jueves, 30 de noviembre de 2017

EL DOMADOR DE LEONES


Novena entrega de la serie de novelas protagonizadas por Erica Falck, escritora y detective aficionada y su marido Patrik Hedström,  policía. Ambos viven en  Fjällbacka, un pequeño pueblo en Suecia.

Creo que Camilla Läckberg ha estado leyendo mucho a Karin Slaughter, porque el principio de su novela se parece sospechosamente a El número de la traición publicado en 2009 por la autora norteamericana......bien es verdad que ahí termina casi todo, y recalco, "casi todo" el parecido. Y aquí se termina el "spoiler".
He pasado un par de días muy entretenidos con esta novena entrega de la saga protagonizada por Erica Falck y Patrik Hedström, en el nórdico pueblo de Fjällbacka, donde más que nieve y hielo se acumulan intrigas, crímenes y secretos del pasado.
Entretenida y fácil de leer¡¡¡

Sinopsis (Ed. Maeva)
Estamos en pleno mes de enero y en Fjällbacka hace un frío polar. Una joven medio desnuda deambula por el bosque nevado y llega a la carretera. Un coche aparece de la nada y no tiene tiempo de esquivarla. Cuando el comisario Patrik Hedström y su equipo reciben la alarma sobre el accidente, la chica ya ha sido identificada. Desapareció cuatro meses atrás y desde entonces no se ha sabido nada de ella. Su cuerpo tiene marcas de atrocidades inimaginables, y es posible que no sea la única, ni la última víctima de su agresor. Al mismo tiempo, Erica Falck investiga una vieja tragedia familiar que acabó con la muerte de un hombre. Erica sospecha que su esposa oculta algo terrible y teme que el pasado proyecte su alargada sombra sobre el presente.

El domador de leones (fragmento)

El caballo sintió el olor a miedo incluso antes de que la niña saliera del bosque. El jinete lo jaleaba, clavándole las espuelas en los costados, pero no habría sido necesario. Iban tan compenetrados que el animal notaba su voluntad de avanzar.
El repiqueteo sordo y rítmico de las pezuñas rompía el silencio. Durante la noche había caído una fina capa de nieve, así que el caballo iba dejando pisadas nuevas y el polvo de nieve le revoloteaba alrededor de las patas.
La niña no iba corriendo. Caminaba trastabillando, siguiendo una línea irregular, con los brazos muy pegados al cuerpo.
El jinete lanzó un grito. Un grito estruendoso que lo hizo comprender que algo fallaba. La niña no respondió, sino que siguió avanzando a trompicones.
Se estaban acercando a ella y el caballo aceleró más aún. Aquel olor ácido e intenso a miedo se mezclaba con otra cosa, con algo indefinible y tan aterrador que agachó las orejas. Quería detenerse, dar la vuelta y volver al galope a la seguridad del establo. Aquel no era un lugar seguro. El camino se interponía entre ellos. Estaba desierto, y la nieve recién caída se arremolinaba sobre el asfalto como una bruma en suspenso.
La niña continuaba avanzando hacia ellos. Iba descalza y tenía los brazos desnudos, como las piernas, en marcado con tras te con la blancura que los rodeaba; los abetos cubiertos de nieve eran como un decorado blando a sus espaldas. Ahora estaban cerca el uno del otro, cada uno a un lado del camino, y él oyó otra vez el grito del jinete. El sonido de su voz le era muy familiar y, al mismo tiempo y en cierto modo, le resultaba extraño.

