martes, 21 de noviembre de 2017

NO TE MUEVAS


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 22 de Octubre de 2014.
Diga lo que diga, no se escribir bonito como para hacerle honor a esta novela.
Es desgarradora, poética en el sentido en que uno quisiera subrayar cada palabra, aprender todas sus páginas de memoria. Y aprehenderlas.
Hacer que le pasen algunas cosas o no dejar que le pasen nunca.
El cristal desde el que mira el mundo esta escritora me llena de admiración, de ternura, de asombro.
Ganas de ir a darle un abrazo y decirle gracias, eso me dan.
Pero no me hagáis caso, recordad que soy una exagerada.


RESEÑADO por Rosi Torres Marino para LIBROS,  el 1 de Diciembre de 2014.
Hace unos días perdida en la biblioteca sin encontrar un título que me llenara los ojos reparé en "No te muevas" y como pareció una señal y además me había gustado "La palabra mas hermosa"...se vino conmigo. No diré mucho sobre él, corro el riesgo de desvelar demasiado. Me quedo con ese personaje maravilloso que sí sabia quien era, que le deparaba la vida... con su valentía, con su honestidad. Creo que Italia es ya una de mis protagonistas femeninas mas queridas de la literatura.

Sinopsis (Ed. quinteto)
Una estremecedora mirada a la mala conciencia de un hombre acomodado. En un hospital italiano, Timoteo, un prestigioso cirujano, vela a su hija Angela, una muchacha de 15 años que se encuentra en coma tras un accidente de moto. Embargado por el dolor y los remordimientos, Timoteo busca refugio en las palabras y emprende un desgarrador monólogo en el que se enfrenta a los fantasmas de un oscuro pasado que le sigue avergonzando. No te muevas, el deslumbrante debut de Margaret Mazzantini, ha estado durante más de dos años en las listas de libros más vendidos en Italia y ha atrapado a miles de lectores transalpinos con su lúcida visión de las miserias de la doble moral.Premio Strega 2002.

No te muevas (fragmento)

"La operación había terminado. Y yo había vuelto a levantar la mirada: en su interior tenía el color de la desconfianza, del desprecio. Junto a mi segundo ayudante, un joven residente con una bata demasiado grande me miraba absorto. No me había dado cuenta de que estuviese allí, no se había acercado hasta ese momento. Tenía los ojos de quien ha ejercido una voluntad demasiado fuerte sobre sí mismo. Quizá sólo hubiera intentado mantenerse en pie. Quizá tuviera miedo de la sangre. Idiota.
Tiré los guantes, salí del quirófano y entré en el vestuario. Me senté en el banco. La ventana ofrecía la vista habitual del pabellón de al lado, los cristales bajos de las escaleras interiores, por donde pasan los pies de los que suben y de los que bajan. Sólo se ven los escalones y las piernas, las caras quedan tapadas por la pared. Primero pasaron unos pantalones de hombre, después las piernas blancas de una enfermera. Recuerdo que pensé que nada puede salvarnos de nosotros mismos y que la indulgencia es un fruto que cae a tierra ya podrido. Di rienda suelta a todos aquellos pensamientos indecentes y después me sentí tan inútil como un francotirador muerto.
El quirófano estaba abierto y en desorden. En el pasillo, un hombre en camisón se dirigía al baño con un rollo de papel higiénico en la mano. Bajé un poco la cabeza para asomarme por la ventana de guillotina y saludar a las enfermeras, a los ayudantes. Bajaba por el ascensor y dentro de mí sólo había aquello contra lo que había luchado. En la planta baja, junto a aquella puerta ya no había nadie, y por dentro sólo era una sala como todas las demás, una sala de espera para pacientes de diálisis. Dos mujeres con la cara amarilla esperaban su turno sentadas. No, Angela, ella no entró nunca en aquella sala, ni en ninguna otra. Se quedó apoyada en la pared, debajo del póster del mono. No llegó a levantar la cara. "


EL PRIMER CASO DE MONTALBANO


Undécima entrega de la serie de novelas protagonizadas por Salvo Montalbano, comisario en Vigatá, Sicilia.

RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 21 de Octubre de 2014.
Tres relatos sobre Montalbano, uno de ellos para dar forma al comisario que ya conocemos. De donde viene, por qué vive donde vive y come donde come. Imprescindible para rematar al personaje.
Tengo la sensación que Camilleri se mueve mejor en las distancias cortas que en las medias, que es más cuentista que novelista. Pero eso son manías mías.
Me sigue gustando pero en pequeñas dosis.

Sinopsis (Ed. Salamandra)
Reflejo de tres épocas muy diferentes en la vida del comisario Salvo Montalbano, los relatos que componen esta nueva entrega del famoso personaje creado por Andrea Camilleri —uno de los autores más leídos de Italia en los últimos años— ofrecen una cara desconocida de Montalbano que deleitará a los iniciados y sorprenderá a aquellos lectores que se acerquen por primera vez al irresistible universo del seductor sabueso siciliano.
Si el primer relato nos presenta un caso insólito en el que la interpretación de la Cábala resulta decisiva para esclarecer la muerte violenta de una serie de animales de todo tipo y tamaño, el tercero, un extraño secuestro exprés que no termina de convencer a Montalbano, nos plantea la nueva realidad de la mafia, moderna y actualizada, que se enfrenta a unos policías obligados a salir a fumar a la calle para cumplir con la ley antitabaco.
Y entre ambos, el relato que da título al libro, un viaje al pasado para conocer al joven subcomisario Montalbano mientras espera con ansiedad un próximo ascenso. Harto de un paisaje de montaña acartonado, Salvo sueña con una casita a la orilla del mar, con el olor del salitre al amanecer y el rumor de las olas que rompen… Cuando su sueño se hace realidad, el flamante comisario se lanza a la carretera, loco de alegría, deseoso de llegar a Vigàta y conocer a sus nuevos compañeros. Y como presagio de lo que será su dilatada carrera, ya desde el primer caso se le plantea el dilema entre seguir sus corazonadas o atenerse estrictamente a las normas que marca la ley.

El primer caso de Montalbano (fragmento)

Siete lunes
1
Los dos hombres que se resguardaban bajo la marquesina de la parada, esperando con más paciencia que un santo la llegada del autobús nocturno de circunvalación, intercambiaron una sonrisita a pesar de no conocerse, pues del interior de una enorme caja de cartón puesta boca abajo en una esquina surgían unos ronquidos tan fuertes y persistentes que ni que aquello fuera una sierra eléctrica. Un pobre desgraciado, un mendigo sin duda, que había encontrado una protección transitoria contra el frío y la lluvia, y que, reconfortado por el poco calor de su propio cuerpo que el cartón retenía, había decidido que lo mejor era cerrar los ojos, mandar al carajo todo el universo y aquí paz y después gloria. Al final llegó el autobús, los dos hombres subieron y el vehículo reanudó la marcha. De pronto apareció un sujeto corriendo:
- ¡Pare! ¡Pare!
El conductor lo vio, pero pasó de largo. El tipo soltó un reniego y consultó el reloj. El siguiente vehículo tardaría una hora en pasar, a las cuatro de la madrugada. El hombre lo pensó un poco y, tras una sarta de maldiciones, decidió recorrer el camino a pie. Encendió un pitillo y echó a andar.

CARTAS CRUZADAS


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 21 de Octubre de 2014.
Fresco, ligerito y juvenil, así como nosotros
Me lo pasé bien leyéndolo, me dejó con una sonrisa bailoteándome en la cara, y era lunes. ¿Qué más se le puede pedir a un libro?

