viernes, 19 de enero de 2018

AGATHA RAISIN Y LA JARDINERA PLANTADA


Tercera entrega de la serie de novelas protagonizadas por Agatha Raisin, mujer de mediana edad que se ha "retirado" a un cottage en las Midlands (Reino Unido) donde ejerce de detective aficionada.

Tercera entrega de la serie (caen como hojas en otoño) y mi querida Miss Raisin vuelve de un viaje a Bermudas encontrándose una inesperada competidora en su encantador pueblecito de los Costwolds....
Alta, esbelta, buena cocinera, excelente jardinera.....¿es posible tanta perfección? Mary Fortune ha llegado para quedarse en Carsely pero quizás haya personas con otros planes....
Disfruto como una jovenzuela con estas historias!!!!

Sinopsis (Ed. Círculo de Lectores)
La detective más sarcástica de la campiña inglesa tiene un nuevo crimen por resolver.
Un día Agatha Raisin abandonó el aje­treo de Londres y se mudó al pequeño pueblo de Carsely. Desde entonces, esta mujer irónica y corrosiva se ha convertido en la Miss Marple de la cam­piña inglesa, más por su edad que por sus dotes detectivescas… ¿Te apetece acompañarla en su nueva aventura?
Agatha acaba de llegar de sus vaca­ciones en Nueva York, Las Bermudas y Turquía. Se había marchado para airearse de la claustrofobia que a veces pro­voca Carsely y, ya de paso, proyectar en sus vecinos una imagen de viajera cosmopolita. ¿Le habrá echado de menos su admirado James? ¿Ha pasado algo en su ausencia? No y sí. James no la ha echado de menos y sí, ha pasado que Carsely tiene una nueva habitan­te: se llama Mary Fortune y, además de tener un tipazo, es una repostera notable y mejor jardinera. No es de extrañar que James le haya echado el ojo… El espíritu competitivo de Agatha fanta­sea con que un nuevo crimen en los alrede­dores le permita demostrar a James su talen­to como investigadora… Y como a veces el azar escucha las súplicas más raras, Agatha tendrá su caso: una serie de ataques violen­tos contra algunos jardines del pueblo ten­drán su culminación en un horrible asesinato.

Agatha Raisin y la jardinera plantada (fragmento)

UNOEl templado y húmedo invierno se estaba transformando ya en primavera cuando Agatha Raisin regresó conduciendo lentamente a su casa, en el pueblo de Carsely, tras unas largas vacaciones. Se convenció a sí misma de haberlo pasado de maravilla, lejos de aquel lugar de mala muerte. Había estado en Nueva York, en las Bermudas, en Montreal, para luego ir a París, Italia, Grecia y, por último, Turquía. Aunque era una mujer acaudalada, no estaba acostumbrada a gastar tal cantidad de dinero en sí misma, y se sentía confusamente culpable. En el pasado, casi siempre se había decidido por el paquete de vacaciones organizadas más caro y compartido su estancia con un grupo. En esta ocasión, había viajado sola. Carsely le había proporcionado, o eso pensaba ella, la seguridad necesaria para hacer amigos, pero tenía la sensación de haber pasado las últimas semanas en una sucesión borrosa de días recluida en una habitación de hotel o en persistentes y solitarias incursiones a varios enclaves turísticos.

CHICOS Y CHICAS


11 relatos en 222 páginas, 11 retazos de vidas ajenas narrados en tercera persona, 11 finales inquietantes.
No es una novela de intriga, no hay asesinatos ni investigaciones pero desde Incendios hasta Arkímedes, pasando por Confesión, Chicos y chicas, Ausencia, Tarot, Aficiones, En tierra extraña, Barro, Sueños y La misma mujer; hay secretos, misterios, celos, traiciones, amor y muerte.
No sabría elegir uno de ellos, todos me han gustado, todos me han inquietado y cada uno de ellos me ha dejado una historia por terminar.

