viernes, 22 de diciembre de 2017

TEA ROOMS. Mujeres obreras


Luisa Carnés fue una escritora española de la generación del 27, digo fue porque murió prematuramente en el exilio mexicano, olvidada por todos en el país que la vio nacer.
Me he traído esta novela de la Biblioteca, reeditada por Ed. Hoja de Lata y he leído una novela social que podría transcurrir perfectamente en la España actual: salarios precarios, corrupción, robo, desigualdad....., si exceptuamos la influencia religiosa, los años 30 del Madrid obrero podrían trasladarse intactos a esta segunda década del siglo XXI.
Luisa Carnés cuenta su época con una fuerza y una sinceridad que conquista.

Sinopsis (Ed. Hoja de Lata)
Corren los años treinta en Madrid y las trabajadoras de un distinguido salón de té cercano a la Puerta del sol ajustan sus uniformes para comenzar una nueva jornada laboral. Antonia es la más veterana, aunque nunca nadie le ha reconocido su competencia. A la pequeña Marta la miseria la ha vuelto decidida y osada. Paca, treintañera y beata, pasa sus horas de ocio en un convento y Laurita, la ahijada del dueño, se tiene por una «chica moderna». El jornal de tres pesetas no les da para vivir a ninguna de ellas, pero todas callan, no vaya a ser… Están acostumbradas a callar: frente al jefe, frente al marido, frente al padre. A callar sus deseos con la adormidera de la religión. Aguantan prolongadas jornadas laborales por un salario de hambre: «diez horas, cansancio, tres pesetas». Únicamente Matilde tiene ese «espíritu revoltoso» que tanto reclama la narradora cuando consigue colarse entre la cháchara jovial de las chicas.
Autora invisibilizada de la generación del 27, Luisa Carnés escribió esta portentosa novela social rompiendo los esquemas narrativos de la época. Frente al buenismo y compostura formal exigidos por el canon, Carnés reproduce de un modo verosímil los diálogos que se podrían dar entre las dependientas del salón de té, nos transmite la crudeza de sus pensamientos y la falta de perspectivas de sus vidas. Una más que necesaria recuperación histórica de una autora imprescindible para conocer la España previa a la guerra civil.

Tea Rooms. Mujeres obreras (fragmento)

"En este escondrijo cambian las muchachas sus vestidos de calle por los uniformes de labor. En estos clavos cuelgan las empleadas cada mañana su personalidad para recogerla cinco horas después.
(…)
Pero también hay mujeres que se independizan, que viven de su propio esfuerzo, sin necesidad de aguantar tíos. Pero eso es en otro país, donde la cultura ha dado un paso de gigante; donde la mujer ha cesado de ser un instrumento de placer físico y de explotación; donde las universidades abren sus puertas a las obreras y a las campesinas más humildes. Aquí, las únicas que podrían emanciparse por la cultura son las hijas de los grandes propietarios; precisamente las únicas mujeres a quienes no les preocupa en absoluto la emancipación, porque nunca conocieron los zapatos torcidos ni el hambre. "





EL SILENCIO DE LA CIUDAD BLANCA


Primera entrega de la serie de novelas protagonizadas por el Inspector de policía Unai López de Ayala, apodado Kraken, que trabaja en Vitoria (España)

Termino esta larguísima novela que me ha mantenido entretenida y aburrida, a partes iguales, durante la última semana.
Intuyo desde el principio la intención de la escritora de "construir" una historia detectivesca "a la nórdica": mucha descripción de personajes, vida personal, lugares emblemáticos, el pasado que vuelve, familias marcadas, policías "carismáticos"...., nada que objetar hasta ahí........, peeeeero una buena novela detectivesca (el género negro le queda muy lejos) ha de tener algo más, ritmo, tensión, personajes que impacten y lleven al lector de la mano hacia un final inolvidable.
De todo eso carece El silencio de la ciudad blanca, comienza con una trampa (no digo mas) y continúa llenando páginas hasta extenuar al lector con datos y más datos prescindibles, una desea que se resuelva ya, para terminar con la novela, aunque el asesino en serie que asola Vitoria quede impune por los siglos de los siglos.
Mención aparte merece el estilo narrativo de la autora, sencillo lo califican en alguna reseña que he leído, yo lo calificaría, en algunos pasajes, ñoño y relamido:
"....tenia demencias cruzadas..." pág.. 166
".....con sus mallas blancas y sus zancadas de pronadora...." pág.. 167
"....calzándose los slip blancos en el asiento del copiloto...." pág.. 176
Podría seguir con frases del estilo pero seria reiterativo; renuncio a describir los encuentros sexuales del protagonista consigo mismo y otras personas, renuncio también a reproducir diálogos que serian hilarantes y jamás tendrían lugar en el mundo real y renuncio a leer nada más de esta autora.
Si puedo decir algo bueno, es que Vitoria es menos desconocida para mí, creo....!!!

