora. Trotta veía, a tres pasos frente a él, las blancas espaldas de sus soldados. La primera fila de la sección estaba rodilla en tierra; la segunda, a pie firme detrás. Todos estaban contentos y seguros dela victoria. Habían comido bien y se les había repartido aguardiente, en honor y a cuenta del emperador, quien desde el día anterior se hallaba en el frente. De vez en cuando se producía una baja en las filas. Trotta ocupaba rápidamente el vacío producido y disparaba con los fusiles abandonados de los muertos y los heridos. Daba órdenes para cerrar más las filas y cubrir los huecos u ordenaba que se desplegaran y observaba con ojo avizor el horizonte prestando atención al menor ruido. En medio de las descargas de la fusilería, su oído, muy sensible, distinguía las voces de mando, claras y escuetas, del capitán. Con su mirada penetrante atravesaba la niebla gris azulada de las líneas enemigas. Nunca tiraba sin apuntar, y todos sus disparos daban en el blanco. La tropa advertía las acciones y la mirada del teniente, oían sus órdenes y se sentían seguros.
El enemigo dejó de disparar. A todo lo largo del frente corrió la voz de «¡Alto el fuego!». Todavía se oía algún chasquido de los cerrojos o un disparo tardío y solitario. Había claros ya en la niebla gris azulada entre los frentes. De repente se encontraron sumidos en el calor del mediodía, que les llegaba de un sol plateado, cubierto por nubes de tormenta. En aquel momento apareció el emperador entre el teniente y las espadas de los soldados."

LA FORMA DEL AGUA



Primera novela de la serie protagonizada por el comisario Montalbano.

RESEÑADA por Ricardo Cortat para LIBROS, el 10 de Julio de 2013.
"Hola. Me llamo Ricardo y no me gustan las novelas del comisario Montalbano."
La frase anterior la podría mantener y sostener, incluso hasta argumentar. Hasta hoy. A partir de hoy...
"Hola. Me llamo Ricardo y el comisario Montalbano tiene algo..."
Acabo 'La forma del agua', la que parece ser, según la Wikipedia, la primera novela de la serie.
Me ha gustado.
Mucho.
Me ha gustado la forma de escribir de Camilleri, me ha gustado lo directo, malhablado y fullero que es Montalbano y, sobre todo, me ha gustado que si lo puedes contar en menos de 200 páginas no hace falta rellenar con paja. Comparte estantería con un 'Lackberg' y no hay comparación.
Después de vagar por el frío norte, da gusto zambullirse en las cálidas aguas del Mediterráneo.

Sinopsis (Ed. Salamandra)
En una cálida noche siciliana, tras nadar un buen rato en las tranquilas aguas que se remansan a escasos metros de su casa a orillas del mar, Salvo Montalbano emerge de la oscuridad con las ideas más claras: la solución del caso le ronda las narices, así que sólo es cuestión de paciencia y método, para lo cual nada mejor que relajarse antes con algún manjar preparado por Adelina, su fiel asistenta. Si a los asiduos lectores de Andrea Camilleri esta escena les resultará familiar, los lectores no iniciados merecen una breve introducción: Salvo Montalbano tiene cuarenta y cinco años, conserva una novia en Génova y es comisario de policía del pequeño pueblo de Vigàta, en Sicilia, que si bien no se encuentra en ningún mapa de este mundo es más real que la vida misma. Fiel amigo de sus amigos, amante de la buena mesa y sabedor de que la tierra ha girado y girará muchas veces en torno al sol, Montalbano es el compendio vivo de las antiquísimas culturas mediterráneas. Su calidad humana, unida a su infalible perspicacia, han hecho de su creador, Andrea Camilleri, uno de los autores más leídos de Europa.
En esta ocasión, un conocido político y empresario aparece muerto semidesnudo en el interior de su coche en un arrabal donde reinan la prostitución y la droga. Todo apunta a que ha fallecido de un ataque al corazón después de haber mantenido relaciones íntimas con una persona desconocida. Sin embargo, el comisario Montalbano no se fía, y armado con su natural olfato para los comportamientos extraños, se propone descubrir la trama sexual y política que se esconde tras el presunto crimen

viernes, 1 de septiembre de 2017

MUERTE ENTRE LÍNEAS


Vigesimotercera entrega de la serie protagonizada por el Comisario Brunetti de la Prefectura de Venecia.