Sinopsis (Ed. Lumen)
Ed Kennedy es un chico cualquiera en un suburbio cualquiera de una gran ciudad. Vive en un apartamento maltrecho en compañía de su perro y se gana la vida como taxista. Le acompaña una pandilla de amigos, con quien juega a las cartas y charla, sin prestar verdadera atención a sus problemas. Hasta que un buen día Ed, casi por casualidad, consigue evitar un robo en un banco, y a partir de entonces empieza a recibir unas cartas de juego que contienen mensajes cifrados.
Guiándose por su instinto e inteligencia, Ed va descubriendo que las cartas le llevan a cumplir con la misión de devolver el bienestar a quien, por una u otra razón, lo ha perdido. Empieza por ayudar a completos desconocidos –una esposa maltratada por su marido, una anciana que quiere seguir amando al marido que perdió hace muchos años, un cura que busca público para sus sermones, una familia de inmigrantes que quiere celebrar la Navidad y no dispone de dinero para hacerlo… –pero poco a poco su misión le llevará a acercarse a sus amigos, a conocerlos a fondo, a descubrir que en el ánimo de esos chicos que se esconden detrás de una lata de cerveza hay secretos y deseos que él no conocía, y que incluso es posible comprender el miedo al amor que muestra la mujer de sus sueños.
Cartas cruzadas pone de manifiesto que el cariño, la amistad e incluso la idea de Dios no son «nombres» sino «verbos»: es actuando como descubrimos la verdadera esencia de estos sentimientos.

Cartas cruzadas (fragmento)

El atraco


El hombre de la pistola es un inútil.
Yo lo sé.
Él lo sabe.
Hasta Marvin, mi mejor amigo, lo sabe, y eso que él es más inútil aún que el hombre de la pistola.
Lo peor de todo es que el coche de Marv está aparcado justo enfrente, en una zona de estacionamiento de quince minutos. Estamos todos tumbados en el suelo, boca abajo, y al coche solo le quedan unos minutos.
—Podría darse un poco de prisa, el tío —farfullo.
—Lo sé —susurra Marv—. Esto es intolerable. —Su voz se eleva desde las profundidades del suelo—. Me van a poner una multa por culpa de ese inútil. No puedo permitirme otra multa, Ed.
—El coche ni siquiera lo vale.
—¿Qué?
Marv se vuelve raudamente hacia mí. Noto que se pone tenso. Se ofende. Si algo no soporta Marv es que hablen mal de su coche. Repite la pregunta.

lunes, 20 de noviembre de 2017

LA MUERTE DE AMALIA SACERDOTE


RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS, el 21 de Octubre de 2014.
No hago más que encontrarme breves de prensa, titulares o post en FB sobre cierto programa de televisión de entrevistas del domingo 19-10-14 por la noche.
Básicamente se acusa al entrevistador de blando, vendido, despistado o de haber dejado que el entrevistado se escapara vivo.
No sé. No vi el programa y no lo veo habitualmente. Los programas..., 'montados' donde el presentador siempre queda como el listo y el entrevistado como un estúpido me pueden.
No estoy haciendo una crítica televisiva. Esta introducción es porque el libro con el que sustituí al programa viene al pelo. ¿Cómo se deciden las noticias en las redacciones de un medio de prensa? ¿Quién mueve los hilos de los periodistas? ¿Hasta que punto son independientes? ¿El simple aleteo de una mariposa en Pekín de verdad genera un huracán en la otra punta del mundo?
Camilleri abandona momentáneamente a Montalbano y presenta una explicación de que es el Poder, como se mueve y como nos afecta. Y lo hace de forma bíblica: que tu mano derecha no sepa lo que hace la izquierda pero que tus ojos no pierdan de vista a ninguna de las dos.
Ha sido un interesante ejercicio de política ficción. Muy interesante.

Reseña de LIBROS el 29 de Agosto de 2021

Cómo mis novelas favoritas de Camilleri son las protagonizadas por Salvo Montalbano he ido evitando, a lo largo de los años, aquellas que no lo son, pero con el tiempo una se vuelve más lista y procura enmendar sus errores y así ha sido con esta novela.
La muerte de Amalia Sacerdote,  cuyo título original es La rizzagliata, es una obra maestra de la novela negra, un corto, contundente y magistral relato de cómo la corrupción penetra todas las capas de nuestra sociedad y de cómo los "soldados rasos" sólo somos eso, carne de cañón.
Absolutamente imprescindible 🌞🌞🌞