Sinopsis (Ed. Planeta)
«Una ciudad aterrorizada por el regreso de unos asesinatos rituales. Un experto en perfiles criminales que esconde una tragedia. Un thriller hipnótico cuyas claves descansan en unos misteriosos restos arqueológicos»
Tasio Ortiz de Zárate, el brillante arqueólogo condenado por los extraños asesinatos que aterrorizaron la tranquila ciudad de Vitoria hace dos décadas, está a punto de salir de prisión en su primer permiso cuando los crímenes se reanudan de nuevo: en la emblemática Catedral Vieja de Vitoria, una pareja de veinte años aparece desnuda y muerta por picaduras de abeja en la garganta. Poco después, otra pareja de veinticinco años es asesinada en la Casa del Cordón, un conocido edificio medieval.
El joven inspector Unai López de Ayala —alias Kraken—, experto en perfiles criminales, está obsesionado con prevenir los crímenes antes de que ocurran, una tragedia personal aún fresca no le permite encarar el caso como uno más. Sus métodos poco ortodoxos enervan a su jefa, Alba, la subcomisaria con la que mantiene una ambigua relación marcada por los crímenes… El tiempo corre en su contra y la amenaza acecha en cualquier rincón de la ciudad. ¿Quién será el siguiente?
Una novela negra absorbente que se mueve entre la mitología y las leyendas de Álava, la arqueología, los secretos de familia y la psicología criminal. Un noir elegante y complejo que demuestra cómo los errores del pasado pueden influir en el presente.

El silencio de la ciudad blanca (fragmento)

PRÓLOGOVitoria, agosto de 2016
Las cámaras de televisión se obsesionaron con acosar a mi cuadrilla. Necesitaban un titular y estaban convencidos de que mis amigos podrían dárselo. Los siguieron por toda Vitoria desde que saltó la noticia de que el asesino me había disparado: a partir de aquel momento, no hubo descanso para nadie.
A primera hora, apostados en las entradas de sus portales. Y por las tardes, cuando quedaban en el Saburdi de la calle Dato, a tomar unos pinchos en silencio. Pero aquellos días nadie tenía ganas de hablar, y la presencia impenitente de los reporteros no ayudaba.
—Sentimos lo que le ha ocurrido al inspector Ayala. ¿Vais a ir a la concentración de esta tarde? —les preguntó un periodista, mientras agitaba un periódico frente a ellos con la noticia en primera plana y mi imagen ocupando casi más que el titular.
El tío grandote y moreno que intentaba sin éxito ocultar su rostro de las cámaras era yo, días antes del disparo.
Mis amigas bajaron la cabeza, mis amigos dieron la espalda al cámara.
—Estamos en shock —se arrancó por fin Jota, apurando su vino tinto—. La vida no es justa, no es justa.
Tal vez creyó que sería suficiente para que los dejaran en paz, pero entonces los reporteros vieron a Germán, mi hermano, imposible de ignorar con el metro veinte de estatura con que le castigaba su enanismo. Germán intentó escabullirse hacia los aseos. El reportero, con el ojo ya curtido en mil exclusivas, avisó a los cámaras en cuanto lo reconoció.

ASÍ ES COMO SE MATA


Primera entrega de la serie de novelas protagonizadas por Enrico Mancini, comisario de policía en Roma (Italia).

Roma lluviosa, sucia, más negra que nunca de la mano de un novelista de apellido con reminiscencias clásicas.
Un nuevo comisario viudo, triste, agobiado, casi dimisionario y....., ¿habrá algo que descubrir sobre Enrico Mancini? o nos lo habrán revelado todo en esta primera novela, una nueva oportunidad tendrá, sin duda.
Es evidente que para sorprender a lectores de novela negra se necesita mucho más que un policía atormentado, un equipo diverso y un asesino en serie, Zilahy escribe bien, no lo niego, peeeero........, la trama es tan previsible desde las primeras páginas que una pierde un poco el interés.
Debut un poco fallido, pero tendrá una segunda oportunidad.