Querida Amelia Ruiz, aun a riesgo de disgustarte debo decirte que las relaciones entre Brunetti y la signorina Elettra continúan en "punto muerto"...., la aristocrática Paola a lo suyo y los "niños repelentes" con poco protagonismo en esta última entrega de la serie Brunetti (este apunte va dedicado a Ricardo Cortat).
Para todos los demás, decir, que he disfrutado como siempre leyendo las peripecias venecianas de nuestro comisario Guido Brunetti, en esta ocasión su investigación nos atañe directamente ya que se desarrolla entre LIBROS, o sea, que la Sra. Leon se ha marcado una de metaliteratura.... 
De nuevo, leer a Donna Leon es un placer, corto e intenso, pero placer al fin y al cabo¡¡¡

Nuestro querido Ricardo Cortat, ha compartido su opinión sobre esta novela:

RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 9 de Julio de 2014.
Traducciones deficientes, personajes que cambian de nombre a largo de una conversación, maneras poco agradables visualmente de maquetar los puntos y aparte o los finales de capítulo... Todo libro tiene los riesgos de que le hagan un estropicio entre la entrega del original y la llegada a las manos del lector.
Hoy tengo entre manos un despropósito ...parecido, cuando la persona que resume el libro en la contraportada no se lo ha leído o resume de oídas.
'Muerte entre líneas' de Donna Leon, editorial Seix Barral, empieza con una llamada de una bibliotecaria a Brunetti y con un profesor adjunto que presuntamente roba unos libros.
Esa dottoressa y ese profesor se convierten, respectivamente, en director de biblioteca y en catedrático a manos del individuo que perpetra el texto resumidor.
Llamadme puntilloso, quisquilloso o lo que os venga en ganas pero si en lugar del 'gancho' para comprar el libro fuera un comentario de texto para el colegio, alguien iba a pasar el verano haciendo muchas redacciones.
AÑADIDO EL 14 DE JULIO 2014
Vengo teniendo la sensación que esta serie empieza a dar signos de agotamiento.
Sólo espero que cuando llegue el momento, le de una muerte digna.

Sinopsis (Ed. Planeta)
Una tarde, el comisario Brunetti recibe la llamada desesperada del director de una biblioteca veneciana. Diversos libros antiguos de gran valor han desaparecido.  Los bibliotecarios sospechan del hombre que pidió consultar los volúmenes, un catedrático de la Universidad de Kansas. El único problema es que, después de comprobar sus credenciales, el profesor simplemente no existe. Brunetti empieza entonces a investigar entre los habituales de la biblioteca, y es así como conoce al exsacerdote Franchini, un lector apasionado de literatura cristiana antigua, o la condesa Morosini-Albani, una generosa mecenas. Cuando Franchini aparece asesinado, el caso toma un rumbo más siniestro y pronto Brunetti se encuentra sumergido en el sombrío mundo del mercado negro de libros antiguos.
En Muerte entre líneas, Donna Leon se ha inspirado en uno de los mayores escándalos del comercio de libros de la Historia: el robo, real, de miles de libros antiguos de la biblioteca napolitana de Girolamini.

Muerte entre líneas (fragmento)