Sinopsis (Ed. RBA)
Obra ganadora del 2º Premio Internacional de Novela Negra RBA
La muerte de Amalia Sacerdote, de Andrea Camilleri, ha sido la obra ganadora de la segunda edición del Premio Internacional de Novela Negra RBA. El conocido popularmente como “Crimen del Garlasco” -un hecho real bastante famoso en Italia por la gran repercusión que tuvo en los medios de comunicación- le ha servido a Camilleri como punto de partida para crear la novela.
Michele Caruso, director de la RAI en Palermo, se niega a que el auto de procesamiento de Manlio Caputo, hijo del líder de la izquierda siciliana y acusado del homicidio de su novia -Amalia Sacerdote, hija a su vez de un notable diputado del partido rival- abra el informativo de la tarde: "Esta historia es peligrosa para todos; también para quien debe dar la noticia".

Y es que "una pura y simple noticia de sucesos" no es pura y simple en Sicilia, en donde política, mafia y familia conforman una red tan solida, que hasta la justicia y el periodismo -los dos escenarios donde transcurre esta excepcional novela- están a su servicio. Y en la que unos y otros confabulan, no para encontrar la verdad, sino para esconderla.
La muerte de Amalia Sacerdote no es sólo una novela sobre la corrupción política, sino también sobre la fidelidad al orden establecido: los títeres de la televisión, la farsa de los abogados, el farol del fiscal, la desaparición de las pruebas, el misterioso amante de Amalia Sacerdote... y, por supuesto, el alto precio de negarse a mirar hacia al otro lado.

La muerte de Amalia Sacerdote (fragmento)
"Hacia las tres de la mañana Giuditta cogió el sueño, agotada. Michele permaneció con los ojos abiertos. Habían ido a comer a una taberna donde no les conocía nadie, luego dieron un largo paseo abrazados, volvieron a casa y siguieron haciendo el amor. Ahora se sentía con la cabeza vacía. Al contrario; no, no la tenía vacía porque había una frase que le rondaba por la cabeza desde el momento en que Giuditta se la había dicho a Agnese, su amiga del alma y cómplice. «Descuelga el teléfono y apaga el móvil, como de costumbre.» ¿Por qué «como de costumbre»? Él sólo había conseguido pasar cuatro noches con Giuditta desde el comienzo de su historia y nunca había sido necesaria la ayuda de Agnese (¡ni su maestría para contar embustes!). Cuando se había presentado la ocasión de ir a casa de su padre en las Madonie, nunca habían pasado allí toda la noche, y como máximo a las cinco de la mañana debía coger la carretera hacia Palermo.
Y entonces, ¿a qué «costumbre» se refería Giuditta? Era una «costumbre» que no le concernía. Una costumbre que descubría el hábito de Giuditta de pasar la noche fuera de casa apoyándose en Agnese, que le cubría las espaldas. Fue entonces cuando recordó lo que le había contado Cate, lo mismo que Giuditta había negado con tanta naturalidad. Probablemente era verdad la historia de que tenía otro amante. A quien quizá no viera con la misma frecuencia con que lo veía a él. No estaba en vela por celos, sino por asombro. No había tenido muchas mujeres. Tres o cuatro antes de Giulia, a la cual había sido fidelísimo, y ahora Giuditta.
¿Cómo podía una mujer entregársele con tanta pasión, pareciendo siempre hambrienta, y luego esa misma noche entregarse a su marido, y pasar la noche siguiente con un tercero? Ser posible, claro que era posible, pero de todos le asombraba. El hecho era que ella, al decir «como de costumbre», se había traicionado. Se le había escapado. "

LA CASA DE LA MEZQUITA


RESEÑADA por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 19 de Octubre de 2014.
No me inspiro mucho los domingos para escribir opiniones libreras.
Pero esta novela no necesita mucha alharaca.
Apenas uno la abre, ya no puede dejar de leerla.