Sinopsis (Ed. Anagrama)
En este extraordinario libro de relatos –el séptimo en su haber–, la voz narrativa de Soledad Puértolas se expresa en tercera persona y cobra el tono de las narraciones clásicas, cuando el narrador, por encima de todo, perseguía la magia, la seducción inherente a la misma narración, independientemente de lo que se contara. Sin embargo, la cercanía que implica la primera persona, los relatos contados por quien los protagoniza, no se ha perdido. Ha alcanzado un matiz nuevo. Quizá de mayor serenidad, de mayor hondura. Sin que falte el humor, que recorre todos los relatos, y que en algunos de ellos hace que se acentúe nuestra sonrisa.
Son relatos que tratan de encuentros, de desencuentros, de reencuentros. De chicos y chicas. De parejas que se separan, de traiciones, envidias e ilusiones, de mitos de adolescencia, de ideales de juventud, de las perplejidades de la madurez, del extrañamiento de la vida. Hay hijas que veneran a sus madres, madres que desconfían de sus hijas o de sus yernos, hay perros que se encaraman a las novias de sus dueños, hay horas de calor y de amor en el interior de una caravana en un camping, horas arrancadas a la vida oficial, de todos conocida, horas secretas. Y horas que, aun estando a la vista de todos, nadie ve. Sólo la voz que narra, que escoge ese momento y lo detiene. Un antiguo amor, una niña de la mano de su madre, las olas del mar enroscadas a los tobillos. No hay nadie en la playa todavía.
Recuerdos, premoniciones, ensoñaciones. Realidades que nos sacuden. Personas que irrumpen, que se van sin decir adiós. Silencios que sólo pueden llenarse con sueños. Personajes de todas las edades que, de pronto, se sitúan a un lado del camino, ven el paso de los otros, y no saben si han vivido ya ese momento o es algo que aún está por venir.

Chicos y Chicas (fragmento)

Tarot

Rosario estaba segura de que algunas mentes malévolas pensaban que su hija la decepcionaba. La miraban con expresión de censura, pero a la vez, esto era lo peor, con cierta complicidad. La comprendían. ¡Qué mala suerte!, la única niña de una familia de guapos había salido, inexplicablemente, fea.

Pablo, el marido de Rosario, era un hombre guapo. Rosario era guapa, los tres hijos que habían tenido, Pedro, Manuel y Adolfo, eran no guapos sino guapísimos. Pero Luz, que había ido a nacer en cuarto lugar, no se parecía a ninguno. ¿A quién se parecía? Había que investigar en los antepasados. Quizá en la bisabuela paterna se encontraran algunos de sus rasgos. Pero las fotos son muy engañosas, y, en realidad, ¿qué más daba?

Por lo demás, Luz era una niña que no causaba problemas. No destacaba en nada. No, no se correspondía con su nombre. Luz pasaba desapercibida. Durante los años escolares, las monjas nunca tuvieron que elevar una queja sobre su comportamiento ni sobre la marcha de sus estudios. No era excepcional, tampoco sacaba notables, pero siempre conseguía superar, aunque fuera por unas décimas, el aprobado. En alguna ocasión, eso es cierto, fue castigada por hablar en clase con una compañera o por no prestar la debida atención a las explicaciones de la profesora, pero nada serio. No pertenecía al grupo de las alborotadoras, aunque, curiosamente, en él se encontraran algunas de sus mejores amigas.

AGATHA RAISIN Y LOS PASEANTES DE DEMBLEY


Cuarta entrega de la serie de novelas protagonizadas por Agatha Raisin, mujer de mediana edad que se ha "retirado" a un cottage en las Midlands (Reino Unido) donde ejerce de detective aficionada.

Nueva aventura de Agatha Raisin publicada en castellano, nuestra intrépida detective aficionada se infiltra en un grupo de "paseantes" que reclaman derechos de paso a los terratenientes rurales. Acompañada por ese comandante que le roba el corazón descubrirá oscuros secretos.....
Viene, además, está novela acompañada de un relato corto que nos desvela los inicios de Agatha en el mundo de la publicidad.
He disfrutado mucho!!!

Sinopsis (Ed. arrobabooks)
Agatha Raisin y el caso de la excursionista que odiaba a los terratenientes
Después de un tiempo, Agatha Raisin regresa a Cotswold, su querido pueblo en Carsely, y a los encantos de su apuesto vecino, James Lacey. La verdad es que James no parece muy encantado de verla, pero Agatha pronto encuentra distracción en un asesinato sensacional. La víctima, que aparece semienterrada en un sembrado, es la joven excursionista Jessica Tartinck, que pasó su vida irritando a los terratenientes al reclamar sus derechos de paso. Agatha no ceja en la esperanza de implicar al reacio James en su investigación. Hay tantas pistas a seguir… desde los compañeros de caminata de Jessica, hasta los propietarios de las tierras, todos parecen capaces de cometer un asesinato…
Y además, relato exclusivo con el primer caso de Agatha Raisin donde descubrimos a una joven ambiciosa y con una autoestima a prueba de chascos, que solo quiere huir de una infancia pobre y un matrimonio desastroso. Cuando, a través de su empleo de relaciones públicas, se tropieza con un asesinato, Agatha decide abandonar su trabajo para demostrar que el hombre que todos creen culpable es, en realidad… ¿inocente? Las pesquisas la llevarán a cambiar de aspecto para infiltrarse en un club de lesbianas, pero no vamos a contarte más. Lo único que has de saber es que esta es la primera vez que un policía se hará esta pregunta: ¿cómo esa mujer tan irritante es capaz de resolver un caso sin hacer otra cosa que dar palos de ciego?