1
"Había sido un lunes tedioso, la mayor parte del cual la había pasado leyendo las declaraciones de los testigos de una pelea entre dos taxistas que había mandado a uno de ellos al hospital con una conmoción y el brazo derecho roto. Los testigos eran una pareja de turistas estadounidenses que habían pedido al portero del hotel que les consiguiera un taxi acuático para ir al aeropuerto; el portero, que decía que había llamado a uno de los taxistas con los que el hotel trabajaba habitualmente; el botones, que afirmaba no haber hecho más que su trabajo metiendo el equipaje de los estadounidenses en el taxi que se acercó al embarcadero; y, por último, los dos taxistas, uno de los cuales ya había declarado en el hospital. Según entendía Brunetti basándose en los diferentes relatos, el patrón de la compañía de taxis que empleaban habitualmente estaba en las inmediaciones del hotel cuando recibió la llamada del portero, pero al llegar, otro taxi ya había atracado en el embarcadero. El patrón atracó a su vez, pronunció en alto el nombre que le había dado el portero y dijo que estaba allí para llevar a la pareja al aeropuerto. Pero el otro taxista insistió en que el botones lo había parado a él y que por lo tanto la carrera era suya, aunque el botones lo negaba y decía que él simplemente estaba ayudando con las maletas. De pronto, el patrón del taxi en el que ya habían cargado el equipaje se encontró sin saber cómo en la cubierta de la otra lancha, y los estadounidenses montaron en cólera por haber perdido el vuelo.
Brunetti sabía lo que había ocurrido, aunque no podía probarlo: el botones había parado un taxi que pasaba por allí para llevarse él la comisión de la carrera en lugar de que la cobrase el portero. Las consecuencias eran evidentes: nadie iba a contar la verdad y los estadounidenses se quedarían sin comprender qué había sucedido. Mientras reflexionaba sobre esto, Brunetti dejó de pensar un momento en el deseo que tenía de tomarse un café y se detuvo a sopesar si era posible que hubiese dado con una especie de explicación cósmica de la historia contemporánea mundial."

jueves, 31 de agosto de 2017

UN ACTO DE MALDAD


Decimoctava entrega de la serie protagonizada por el inspector Thomas Lynley y la policía Bárbara Havers.


Más de 600 páginas de pura intriga, he estado los últimos días sumergida en el mundo del Inspector Lynley y su colega la sargento detective Barbara Havers. Es verdad que soy una adicta a Elizabeth George desde que leí la primera novela protagonizada por este aristócrata de Scotland Yard y su desaliñada colaboradora y que, aunque en alguna ocasión suene repetitivo, siempre repito.
Es verdad que Elizabeth George debió leer todas las novelas de PD James antes de escribir su serie, los paralelismos son más que una mera coincidencia; aunque el detective de James es poeta y el de George aristócrata, aunque Kate Miskin es disciplinada y Barbara Havers caótica (ambas son de clase baja y están enamoradas de su jefe), aunque Francis Benton-Smith es de origen indio y Winston Nkata de origen africano y aunque PD James es más sutil, más intelectual y más profunda tanto en el crimen como en la descripción, Elizabeth George consigue unas novelas entretenidas con un toque british que sólo puede marcar tanto una norteamericana.
Muy entretenida, la recomiendo, aunque la alumna no ha superado a la maestra.

Sinopsis (Ed. Roca)
La detective Barbara Havers tiene un gran problema: Hadyyah, la hija de su amigo Taymullah Azhar, ha sido secuestrada por su madre, Angelina, y Barbara no puede ayudar de ninguna manera. Azhar nunca se casó con Angelina y su nombre no figura como padre en el certificado de nacimiento de su hija. No puede emprender, por tanto, ningún tipo de acción legal. Azhar y Barbara contratan a un detective privado, pero las pocas pistas con las que cuentan no conducen a nada. Azhar está empezando a aceptar esta pérdida tremenda cuando Angelina reaparece con una noticia increíble: Hadyyah ha desaparecido, secuestrada en un mercado italiano. La policía italiana está investigando, pero Scotland Yard no parece interesarse por el caso hasta que Barbara decide hacerse cargo, aunque ello pueda llegar a costarle su carrera. Barbara y el inspector Thomas Lynley pronto se dan cuenta de que el caso es mucho más complejo que un secuestro típico. Barbara tendrá que decidir cuáles son sus prioridades y cuánto está dispuesta a arriesgar para salvar la vida de la niña.

Un acto de maldad (fragmento)

15 de Noviembre
Earls Court, Londres

"Pasar la tarde en el Brompton Hall, sentado en una silla de plástico, rodeado de doscientas personas que no paraban de chillar y aullar - todas ellas vestidas con lo que no se podía llamar de otra forma que "moda alternativa" -, era algo que Thomas Lynley nunca había creído que haría. Una música irritante atronaba desde unos altavoces del tamaño de un bloque de apartamentos de Miami Beach. Había un puesto de comida haciendo su agosto, vendiendo perritos calientes, palomitas, cervezas y refrescos. Cada poco una mujer gritaba a voz en cuello por encima del barrullo para dar las puntuaciones y anunciar las penalizaciones. Y diez mujeres con casco y patines competían en una pista ovalada cuyos límites habían marcado con cinta adhesiva en el suelo de cemento."