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
«Un comisario que parece sacado de la serie de televisión Criminal Minds. Una novela tan inquietante que produce un inmediato efecto fan club.»Marta Cervino, Marie Claire
« La justicia solo triunfará cuando el arado trace su último surco. Usted no me conoce. Nadie me conoce. Cómo me llamo no tiene importancia. Solo soy una sombra.»
Roma, septiembre de 2008. La ciudad sufre una terrible ola de mal tiempo. Parece que toda el agua que cae torrencialmente del cielo pretende lavar el mal que hay sobre la superficie. Lejos de la gran ciudad turística y religiosa, en una Roma olvidada, aparecen los cadáveres de las víctimas de un asesino en serie.
Solo hay un hombre capaz de liderar esa investigación tan delicada: el comisario Enrico Mancini, el único policía que ha asistido a los cursos sobre perfiles criminales en la central del FBI, en Quantico.
Mancini atraviesa el peor momento de su vida, pero aun así es obligado a atrapar a «la Sombra», asesino atípico y esquivo que llena los cuerpos de sus víctimas con pistas, no para satisfacer sus instintos homicidas sino para conseguir un propósito lúcidamente maquiavélico. Todo en él tiene un significado, todo es un símbolo, y necesita una última pieza para terminar su rompecabezas: el propio Enrico Mancini.

Así es como se mata (fragmento)

El primer sentido que lo abandona, en cuanto la llamarada hirviente lo embiste como un gancho, es la vista. Las pestañas se evaporan al instante y los globos oculares palpitan. Se tambalea. Las paredes remolinean en un sofocante torbellino. Las llamas atacan el algodón que se adhiere de inmediato a la piel. Hieren la carne, desgarran los músculos, despellejan los nervios. Luego, uno tras otro, los demás sentidos se desmigajan. Un silbido agudo le inunda los tímpanos y todo parece oscilar. Es incapaz de inhalar oxígeno porque las llamas que se elevan de la ropa invaden sus fosas nasales y serpentean por el conducto nasal, subiendo hasta el cerebro. Abre la boca para respirar, para gritar, pero el fuego le cuece el paladar, le abrasa la lengua. Se le desliza dentro.
Inesperado como una gélida ráfaga de viento, algo lo agarra y lo empuja lejos. Algo que lo envuelve rápido como en el capullo de una enorme viuda negra. «¿Será este el último abrazo del fuego?», se pregunta un momento antes de desplomarse al suelo.
El impacto es duro, sucio, cenagoso. Cae, rueda, impulsado por esa fuerza invisible. La humedad empapa el calor de la piel y es como si se convirtiera en una cáscara de arcilla. Está sellado en esa crisálida de barro seco y percibe los primeros temblores, los espasmos de la vida que transmigra.
Después todo se apaga.
Se despierta reclinado sobre la cadera, abre lo que le queda del párpado izquierdo y desplaza apenas el iris del ojo izquierdo hacia arriba. Más allá del marco de la puerta, la pantalla reza las 07:13.
Respira con esfuerzo, esboza pequeños movimientos, minúsculos sorbos de aire. La piel de los brazos, de la cara, del pecho, le cruje como si fuera de cartón piedra. Se le escapa un golpe de tos y se le desencajan los ojos en el espasmo de dolor. Allí, a su lado, en el barro resecado por las llamas, hay otra cara quemada.
¿Estará soñando?

SOBRE GRACE


Es indudable que la prosa de Doerr es notable, sencilla y culta, sensible y hermosa; leer a Doerr es un auténtico placer.
Pero para que una novela sea buena hace falta algo más que una redacción exquisita, hace falta un argumento consistente y coherente, un ritmo narrativo adecuado y una historia que, por increíble que pudiera parecer, se haga realidad a los ojos del lector.
De todo esto carece S...obre Grace, primera novela del autor, que acabo de terminar.
Sobre Grace (que para ser coherente debería titularse Sobre David) es la historia de una huida permanente, la huida sin fin de un hombre cuyos problemas van mucho más allá de sus sueños premonitorios aunque estos sean el leit-motiv de toda la narración. Se trata de una historia que comienza bien y se va perdiendo a medida que avanza, se pierde en un mar de detalles sin importancia y obvia, sin embargo, la construcción de los personajes con los que no se llega a conectar en ningún momento.
Me ha resultado bastante tediosa, a pesar de lo bien que escribe el autor y, sobre todo, me ha resultado imposible "engancharme" a una historia cuyo protagonista no despierta en mí la más mínima empatía (ni él, ni el resto de personajes).
Parece remontar hacia el final, pero es un espejismo y las más de 400 páginas de la novela rematan en decepción.
Si alguien espera algo parecido a La luz que no puedes ver, no debería ni intentarlo.