ANTES DE LA CAÍDA


Quiere ser un thriller trepidante y se va quedando en una serie de "retratos", bastante estereotipados de personajes muy recurrentes en el imaginario colectivo norteamericano, a saber, el multimillonario hecho a si mismo, el tiburón de las finanzas, el artista fracasado y alcohólico en vías de recuperación, la chica guapa, el guapo acosador, el ama de casa perfecta, el ama de casa neurótica......
En fin, prometía una novela y se queda en una serie de "episodios" que transcurren con mayor o menor fortuna hasta la resolución previsible del caso.
Creo que el autor es productor y guionista, haría bien en dedicarse a lo que sabe hacer.

Sinopsis (Ed. Reservoir Books)
De la mano de Noah Hawley, creador de la serie de televisión Fargo, llega Antes de la caída, «la mejor novela de suspense del año» de acuerdo con The New York Times.
En una nebulosa noche de verano once personas despegan en un jet privado rumbo a Nueva York. Diez de ellas pertenecen a la alta sociedad de Estados Unidos. El undécimo pasajero es Scott Burroughs, un artista en horas bajas. Dieciséis minutos después sucede lo impensable: el avión se estrella en el océano. Solo sobrevivirán el pintor y un niño de cuatro años, último miembro de una familia inmensamente rica y poderosa.
A medida que se descubre la historia de cada uno de los pasajeros, afloran extrañas coincidencias que apuntan a una conspiración. ¿Fue simple casualidad que perecieran en un accidente algunas de las figuras más influyentes de la televisión y de Wall Street?
Pronto empieza una campaña de acoso mediático que amenaza con hundir a Scott, quien luchará por mantenerse a flote mientras las autoridades porfían en encontrar la verdad entre los escombros del accidente.
Antes de la caída es una novela apasionante y adictiva que indaga como pocas en la geografía secreta del alma humana. El destino y los lazos que nos unen, sean de sangre o adquiridos, constituyen su núcleo central y Noah Hawley logra que brille con luz propia la especial relación que se establece entre el pintor y el pequeño J.J.
Antes de la caída (fragmento)

Un avión privado espera en la pista del aeropuerto de Martha’s Vineyard con la escalerilla desplegada. Es un OSPRY 700SL de nueve plazas construido en 2001 en Wichita, Kansas. Es difícil poder decir con absoluta certeza de quién es ese avión. Consta a nombre de una sociedad holandesa con una dirección postal en las islas Caimán, pero en el logo del fuselaje pone GullWing Air. El piloto, James Melody, es británico. Charlie Busch, el copiloto, es de Odessa, Texas. La azafata, Emma Lightner, nació en Mannheim, Alemania, hija de un teniente del Ejército del Aire norteamericano y su jovencísima esposa. Se mudaron a San Diego cuando ella tenía nueve años.
Cada uno de ellos ha seguido su camino. Ha tomado determinadas decisiones. Cómo acaban en el mismo sitio a la misma hora dos personas es un misterio. Entras en un ascensor con una docena de desconocidos. Subes a un autobús, haces cola en un lavabo. Sucede a diario. Intentar predecir los espacios por los que nos moveremos y la gente con la que nos toparemos sería absurdo.
Por la puerta abierta emerge la tenue luminosidad de las luces halógenas. Nada que ver con el molesto resplandor fluorescente de los aviones comerciales. Dentro de dos semanas, Scott Burroughs dirá en una entrevista en la New York Magazine que lo que más le sorprendió en su primer vuelo en un jet privado no fue el generoso espacio para las piernas o el bar perfectamente surtido, sino lo personalizada que parecía la decoración, como si a partir de cierto nivel de ingresos viajar en avión no fuese más que otra manera de estar en casa.
La noche es cálida en Martha’s Vineyard, treinta grados con un ligero viento del sudoeste. El despegue está previsto para las diez. Durante las tres últimas horas se ha formado una densa niebla costera sobre el estrecho, espirales de un blanco tupido se arrastran lentamente por la pista iluminada.
La familia Bateman es la primera en llegar con el Range Rover que tienen en la isla: David, el padre; Maggie, la madre, y sus dos hijos, Rachel y J. J. Estamos ya avanzado agosto, y Maggie y los niños llevan en Martha’s Vineyard un mes, mientras que David ha estado viajando desde Nueva York los fines de semana. Le es difícil poder ausentarse por más tiempo, pese a que le gustaría poder hacerlo. David está metido en el «negocio del espectáculo», que es como la gente que trabaja en eso llama hoy en día a los noticiarios televisivos. Un circo romano de información y opiniones.