DOBLE SILENCIO


Séptima entrega de la serie protagonizada por Anders Knutas, comisario  en la policía judicial de Visby, en la isla sueca de Gotland.

Un entretenimiento muy eficaz para estas cortas vacaciones de Semana Santa, Mari Junstedt siempre funciona con sus misterios en Gotland, en esta ocasión Knutas y su vida personal tienen un protagonismo destacado, mientras que Berg y su "melindrosa" esposa Emma quedan en segundo plano (de lo cual me alegro).
El fondo es la Semana Bergman y la forma misterios del pasado y del presente que vuelven y destrozan vidas y carreras. Lo dicho un entretenimiento perfecto para leer al sol primaveral¡¡¡

RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 30 de Septiembre de 2014.
Empezar por la séptima u octava entrega de una saga, tiene sus ventajas. No vengo esperando cosas y me dejo llevar por la historia, con lo cual, la pareja de detectives, no fueron los protagonistas para mi, lo fueron los amigos que se van a la isla. Y como ellos fueron los protagonistas, casi me resultó pesado cuando mezclaban la vida personal de la policía con la investigación de un asesinato ¿a qué viene el interés de la crisis de edad de la mujer de Knutas?
Y la pareja de el periodista y su mujer ¿Por qué corno los metió en la historia?
Sólo se explica si en los libros anteriores tuvieron mayor protagonismo y los lectores quedaron enganchados de alguna manera que no puedo imaginarme con la historia entre ellos y necesitaban algún datito para seguir sabiendo. Pero leído este libro suelto ¡sobran!
Pareciera que no, pero sí, me gustó. Se lee en un plis plas y te deja esa sensación de mar helado lamiéndote las piernas.
Cada vez más lejos Suecia como destino turístico para mi

Sinopsis (Ed. Maeva)
Tres parejas de amigos que pasan cada año unos días de vacaciones juntos, se disponen a compartir una semana en el agreste e idílico paisaje de la isla de Fårö, donde se celebra un festival en homenaje a Ingmar Bergman. El famoso director sueco rodó varias películas en la isla, en la que se retiró los últimos años de su vida. La repentina desaparición de dos de los amigos da un giro inesperado al viaje, y cuando aparece el cadáver de uno de ellos, que presuntamente ha sido asesinado, el comisario Anders Knutas y su compañera Karin Jacobsson se hacen cargo del caso, aunque Knutas está preocupado por su colega, muy atormentada por un suceso de su pasado. Su investigación no hace más que complicarse cuando desenmarañan la compleja relación de sexo, celos y obsesión que une a los seis amigos en una carrera contra el tiempo para evitar más muertes.

Doble silencio (fragmento)

"El coche salió de la carretera principal y continuó por un sendero para tractores que se adentraba en el bosque. Había anochecido y la fría luz del vehículo apenas iluminaba el camino. Los pinos eran más altos de lo que solía ser habitual en Gotland. Formaban un bosque espeso; sus ramas buscaban la compañía mutua para protegerse del viento cuando las tormentas asolaban la isla. Aunque, en ese momento, todo estaba en calma. El coche solitario se abrió paso hasta detenerse en un claro junto a un pequeño pantano, que en realidad no era más que un tremedal. La luna brillaba blanca y redonda sobre el agua cristalina. Una neblina surgía de la superficie, se elevaba lentamente hacia el cielo, se evaporaba y desaparecía en el vacío.
La pareja salió del coche dando tumbos, absortos en su juego. Ella abrazada a él, labios contra labios, cuerpo contra cuerpo, manos febriles moviéndose debajo de la ropa. Ella rio y el sonido de su risa se propagó sobre la superficie del agua, rebotó entre los troncos nudosos y las rocas de alrededor; parecía no dirigirse a ninguna parte. Un viejo sauce alargaba sus ramas sobre el lago negro y frío, acariciando su superficie tranquila.
Ella se apoyó contra el tronco, abrió los brazos y cerró los ojos. El aroma a humedad y tierra y el aire fresco del rocío contra su piel desnuda la excitaron aún más. Él la mordió con fuerza en el hombro, ella dio un grito, se zafó de su abrazo y corrió hacia el bosque. La alcanzó en lo alto de la cuesta que había sobre el pantano y la apoyó con fuerza contra un pino. La corteza arañaba su espalda. Los ojos de él brillaban en la oscuridad, y comenzó a desabotonarle lentamente el vestido. Dejó que los dedos se deslizaran por los hombros desnudos hasta que el tejido se desprendió y cayó junto a sus pies. No se había preocupado de ponerse un sujetador. Llevaba días deseándolo."