Sinopsis (Ed. SUMA)
Desde su niñez en Alaska, David Winkler se ha sentido atraído por los cambios del tiempo y ha vivido obsesionado por la nieve. Además, David tiene un don: a veces puede ver cosas antes de que ocurran. Sus premoniciones le permiten saber que un vecino será atropellado por el autobús o que se enamorará de una mujer en un supermercado. Pero cuando David sueña que su hija se va a ahogar en una inundación sin que él pueda salvarla, toda su vida se desmorona. Huir de su familia, de su casa y de su propio futuro parece el único modo de negar el sueño que lo atormenta.
Solo, sin medios y sin saber si su hija ha sobrevivido o si su mujer ha conseguido perdonarlo, David tendrá que comenzar una nueva vida. Hasta el día en que deba enfrentarse a la decisión de buscar a las personas que dejó atrás.
Haciendo uso de una prosa luminosa, Doerr ha creado una inolvidable novela sobre el poder del amor y la belleza de la naturaleza, y sobre los pequeños milagros que transforman nuestras vidas.

Sobre Grace (fragmento)

1

Cruzó el vestíbulo y se detuvo junto a una ventana a observar cómo un hombre con dos bastones luminosos color naranja dirigía un avión a su puerta de embarque. Sobre el asfalto el cielo era impoluto, de ese azul tropical implacable al que no había llegado a acostumbrarse. En el horizonte se habían amontonado nubes: cumulus congestus, señal de alguna clase de perturbación sobre el mar.
El delgado marco de un detector de metal aguardaba su cola de turistas. En la sala de embarque, ron del duty free, aves del paraíso envueltas en celofán, collares hechos de conchas. Del bolsillo de la camisa se sacó una libreta y un bolígrafo.
«El cerebro humano», escribió, «es en un setenta y cinco por ciento agua. Nuestras células son poco más que odres para transportar agua. Cuando morimos se derrama de nuestro interior por el suelo y el aire y en los estómagos de animales y se convierte en el contenido de otra cosa. Las propiedades del agua líquida son las siguientes: conserva la temperatura durante más tiempo que el aire; es adherente y elástica; está en perpetuo movimiento. Estos son los principios de la hidrología; estas son las cosas que uno debería saber si quiere conocerse a sí mismo».




LA VIUDA


Pues ya he terminado La Viuda, una novela que empecé con ciertas expectativas y....., ha resultado frustrante.
La narración es sencilla, tanto que resulta un tanto simplona. Ninguno de los personajes "engancha" porque su desarrollo es plano y no destacan en nada.
Tres voces narrativas, un policía, una periodista y la viuda...., confuso.
Dos hilos temporales que se suceden sin ton ni son...., confusión total.
Un secuestro, una investigación, un juicio, un reportaje y una viuda....., todo previsible a más no poder.
Debo decir que la novela intenta abarcar mucho y aprieta muy poco, tiene pretensiones de thriller psicológico pero carece de ritmo para thriller y de profundidad para psicológico.
Sólo puedo decir que me ha aburrido.

Sinopsis (Ed. Planeta)
Hay secretos que cambian tu vida. ¿Callar o mentir? Tú eligesInquietante. Compulsivo. Real. El libro del año.
Si él hubiera hecho algo horrible, ella lo sabría. ¿O no?
Todos sabemos quién es él: el hombre que vimos en la portada de todos los periódicos acusado de un crimen terrible. Pero, ¿qué sabemos realmente de ella, de quien le sujeta el brazo en la escalera del juzgado, de la esposa que está a su lado?
El marido de Jean Taylor fue acusado y absuelto de un crimen terrible hace años. Cuando él fallece de forma repentina, Jean, la esposa perfecta que siempre le ha apoyado y creído en su inocencia, se convierte en la única persona que conoce la verdad. Pero ¿qué implicaciones tendría aceptar esa verdad? ¿Hasta dónde está dispuesta a llegar para que su vida siga teniendo sentido? Ahora que Jean puede ser ella misma, hay una decisión que tomar: ¿callar, mentir o actuar?