LA CUARTA VÍCTIMA


Novena entrega de la serie de novelas protagonizadas por Anders Knutas que trabaja en la Policía Judicial de Visby en la isla de Gotland (Suecia).

Como no tengo la cabeza para "profundidades" me he dedicado a Mari Jungstedt que no es una autora complicada sino más bien ligera con misterios que se adivinan en la cuarta página y personajes tan simples que, en ocasiones, resultan un poco aburridos.
En esta nueva entrega de la Serie Gotland tenemos a Anders Knutas en plena crisis matrimonial, a Karin su ayudante pensando en cambiar de vida y a ambos investigando un misterio que cualquier lector avezado descubrirá en los primeros capítulos. Mucho más desdibujados otros personajes habituales como Johan y su insoportable esposa.....
En fin lectura para pasar el rato sin que el dolor de cabeza "gripal" aumente.

Sinopsis (Ed. Maeva)
¿Qué relación hay entre un atraco a mano armada y un crimen nunca resuelto? Descúbrelo en una nueva entrega de la serie de Gotland.
Protagonizada por Anders Knutas, Karin Jacobson y Johan Berg, esta trepidante novela policiaca se adentra en los traumas de la infancia y en cómo su sombra puede alcanzar el futuro.Una mañana de finales de verano tres encapuchados atracan un banco a mano armada en pleno centro de Klintehamn, una pequeña localidad en la costa oeste de la isla de Gotland. En su huida en un coche robado, los ladrones atropellan a una niña de seis años. Cuando la Policía da con la casa de campo abandonada donde se ocultan, encuentran el cadáver de uno de los delincuentes, pero ni rastro de los otros dos miembros de la banda. El comisario Anders Knutas y su compañera Karin Jacobsson se encargan de la investigación. Para empezar, solo cuentan con dos datos que pueden ser de ayuda: el primero es que, según un testigo del robo, uno de los ladrones era una mujer, y el segundo, que existen conexiones con los clubes de motoristas de Gotland. Cuando ninguna de estas pistas da sus frutos, Knutas decide retomar un caso ocurrido hace años. Por su parte, el periodista Johan Berg empieza a hacer su particular aportación al caso, pero no puede sospechar que la tragedia está a la vuelta de la esquina.

La cuarta víctima (fragmento)

A primera vista todo parecía estar en orden. La casa, que se encontraba apartada, se alzaba tras un alto muro de piedra. El coche, aparcado como de costumbre en la explanada de gravilla, junto a los contenedores de basura. El suelo empedrado se veía parcialmente cubierto de arbustos de arándano rojo y musgo. Algunos pinos retorcidos, cuyas copas se balanceaban nerviosas con el viento. La terraza que daba al mar, preparada para el invierno, resultaba fría bajo el cielo plomizo, pues no había rastro de los muebles ni de la barbacoa de gasoil. Las contraventanas de la planta baja estaban cerradas e impedían cualquier intento de vislumbrar el interior. Al parecer, la víspera, la familia había llegado tarde a casa y se había ido directamente a la cama sin deshacer el equipaje.


LA HORA DE DESPERTARNOS JUNTOS


Desde los años 30 hasta la actualidad con su estilo peculiar a caballo entre el documental y la novela, Kirmen Uribe retrata a la sociedad vasca del siglo XX encarnada en la familia Letamendi Urresti.
La hora de despertarnos juntos desconcertará en su inicio al lector pero responde a esa forma de escribir de Uribe en el que la historia habla por su boca y por boca de los personajes, no hay solución de continuidad entre unos paisajes y otros, a veces esa estructura parecerá confusa pero la potencia narrativa de Uribe suple cualquier inconveniente estructural.
La vida de Karmele Urresti y Txomin Letamendi, sus padres, sus hermanos, sus hijos y sus amigos es la vida de Euskadi el siglo pasado, con luces, con sombras, sin partidismo, sin rencor, con tristeza por las vidas pérdidas y los sueños arruinados, lejos de venganzas y de ajustes de cuentas, tal vez haya llegado ya "la hora de despertarnos juntos".
Me ha encantado.