miércoles, 29 de noviembre de 2017

UNA NOVELA RUSA


Llevo un par de semanas sumergida en esta novela rusa que me ha fascinado y aburrido, a partes iguales. En, escasamente, 300 páginas Emmanuel Carrère "revuelve" su vida de principio a fin, su vida y la de sus ancestros, su vida y la de su amada del momento, su vida y la algunos rusos, su vida y la de un húngaro....
Es una novela rusa porque Rusia es un referente durante toda la narración, es una n...ovela rusa porque su alma es triste y con un punto de locura, es una novela rusa porque a veces se hace "más larga que un día sin pan", es una novela rusa porque hay que leerla "sin prisa pero sin pausa", es una novela rusa.....sin más.
Es mi primera experiencia con Carrère y no será la última; creo que Una novela rusa no es su mejor obra, pero no me arrepiento de haber empezado por ella, en ella el autor "se desnuda" y cuando un@ conoce al autor antes de leer su obra, tiene mucho ganado.
¿La recomiendo?....., ummmm para lector@s especiales a los que no asuste algún pasaje (largo) aburrido y perseveren hasta encontrar el alma de la novela que es el alma del autor.

Sinopsis (Ed. Anagrama)
La locura y el horror han obsesionado mi vida, escribe el autor. Los libros que he escrito no hablan de otra cosa. Después de El adversario, quise escapar. Creí que escapa­ba amando a una mujer y realizando una investigación. La investigación fue sobre mi abuelo paterno, que desa­pareció en 1944 y, probablemente, fue ejecutado por colaborar con los alemanes. Es el fantasma que ator­menta a nuestra familia. Para exorcizarlo seguí caminos que me llevaron hasta una pequeña ciudad perdida de la provincia rusa, donde permanecí largo tiempo a la es­pera de que ocurriese algo. Y ocurrió: un crimen atroz. La locura y el horror volvían a darme alcance. También en mi vida amorosa: escribí para la mujer que amaba un relato erótico que debía irrumpir en la realidad, y la rea­lidad desbarató mis planes. Nos precipitó a una pesadi­lla. De todo esto hablamos aquí: de situaciones que ela­boramos para dominar la realidad y de la forma terrible en que ella las asume para respondernos.

Una novela rusa (fragmento)

1El tren rueda, es de noche, hago el amor con Sophie en la litera y ella es ella. Los compañeros de mis sueños eróticos suelen ser difíciles de identificar, son varias personas a la vez sin tener la cara de ninguna, pero aquella vez no, reconocí la voz de Sophie, sus palabras, sus piernas abiertas. En el compartimento del coche cama donde hasta entonces estábamos solos entra otra pareja: el señor y la señora Fujimori. Ésta se nos une, sin remilgos. El entendimiento es inmediato y muy risueño. Sostenido por Sophie en una postura acrobática, penetro a la Fujimori, que pronto experimenta un rapto de placer. En ese momento, el señor Fujimori nos comenta que el tren ya no avanza. Está detenido en una estación, quizá desde hace un rato. Inmóvil en el andén iluminado con lámparas de sodio, un miliciano nos observa. Corremos las cortinas a toda prisa y, convencidos de que el miliciano va a subir al vagón para pedirnos cuentas de nuestra conducta, nos apresuramos a ponerlo todo en orden y a vestirnos para estar dispuestos, cuando él abra la puerta del compartimento, a asegurarle con el mayor aplomo que no ha visto nada, que lo ha soñado. Todo sucede en una mezcla excitante de aturdimiento y de risa tonta. Sin embargo, explico que no hay motivo de risa: corremos el riesgo de que nos detengan, nos lleven al puesto mientras el tren parte y Dios sabe lo que sucederá después, se perderá nuestro rastro, palmaremos sin que nadie nos oiga gritar en un calabozo subterráneo en el fondo de este pueblecito fangoso de la Rusia profunda. Sophie y la Fujimori se desternillan aún más al oír mis inquietudes, y al fin yo también río con ellas.

CONJURA EN DORCHESTER TERRACE


Vigesimoséptima entrega de la serie de novelas protagonizadas por el Inspector Pitt y su intrépida esposa Charlotte.