La viuda (fragmento)

CAPÍTULO 1

Miércoles, 9 de junio de 2010
La viuda
Puedo oír el ruido que hace la mujer al recorrer el sendero. Sus pasos son pesados y lleva zapatos de tacón. Ya casi ha llegado a la puerta, y vacila y se aparta el pelo de la cara. Va bien vestida. Chaqueta de botones grandes, un respetable vestido debajo y las gafas sobre la cabeza. No es un testigo de Jehová ni un miembro del Partido Laborista. Debe de ser periodista, pero no parece la típica reportera. Hoy ya se han presentado dos (cuatro esta semana, y sólo estamos a miércoles). Apuesto a que me dice: «Lamento molestarla en unos momentos tan difíciles...». Todos lo hacen y ponen esa estúpida cara. Como si les importara.
Esperaré a ver si llama al timbre dos veces. El hombre de esta mañana no lo ha hecho. A algunos les aburre mortalmente intentarlo. En cuanto despegan el dedo del timbre, recorren de vuelta el sendero tan rápido como pueden, se meten en el coche y se marchan. Ya pueden decirles a sus jefes que han llamado a la puerta pero que ella no estaba en casa. Patético.
La mujer llama dos veces. Luego golpea la puerta con fuerza en plan pom-pom-pom-pom-pom-pom. Como un policía. Me ve mirando por el hueco lateral de los visillos y sonríe de oreja a oreja. Una sonrisa muy hollywoodiense, como solía decir mi madre. Luego vuelve a llamar.

jueves, 21 de diciembre de 2017

EL SÉPTIMO NIÑO


Más de 700 páginas narran la historia del orfanato Kungsland y, quizás, deberían ser unas cuantas menos....
La novela es entretenida, aunque un tanto repetitiva y narra la historia de las adopciones realizadas en Dinamarca durante los años 60, una trama de mentiras y engaños políticos que marcan a toda una generación danesa.
Sería una buenísima novela si el autor dejase algo a la imaginación del lector, pero sus exhaustivas descripciones resultan un tanto aburridas, desvelando tanto que a mitad de obra, el misterio está prácticamente resuelto.
Larga¡

Sinopsis (Ed. Maeva)Un orfanato, siete niños, una verdad silenciada
El séptimo niño es uno de los thrillers daneses más potentes de los últimos años. Una trama arrolladora con tintes periodísticos que se basa en un suceso real: los orfanatos donde eran abandonados los niños no deseados de la clase alta danesa.

El orfanato de Kongslund, en el norte de Copenhague, parece ser el hogar infantil perfecto, una institución histórica hecha con las mejores intenciones y situada junto al mar... pero en septiembre de 2011, muy cerca de ahí, aparece el cadáver de una mujer sin identificar: el cuerpo está boca abajo y rodeado de una serie de objetos extraños, entre ellos una fotografía del orfanato. Las pocas pistas sobre el asesinato hacen que el caso quede en la sombra. En 2008, seis personas que vivieron en la llamada Sala de los Elefantes de ese orfanato a principios de los años sesenta reciben el mismo anónimo en el que se alude a un gran secreto relacionado con las altas esferas del país. ¿Qué es lo que se oculta en el pasado de Kongslund? ¿Son ciertos los rumores de que esa institución se utilizó para ocultar los embarazos de la clase alta en una Dinamarca que prohibía el aborto? El periodista Knud Tåsing, una de las seis personas que ha recibido el anónimo, será el encargado de investigar para desvelar el verdadero origen de los «huérfanos» de Kongslund, quién ha enviado esos anónimos y descubrir al asesino de la mujer que apareció muerta en la playa.