Sinopsis (Ed. Seix Barral)
La nueva novela de Kirmen Uribe, ganador del Premio Nacional de Narrativa y del Premio de la Crítica en euskera, entre otros.
A Karmele Urresti la guerra civil la sorprende en su Ondarroa natal. Mientras la población huye al exilio, ella decide quedarse curando a los heridos y tratando de liberar a su padre, que ha sido encarcelado. Al final de la guerra debe abandonar su tierra y partir hacia Francia, donde pasa a formar parte de la embajada cultural vasca. Allí conoce al que será su marido, el músico Txomin Letamendi. Juntos recorren media Europa hasta que, a punto de caer París en manos de los alemanes, huyen a Venezuela.
Pero la Historia irrumpe de nuevo en su vida. Cuando Txomin decide sumarse a los servicios secretos vascos, la familia regresa en plena Segunda Guerra Mundial a Europa, donde él realiza labores de espionaje contra los nazis hasta que es apresado en Barcelona, bajo una dictadura a la que no sobrevivirá. Karmele tendrá que arriesgarse y partir, sola esta vez, con la esperanza ciega de quien deja atrás lo más preciado.
La gran novela sobre la historia vasca, española y europea del siglo xx hasta nuestros días.

La hora de despertarnos juntos (fragmento)

PRIMER RECUERDO DE KARMELE URRESTI
1
Algunos relatos conviven en la cabeza del escritor durante largo tiempo, años incluso, antes de salir a la luz. En ese intervalo, la mayoría de ellos se malogran, allí mismo, extraviados entre las profundidades del cerebro, sin cobrar vida, pero unos pocos, no obstante, perduran latentes para siempre.
Éste es uno de esos relatos.
Sobre la familia Urresti había oído hablar a menudo en casa; a fin de cuentas, Ikerne Letamendi Urresti era de la edad de mi madre y amiga suya desde la infancia, a raíz de los veranos que compartieron durante las vacaciones escolares que Ikerne pasaba en Ondarroa. Mi madre me contaba que en aquellos días de posguerra los libros suponían un lujo que en su familia no se podían permitir, pero que ella se las ingeniaba para leer en la casa de Antsosolo, donde Ikerne veraneaba con sus abuelos. Si las amigas quedaban a primera hora de la tarde para salir a la calle, ella se presentaba en el domicilio de Antsosolo con bastante antelación, y así los abuelos de Ikerne le solicitaban que, por favor, pasara al salón y aguardara allí a que su nieta terminara la comida. Entonces mi madre escogía un libro de la biblioteca y dedicaba esa media hora a la lectura.

EL AMOR Y LOS BOSQUES


RESEÑA DE CLARA GLEZ. para LIBROS, 17 de Enero de 2017.

El amor y los bosques - Éric Reinhardt
Una novela sobre una novela.
A partir de cartas al autor de mujeres comentando sus miedos y sus inseguridades, surgió el amor y los bosques....
Una novela sobre la vida de una mujer que no sabe cómo salir del maltrato psicológico de su marido. Tras conversar con el autor, se va confesando con él, contándole sus miedos, su sexualidad con un contacto de internet, sus angustias, su deseos de salir adelante y otros muchos sentimientos.
Además de una trama bien construida, plantea un tema de rigurosa actualidad, y se acompaña de trozos de erotismo, muy buscados hoy día por los lectores.
Es dura, es tierna, es amena y no te deja indiferente.
No llegas a saber si Bénédicte Ombredanne, así se llama la protagonista, es una persona real, o bien es el reflejo de miles de mujeres que desgraciadamente se encuentran en su misma situación.
Bénédicte, cuenta , desgrana todos sus sentimientos, todas sus sensaciones tanto malas como buenas, las razones que impedían alcanzar un mínimo de felicidad. Sensaciones que incluso acaba en somatizar enfermedades, y acabar siendo una prisionera de sí misma., ante el acoso sutil y maquiavélico, por parte de su marido en sus trece años de matrimonio.
Con un final sorprendente, que nos deja aún más helados , que en el resto de su lectura, el autor resuelve perfectamente la trama.
El lenguaje es directo, transmite el estado anímico de la protagonista, con una gran calidad literaria, a veces asfixia incluso, aunque Bénédicte Ombredanne actúe ante la sociedad como si nada pasase, situación desgraciadamente muy común en nuestros días, en todas las clases sociales.
Ganadora del Premio Renaudot des Lycéens, finalista del Premio Médicis , es una novela que como se dice hoy día, “ engancha” y en mi caso lo que más me impresionó es como esta mujer, logra esconder en su interior, todo su horror, sin dejar que nadie llegue a sospechar en lo que consiste realmente su vida. Muchos la consideran como una nueva Madame Bovary. Aunque los tiempos y las formas de afrontarlos cambian, ambas mujeres se encuentran atrapadas en una vida secreta, no gratificante en este caso para Benédictine, que jamás arriesgará para liberarse de ella. Aunque el destino le depare algún camino para hacerlo.
Todo esto, hace meditar sobre la vida atormentada de miles de mujeres, y la pasividad con que la sociedad actúa a veces sobre tantos casos de maltrato.