EL NIÑO DE LA MALETA


Primera entrega de la serie protagonizada por la enfermera Nina Borg.

Es sorprendente lo que cuatro días de vacaciones pueden suponer para la voracidad lectora......al mismo tiempo que El jilguero y Cien años de soledad, algo ligero para leer al sol!
Y qué mejor que una trama sombría, una trama en la que el tráfico de personas, la infancia desgraciada, la caída de la URRSS y la arrogancia del "primer mundo" se mezclan sin tregua.
La  he devorado en un par de tardes "santas".
Prometedora la protagonista Nina Borg, enfermera, solidaria, imperfecta y huidiza, creo que me gustará leer más libros con esta protagonista, es nórdica pero supone un cambio con respecto a tanto policía alcohólico y atormentado (tiene su parte de tormento pero.... promete, promete mucho¡¡¡¡). Bien, resumiendo, más negra nórdica para alimentar al monstruo, recomendable¡

Sinopsis (Ed. Maeva)
Nina Borg, una enfermera entregada y con una gran conciencia social, ve cómo la estabilidad de su vida se tambalea cuando recibe la llamada de Karin, una amiga también enfermera que le pide un favor aparentemente sin complicaciones: que vaya a recoger una maleta en la estación de trenes de Copenhague. Su sorpresa es mayúscula cuando, al abrir la maleta, descubre que contiene... un niño. Al mismo tiempo, en Lituania, el pequeño Miklas ha sido secuestrado. Su madre, Sigita, se despierta en un hospital con claros síntomas de intoxicación etilíca. Ella no recuerda haber bebido, pero la policía no le cree. Ante la insistencia de Sigita y el descubrimiento de pruebas que respaldan su versión, las autoridades lituanas no tendrán más remedio que tomarse muy en serio su denuncia. Por otro lado, Nina se ve muy pronto atrapada por una peligrosa red criminal que pone en peligro su propia vida.

El niño de la maleta (fragmento)

"Mantuvo la puerta abierta con el trasero mientras tiraba de la maleta hasta meterla a rastras en las escaleras del aparcamiento. El sudor le corría por la espalda y le empapaba la camiseta. La temperatura interior del edificio era mínimamente más fresca que la del cegador infierno de Nyropgade, la calle que había afuera, pero a cambio todo apestaba a hamburguesería mohosa porque alguien había dejado los restos de un menú tirados en un escalón.
Una vez en el sótano del aparcamiento, arrastró la maleta por detrás de unos contenedores hasta un punto donde calculaba que las cámaras de seguridad no la verían. No quería meterla en el coche sin saber qué contenía. No estaba cerrada con llave, solamente tenía echadas dos aldabillas y llevaba una resistente correa alrededor. Le temblaban las manos, una de ellas aún sin sangre después de acarrear aquel peso tan poco manejable durante tanto rato, pero abrió los cierres y levantó la tapa.
Dentro de la maleta había un niño, un niño rubio desnudo, flaco y menudo de no más de tres años. El susto la impulsó a retroceder hasta la áspera pared de plástico del contenedor. El pequeño tenía las rodillas flexionadas a la altura del pecho e iba doblado como si fuera una camisa; de otro modo no habría cabido. Tenía los ojos cerrados y a la luz de los tubos de neón su piel había adquirido un brillo pálido. Sólo al ver que entreabría levemente los labios se dio cuenta de que estaba vivo."