El séptimo niño (fragmento)

Prólogo

LA MUJER DE LA PLAYA
Septiembre de 2001
Encontraron a la mujer en la arena, a mitad de camino entre el hotel Skodsborg y el parque de Bellevue, temprano, la mañana del 11 de septiembre de 2001.
Faltaban unas horas para que el mundo se transformase de modo decisivo, cosa que casi todos los habitantes del globo, de muchos países diferentes, vivieron. Aquella extraordinaria coincidencia tuvo una importancia determinante para el desarrollo posterior del extraño caso, y solo puede entenderse como si al Destino le pareciera una broma situar en el mismo día dos sucesos tan inusuales.
El más insignificante de los hechos –el danés– pasó al olvido más o menos enseguida, pese a que durante las primeras horas la Policía lo consideró con la mayor seriedad, y en los primeros informes se describió con todo detalle.
Dieron la alarma a las 6.32. La fallecida yacía casi junto a la orilla, con el rostro apretado contra la arena gris sucia, como si hubiera tratado de devorar la playa favorita de los habitantes de Copenhague de un único mordisco voraz. Tenía los brazos doblados hacia atrás y las manos abiertas, y en sus palmas se veían pequeños dibujos de arena, lo que por un momento hizo pensar a los investigadores del homicidio en un asesinato ritual por algún motivo perverso. Pero también podría deberse, como sostuvo alguien, a que el viento del este hubiera levantado un torbellino y la hubiera depositado sobre el cadáver antes de que el sol saliera por el estrecho de Øresund.
Fue alguien de los elegantes palacetes del cercano barrio de Tårbæk, que había sacado el perro a pasear, quien dio la voz de alarma, espantado. Para los investigadores de la Policía no cabía la menor duda de que la mujer de la playa había muerto en el mismo segundo en que cayó hacia delante. Tenía en la frente un cráter con forma de cono, y el agujero continuaba un buen trecho en el cráneo, y después en el cerebro. Desde allí, la sangre había resbalado por su cabello, mojando la arena junto a ambas sienes.

LAS BUENAS INTENCIONES


Buscando una novela actual, del mismo título, he topado con esta joya del gran Max Aub.
Las buenas intenciones tiene un aroma galdosiano que nos lleva a la España de los años 20-30 y relata con maestría los mejores y peores estereotipos de un país atascado entre la iglesia y la monarquía, la modernidad y las convenciones, la verdad y la mentira....
Apenas 200 páginas para dibujar un fresco magnífico de gran altura literaria. Un clásico¡¡¡

Sinopsis (Ed. Alianza Editorial)
"Las buenas intenciones", ambientada entre 1924 y 1939, es un relato del Madrid popular bajo la mirada del protagonista, Agustín Alfaro, descendiente de una familia segoviana. Además de ser un recorrido por las gentes de la capital española, la novela nos pasea por Zaragoza y Barcelona a través de un realismo sin adornos. Con un particular sentido del humor, Max Aub se muestra firme ante una burguesía timorata que, según el autor, era la culpable de los males que padecía España a comienzos del siglo XX.

Las buenas intenciones (fragmento)
"Don Marcelino Guzmán era hombre de sesenta años y llevaba cincuenta y dos entre relojes y casi tantos con su cristal de aumento pegado al ojo derecho en busca de espirales, volantes, escapes, áncoras o disparadores rotos o mal equilibrados; no le temblaba la mano, la pinza entre los dedos, componiendo desde el fino Longines al pétreo Roskoff. Pero al ver las cosas de tan cerca, con lupa o cuenta hilos, había acabado por darle un concepto muy meticuloso de las cosas. Lo veía todo con mayor detenimiento que la generalidad de los seres humanos. De cómo el fijarse en cualquier detalle lo había llevado al colmo de la avaricia es cosa fácil de comprender. Su concepto microscópico del mundo le empujó, desde temprana edad, a economizar lo más mínimo.
Hacía cerca de treinta años que estaba establecido en un portal de la calle de Atocha. Allí seguía, a pesar de que sus ahorros podían haberle permitido comprar en traspaso, o abrir una relojería importante en cualquier barrio si no más comercial más elegante. Pero, por lo visto, su anteojera le impedía ver más allá del reducidísimo campo que se le abría, eso sí, sin faltar detalle.
Vivía en el último piso de la misma casa, con su mujer, que fue criada de un general muy nombrado a principios de siglo y que ocupó, hasta el día de su muerte, el año 10, el principal de la casa. Marcelino la había estudiado muy por lo menudo, charla que te charla, sin perder la finalidad que le llevaba a tanto parloteo, ni el tiempo. María de los Ángeles era de Villarrobledo, hija de unos campesinos pobres y como tales de familia numerosa. Muy seria, un tanto redicha, más bien fea y ferozmente apegada al ahorro, lo que les había unido desde el principio. La verdad es que no se casaron hasta que Angelita estuvo en edad de ir a la escuela. "