Mi querida Noelia Vallina me ha recordado cuanto me gustan las vidas y relaciones de los protagonistas de algunos libros, a veces, más que los propios casos que resuelven.......¡
Esto me pasa con el Inspector Pitt y su esposa Charlotte, he leído todos sus libros desde el lejano Los crímenes de Cater Street, y van allá la friolera de 27 libros y 36 años.....no lo puedo creer¡¡
Bien pues he disfrutado, sin pensar, de esta conjura en Dorchester Terrace y de la vida cotidiana de los Pitt, la tía abuela Vespasia y toda la sociedad victoriana que tanto me gusta.
Un entretenimiento sin más que me relaja y me consuela entre exámenes, trabajos fin de grado, tribunales y.....ufff

Sinopsis (Ed. Debolsillo)
Thomas Pitt acaba de ser nombrado jefe de la Brigada Especial. Muchos piensan que no está capacitado para el cargo... Incluso él, lo piensa. Sin embargo, no es momento para inseguridades. Existe una sólida sospecha de que se está preparando un atentado en la línea ferroviaria que conecta Dover y Londres. Por si fuera poco, en unos días el duque Alois de Habsburgo llegará a la capital, y Pitt piensa que él podría ser el objetivo.
Entretanto, su tía Vespasia visita a una vieja amiga en su residencia de Dorchester Terrace. Se trata de Serafina Montserrat, una ex espía de origen italiano con demencia senil, que sufre por si revela algún secreto confidencial. Pero ella no es la única... Alguien más comparte su temor, alguien que no dudará en asesinarla. Thomas Pitt, que ayuda a su tía a investigar la muerte de la anciana, no tardará en descubrir que ambos casos están relacionados.

Conjura en Dorchester Terrace (fragmento)

1

Era un día de mediados de febrero y estaba oscureciendo en el exterior. Pitt se levantó de su mesa y se acercó a subir el gas de los apliques de uno en uno. Se estaba acostumbrando a ese despacho, aunque todavía no estaba cómodo allí. Para él seguía siendo el despacho de Victor Narraway.
Cuando se volvió otra vez hacia la mesa casi esperaba ver los dibujos a lápiz de árboles sin hojas que su anterior inquilino había tenido colgados en las paredes, en lugar de las acuarelas del cielo y los paisajes marinos que Charlotte le había regalado. Sus libros no se diferenciaban mucho de los de Narraway. Tenía menos volúmenes de poesía, tal vez menos clásicos, pero libros similares de historia, política y derecho.
Narraway se había llevado el retrato con marco de plata de su madre. Hoy Pitt por fin había puesto en su lugar su fotografía favorita de su esposa, Charlotte, en la que aparecía sonriendo. A su lado estaba Jemima, de trece años, con aspecto muy adulto, y Daniel, de diez, que todavía tenía la cara dulce de un niño.


LAS ALAS DEL DINOSAURIO


Primera entrega de la serie de novelas protagonizadas por Søren Marhauge,  policía en Copenhague.

Hace tiempo que deseaba leer algo de esta danesa, escritora y bióloga, que ha conseguido el Premio a la mejor Novela Negra Danesa de la década 2000-2010; y he empezado con buen pie.
Primera novela de una serie protagonizada por policía danés de oscuro pasado y bióloga de pasado incierto.....
Ahí lo dejo porque me ha tenido absorta durante los últimos días, casi 500 páginas de thriller psicológico o novela cuasi-negra, en el ámbito de la investigación universitaria y con el origen de los dinosaurios al fondo.
Me ha gustado¡¡¡

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
¿Puede alguien perder la vida por algo que ocurrió hace millones de años?
Las alas del dinosaurio no es solo un trepidante thriller científico repleto de intriga psicológica, sino también una apasionante historia de amor.
Anna está furiosa: con su madre, con su vida, con su tesina y, sobre todo, con el profesor que se la dirige, que lleva un año intratable. Cuando aparece asesinado, todo apunta a una venganza. ¿Es Anna la culpable?
Søren, el policía que investiga el crimen, le concede el beneficio de la duda a cambio de que la joven le ayude a desentrañar las macabras circunstancias del caso y a desembrollar las intrigas de los círculos científicos, un mundo en el que todos están dispuestos a todo a cambio de prestigio y poder.
De pronto, Anna se encuentra inmersa en una enmarañada pesadilla. Son muchos los hilos que conducen hacia su estudio sobre la historia de los dinosaurios, pero más los que enredan su propia vida... y la de Søren.
Mejor Novela Negra Danesa de la Década (2000-2010).