Sinopsis (Ed. Salamandra)
Sin duda uno de los más destacados narradores contemporáneos de los Países Bajos, el escritor de origen iraní Kader Abdolah —autor de El reflejo de las palabras— ha obtenido un rotundo éxito con esta nueva novela, que ha sido elegida por los lectores neerlandeses como segundo libro preferido de todos los tiempos.
Durante generaciones, la poderosa familia de Aga Yan ha ocupado una posición privilegiada en la tranquila ciudad de Seneyán. Siguiendo una tradición secular, el clan habita un caserón de treinta y cinco habitaciones adosado a la mezquita, una enorme y animada colmena llena de abuelas, niños, sirvientes, comerciantes y santones.
Por el edificio fluyen a toda velocidad historias fascinantes, y allí conviven el poder económico y el poder espiritual, la religión y la vida social, las pasiones y los rezos. Sin embargo, todo cambia en los años setenta, cuando la religión se convierte en arma política y pone fin a décadas de armonía. Los grupos de izquierdas contrarios a la occidentalización del país y los extremistas islámicos provocan la caída del sah, y el regreso del ayatolá Jomeini marcará drásticamente el destino de la familia.
Epopeya familiar de marcado tono autobiográfico, en La casa de la mezquita confluyen la rica cultura persa con la vida cotidiana de los iraníes. Gente, arte, religión, sexo, literatura, cine, incluso el mundo de la radio y la televisión; el autor retrata, con el conocimiento que le otorga su experiencia personal, una sociedad islámica moderada, ligada a una sabia y fértil tradición milenaria y alejada de todo radicalismo.

La casa de la mezquita (fragmento)
"Con la primavera llega también el nuevo año persa, el Noruz.
En sus orígenes, el Noruz era una fiesta regia que se celebraba con gran pompa en los palacios de los primeros reyes persas, al inicio de la nueva estación. Los preparativos empiezan dos semanas antes con una limpieza a fondo de la casa. Para dar la bienvenida a la primavera se plantan semillas de trigo de las que brota el sabzé, y los padres compran ropa y zapatos nuevos a sus hijos para visitar a sus parientes, especialmente a los abuelos. Las mujeres se ocupan de todos los detalles y sólo cuando todo está dispuesto se toman un tiempo para sí mismas. En la casa, las abuelas estaban muy atareadas preparándola para el Noruz con la ayuda de un par de sirvientas. La anciana peluquera había llegado para acicalar a las mujeres, cortarles el pelo y depilarles las cejas y la cara.
Llevaba más de cincuenta años cumpliendo con aquel ritual. La primera vez que pisó aquella casa no debía de tener más de diez o doce años y acompañaba a su madre como aprendiza. Más tarde, cuando su madre murió, ocupó su lugar y se convirtió en la persona de confianza de las mujeres de la casa.
El día que ella llegaba, los hombres tenían prohibida la entrada en aquella parte de la casa. Durante todo el día se oían las risas de las mujeres, que deambulaban por las estancias y el patio sin el velo y con las piernas al aire. Las abuelas las malcriaban sirviéndoles el narguile, limonadas y otras golosinas.
La peluquera las ponía al corriente de los chismorreos de la ciudad. Frecuentaba las casas de las familias ricas y conocía a fondo las cosas que interesaban a las mujeres. Siempre llevaba consigo un viejo maletín con perfumes, tintes, maquillaje, tijeras y horquillas, que vendía a sus clientas. Eran artículos vistosos y distintos de los que podían comprarse en el zoco de Seneyán. La peluquera tenía un hijo que trabajaba en Kuwait y, siempre que volvía a casa de visita, le llevaba una maleta llena de productos de belleza para vender. "




EL MATRIMONIO AMATEUR


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 15 de Octubre de 2014.
No es que no me gustó. No, no. Sí me gustó. Pero no es uno de esos libros para recomendar y para gritar que no lo dejen pasar.
Es uno de esos libros medianos de los que están llenas todas las estanterías.
Es entretenido y no requiere concentración. Lo cual no es fácil de lograr aunque lo parezca.
La autora tiene mejores, eso sí.

Sinopsis (Ed. Punto de Lectura)
Anne Tyler (Pulitzer 1989) explora con agudeza, humor y ternura los hilos que sostienen a una pareja incompatible y las consecuencias de su unión a lo largo de tres generaciones.

Desde el momento en que la vio entrar con su abrigo rojo en el colmado del barrio polaco de Baltimore, él se quedó fascinado. Y antes de que terminara la guerra, se casaron apresuradamente.
Pero Pauline -atolondrada, impulsiva y pasional- y Michael -sensato, impasible y práctico- quizá no estaba hechos el uno para el otro. Y lo que con veinte años parecía fácil se hizo más complicado algún tiempo y tres hijos más tarde...