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
El retrato de una mujer en busca de una pasión. Una Madame Bovary contemporánea
Bénédicte Ombredanne, una provinciana mujer de clase media, hace todo lo posible por conocer a Éric, el autor del libro que ha cambiado su vida. En sus encuentros en un café de París, o en sus mensajes por mail, le confía sus secretos más íntimos: la tormentosa relación con un marido cruel y egoísta, y el descubrimiento de una nueva sexualidad con un amante encontrado en una página de citas en internet.
En un momento dado pierden el contacto por un tiempo, pero cuando Éric se entera del destino de Bénédicte, viajará a Metz en busca de toda la verdad.
Ganadora del Premio Renaudot des Lycéens
Candidata al Premio Goncourt
Finalista del Premio Médicis

El amor y los bosques (fragmento)

1.

Tuve ganas de conocer a Bénédicte Ombredanne cuando me topé con su primera carta: era una carta cuyo fervor matizaban los toques humorísticos, dos páginas que me conmovieron y me hicieron sonreír, muy bien escritas además, una combinación lo bastante inusitada como para engancharme inmediatamente.
Un tanto cauta al principio, aquella carta era, según iba avanzando, cada vez más feroz y airada. Había ecos de ironía, de regocijada indisciplina, de barullo de patio de colegio en aquellas frases, cuya grafía inclinada hacia el porvenir denotaba abiertamente la audacia muy consciente de sí misma con la que aquella desconocida se me había echado encima mentalmente, como si hubiese escrito la carta de un tirón sin volverla a leer antes de perderla de vista irremediablemente en la ranura de un buzón, hala, ya está, demasiado tarde para arrepentirse, al cabo de una carrera irreflexiva, fogosa, que seguramente había arrancado en el momento en el que la joven apoyó la punta del bolígrafo en el papel, con determinación, negándose cualquier posibilidad de dar marcha atrás. Me resultaba obvio que el verdadero piloto de aquellas dos páginas había sido la timidez, timidez que la autora había embriagado de sarcasmo para tener la certeza de concluir lo que había empezado. Era una intuición un tanto evanescente, una intuición que me habría costado mucho trabajo argumentar a partir de ejemplos concretos tomados de esas dos páginas, pero el propio impulso de aquella carta, de carácter mixto, temeroso y audaz, respetuoso e insolente, serio y desenvuelto, inteligente e ingenuo cuando no pueril (de un carácter en constante paradoja, pues), me llevó a pensar que aquella lectora huía así de una situación que no le convenía, que la hacía sufrir o que sencillamente le resultaba intolerable: aquella carta era como una escapatoria urgente (eso es lo que yo notaba de un modo confuso), pero una escapatoria cuya protagonista no podía prever si no acabaría estampándola también a ella contra un muro de indiferencia o de desprecio condescendiente, de silencio, pues, de ahí los esfuerzos que se imponía —cada tres o cuatro frases— para no creérselo del todo, evitando así cualquier decepción que le escociera demasiado si, por ventura, aquella tentativa resultaba infructuosa. Percibí todas esas cosas delante de la puerta de casa, con el abrigo puesto, tras recoger del felpudo, cuando estaba saliendo, la carta que me había reenviado la editorial en el sobre original (azul claro, con matasellos de Metz y la tachadura de una becaria que había añadido mi dirección), esa primera carta de Bénédicte Ombredanne, que leí de principio a fin en el rellano, sin bajar ni un solo peldaño de las escaleras.