Las alas del dinosaurio (fragmento)

Capítulo ISolnhofen, sur de Alemania, 5 de abril de 1877
Anna Bella estaba soñando que descubría el Archaeopteryx, el ave primitiva de Baviera. Se hallaban en la sexta semana del viaje, hacía tiempo que
una fina película de tierra recubría los rostros de todos los integrantes del grupo y los ánimos estaban por los suelos. El jefe de la expedición, Friedemann von Molsen, era el único que conservaba el buen humor. Por las mañanas, cuando, adormilada y aterida, salía de la tienda, solía encontrarle tomando un café junto al fuego; los restos de gachas de la cazuela revelaban que hacía ya mucho que estaba vestido y había desayunado. Ella estaba harta de gachas, harta de polvo y harta de arrodillarse en un suelo del que sólo salían unos huesos demasiado recientes, que, aunque no carecían de interés, no
eran lo que la había impulsado a estudiar Biología y mucho menos a dedicar seis semanas de su semestre sabático a vivir en unas condiciones tan penosas. Corría el año 1877 y, en ese punto del sueño, Anna empezó a notar la sensación de que algo no acababa de encajar. Llevaba puesto su chaquetón militar relleno de plumón y unas modernas botas gruesas de pelo con las suelas de goma, pero a Friedemann von Molsen no parecía sorprenderle lo más mínimo, a pesar de que él llevaba un terno de pana con chaleco y leontina, un gorro de lana calado hasta las orejas y una pipa corta en la boca.

PECADO ORIGINAL


Quinta entrega de la serie de novelas protagonizadas por Will Trent, agente especial del DIG, la policía estatal de Georgia.

"....caiga su sangre sobre nosotros y sobre nuestros hijos.." Mateo 27:25
Cita bíblica que parece hecha "ad hoc" para esta novela trepidante de Karin Slaughter en la que el pasado vuelve para complicar la vida de los protagonistas, de todos los protagonistas. Una nueva "vuelta de tuerca" a las vidas de Sara Linton, Will Trent, la familia Mitchell y Amanda Wagner.
Ideal para las tardes de casi-ver...ano en las que te distraes con el vuelo de una mosca, mientras tomas el sol en la piscina, una terraza, un banco del parque o la puerta de tu casa.....¡¡¡
Para l@s indecis@s una oportunidad de comenzar la lectura, en el siguiente enlace:
http://www.rocaeditorial.com/es/catalogo/sellos/roca-editorial-5/pecado-original-1800.htm

Sinopsis (Ed. Roca)
La agente Faith Mitchell llega tarde a todos los sitios. Se suponía que tenía que recoger a su bebé a mediodía, pero no para de llamar a su madre a casa y no le responde. Evelyn Mitchell, capitana de la policía de Atlanta ya retirada nunca sale de casa sin decirle a alguien adónde va, especialmente si está cuidando de su nieto. La preocupación de Faith se intensifica después de horas de llamadas sin respuesta…
Cuando se presenta en casa de Evelyn, Faith encuentra la huella sangrienta de una mano en la puerta de la entrada, y la casa hecha un caos. Todo indica que su madre ha sido secuestrada. Encontrarla se convertirá en tarea prioritaria de Amanda Wagner, la subdirectora del departamento de policía y amiga íntima de Evelyn. El compañero de Faith, Will Trent, la ayudará con una investigación paralela. Las sospechas apuntan a los antiguos compañeros de Evelyn en la brigada de narcóticos, todos ellos condenados por corrupción por quedarse con parte del dinero decomisado al que tenían acceso; sin embargo, una nueva pista proporcionada por una vecina chismosa desvía la investigación hacia un caballero que visitaba a Evelyn varias veces a la semana.
Mientras la investigación avanza, el romance entre la doctora Linton y Will Trent se afianza; Faith intenta mantener la compostura en la terrible situación que le ha tocado vivir; Amanda y Will persiguen todos los indicios, incluso aquellos que les lleven a los bajos fondos del estado de Georgia. La prioridad es encontrar a Evelyn y detener a sus secuestradores antes de que sea demasiado tarde…

Pecado original (fragmento)

Capítulo Uno
Faith Mitchell vertió todo el contenido de su bolso sobre el asiento del pasajero de su Mini, intentando encontrar algo para comer. Salvo un trozo sucio de chicle y un cacahuete de origen un tanto dudoso, no había nada que fuese ni remotamente comestible. Se acordó de la caja de barritas nutritivas que tenía en la despensa de su cocina, y su estómago emitió un ruido parecido al de una bisagra oxidada.
Se suponía que el seminario de informática al que había asistido esa mañana duraría tres horas, pero se había prolongado hasta las cuatro y media gracias a los gilipollas de la primera fila que no pararon de hacer preguntas estúpidas. La Oficina de Investigación de Georgia, el GBI, organizaba cursos para sus agentes con mayor frecuencia que cualquier otra agencia de la región. Constantemente los machacaban con datos y estadísticas sobre las actividades criminales, y tenían que estar al tanto de los últimos avances tecnológicos.

MADRID, 1987


Me gustaría saber quien ha dicho a los autores y editores que a los lectores nos gusta leer novelas que no son novelas....
Seguramente David Trueba escribe bien y, además, tiene ideas para escribir una novela, pero editar un guión de una película como novela, me parece una engañifa propia de gente sin talento ni fundamento.
Banal, pretencioso y artificial, os lo digo yo que he vivido los 80, no tan joven como la protagonista (pero casi) y, por supuesto, no tan vieja, pesada, frustrada y patética como el protagonista. Total un guión con pretensiones que ha conseguido que, por supuesto, no piense ni en ver la película, ni en leer más "novelas" de David Trueba.

Sinopsis (Ed. Anagrama)
En un caluroso fin de semana de julio de 1987, con la ciudad de Madrid desierta, Miguel, un veterano articulista, temido y respetado, se cita en un café con Ángela, una joven estudiante de primer curso de Periodismo. Obligados a convivir en una jornada muy particular, ambos tratarán de sobrevivir al roce del deseo. Como dos trenes, sus personalidades chocan frontalmente, en la España de 1987, un país que terminaba de cerrar el capítulo negro del franquismo y se instalaba plácidamente en la democracia. Quizá demasiado plácidamente, mientras los valores y las jerarquías tradicionales aún disfrutaban de un poder sólido.
Anagrama presenta Madrid 1987, la última película del escritor y realizador David Trueba, definida por la crítica norteamericana tras su paso por el festival de cine de Sundance como un cruce entre el cine intimista y la literatura de Philip Roth, acompañada de su guión, que es, también, otra magnífica obra literaria de Trueba.

Madrid, 1987 (fragmento)

Una radio lejana repasa las noticias del día.
Corresponden al 18 de julio de 1987. Sábado.
Y seguramente hablan del aún cercano atentado de Hipercor o del caso Irán-Contra.
De Reagan y Margaret Thatcher, de las primeras investigaciones sobre los GAL.
También de la crisis en los países del Este y, como siempre, de la inflación.
Y de Telefónica, aún estatal, con sus cincuenta mil millones de pesetas de beneficio anual.
Un café al mediodía en el centro de la ciudad.

Hay unos enormes ventanales que dan a una calle concurrida.
Hay alguna mesa ocupada, pero no es, ni de lejos, la hora punta.
En una mesa del fondo, aislado de todos y de todo, está MIGUEL.
Tiene sesenta años, melena algo anacrónica y patillas.
Con el cigarrillo en la comisura de la boca.
El pelo mojado hacia atrás, negro, con algunas canas.
Unas gafas cuadradas de pasta negras de alta graduación, que le esconden los ojos.
Pero no restan a la mirada la intensidad de un entomólogo entre el humo de cigarro.
Una mirada irónica, distante, de maldito con sorna.
No es un hombre guapo, pero ser famoso le hace interesante.
Escribe a máquina sobre la mesa del café. Lo hace con dos dedos pero a enorme velocidad.
Escribe un artículo para el periódico.
De vez en cuando, raramente, relee algo escrito y se separa el cigarrillo de la boca.
Tiene el ABC y El País posados en la mesa al alcance de la mano.
Un camarero aceitoso, sin preguntar, le retira la taza de café ya consumida.
Y le pone otro café idéntico, solo y corto, y un vaso bajo de whisky.


PALABRAS ROTAS


Cuarta entrega de la serie de novelas protagonizadas por Will Trent, agente especial del DIG, la policía estatal de Georgia.

Una serie que puede dar mucho juego....un trío de protagonistas que no solo tienen problemas, sino muchos problemas....
Violencia controlada, lo cual es de agradecer ya que la serie anterior de Slaughter llegó a ser un "poco repugnante" y sobre todo acción trepidante y entretenimiento garantizado.
Sara Linton, Will Trent y Faith Mitchell, atacan de nuevo y esto no quedará así....¡¡¡
En el siguiente enlace información sobre la novela:
http://www.rocaeditorial.com/es/catalogo/sellos/roca-editorial-5/palabras-rotas-1521.htm

Sinopsis (Ed. Roca)
Cuando aparece el cuerpo de una joven bajo las aguas congeladas del lago Grant, una nota que se encuentra bajo una piedra en las proximidades apunta a que se trata de un suicidio. Pero en muy poco tiempo, esta hipótesis da paso a otra mucho más posible: un brutal asesinato a sangre fría.
La médico del condado de Grant, Sara Linton, se encuentra envuelta en el caso casi sin quererlo. El principal sospechoso pide con desesperación reunirse con ella, pero cuando Sara llega a la comisaría de policía, se encuentra con que el sospechoso está muerto en su celda, y las palabras «no he sido yo» están escritas en las paredes. Poco después, el agente especial Will Trent regresa apresuradamente de sus vacaciones para investigar el caso tras la llamada de Sara, pero no contaba con topar con una pared de silencio. Y la única persona que podría ayudar a aclarar lo que realmente sucedió está muerta.

Palabras rotas (fragmento)

Prólogo
Allison Spooner quería marcharse de la ciudad durante las vacaciones, pero no sabía adónde ir. Por otro lado, no tenía razón alguna para quedarse, pero, eso sí, al menos resultaba más barato. Al menos disponía de un techo donde cobijarse. Al menos la calefacción de su diminuto y destartalado apartamento funcionaba de vez en cuando. Al menos en el trabajo podía tomar una comida caliente. Al menos, al menos, al menos… ¿Por qué su vida consistía siempre en conformarse con lo menos? ¿Cuándo tendría de más?
El viento arreciaba con fuerza. Apretó los puños dentro de los bolsillos de su fina chaqueta. No es que lloviese con mucha intensidad, pero la bruma provocaba una humedad fría, como si se adentrase en el hocico de un perro. El aire frío que provenía del lago Grant lo hacía todo aún más desagradable. Cada vez que la brisa se levantaba sentía como si una cuchilla diminuta y roma le atravesase la piel. Se suponía que aquello era el sur de Georgia, no el jodido Polo Sur.
Mientras caminaba a duras penas por la orilla bordeada de árboles parecía como si cada ola que lamía el barro hiciese descender la temperatura un grado más. Se preguntó si los zapatos tan finos que llevaba la protegerían lo suficiente como para que no se le congelasen los dedos.