El matrimonio amateur (fragmento)

1

Vox pópuli
En el barrio cualquiera habría podido contar cómo se habían conocido Michael y Pauline.
Ocurrió un lunes por la tarde, a principios de diciembre de 1941. Era un día normal y corriente en St. Cassian, una modesta calle de estrechas casas adosadas típicas de la zona este de Baltimore, pequeños hogares muy bien cuidados entre los que se intercalaban tiendas no más grandes que salitas de estar. Las gemelas Golka, con idénticas pañoletas, comparaban los coloretes del escaparate de la droguería Sweda. La señora Pozniak salió de la ferretería con una diminuta bolsa de papel marrón que tintineaba. El Ford Model B del señor Kostka pasó despacio, seguido por el Chrysler Airstream de un desconocido, que produjo un elegante silbido; luego pasó Ernie Moskowicz en la maltrecha bicicleta de reparto del carnicero.
En el colmado Anton —un cuchitril oscuro y abarrotado con un mostrador de madera con forma de L y estantes que llegaban hasta el techo—, la madre de Michael envolvía dos latas de guisantes para la señora Brunek. Las ató fuertemente y se las entregó sin sonreír, sin un «Hasta pronto» ni un «Me alegro de verla». (La señora Anton no había tenido una vida fácil.) Uno de los hijos de la señora Brunek —¿Carl? ¿Paul? ¿Peter? Todos se parecían mucho— pegó la nariz al cristal de la vitrina de las golosinas. Una tabla de madera del suelo crujió cerca del expositor de cereales, pero no eran más que los huesos del viejo edificio, que se asentaban un poco más en la tierra.


CARIBOU ISLAND


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 8 de Octubre de 2014.
Es un libro sobre relaciones familiares, sobre relaciones de pareja, sobre la aridez humana en la aridez de Alaska.
Es un libro que...
Recordarlo para describirlo me angustia otra vez.
¿Debería uno hacerse esto como persona en aras de uno como lector?...
Este es un libro con el que me lo cuestioné.
Pero que es bueno, lo es. Con mayúsculas, con signos de exclamación y suspiros.
Vean ustedes que hacen.

Sinopsis (Ed. Literatura Random House)
En medio del paisaje salvaje de Alaska, el matrimonio formado por Irene y Gary va a la deriva. Para cumplir un viejo sueño de Gary deciden construir una cabaña en un remoto rincón de la isla. Irene sospecha que el plan de Gary es el primer paso para abandonarla y pronto comienza a sufrir extrañas jaquecas y le asaltan recuerdos de un trágico pasado familiar. Cuando el duro invierno llega sin previo aviso, la pareja se ve sometida a una tensión insólita. Su hija mayor, Rhoda, intenta ayudarles aunque ella misma está atravesando una crisis personal. Caribou Island cuenta una tragedia demoledora, una historia ambientada en una tierra hostil a la vez que grandiosa. La novela tira de ese hilo vital que es la comunión con el entorno y sitúa a los personajes en un auténtico paraje animado, pero ni siquiera la idílica alianza con la naturaleza ayuda a los personajes a escapar de una amenaza terrible y constante.

Caribou Island (fragmento)

Cuando Rhoda llegó a casa se encontró a Jim con una copa en la mesita que tenía al lado. Frente a la ventana, bebiendo, contemplando el mar. Muy extraño, puesto que Jim casi nunca bebía y, desde luego, nunca a solas. Rhoda empezó a percibir los detalles que notaba durante una tragedia: el frigorífico hizo un clic al ponerse en marcha y enseguida otro para desconectarse; el sol se ref lejaba en la madera oscura de la mesita pero no en el vaso de Jim; la casa, por lo demás, estaba insólitamente caldeada, casi húmeda, claustrofóbica. Dejó las bolsas del colmado que traía y se acercó a él.
¿Qué pasa?, preguntó con una voz que a ella le pareció que transmitía miedo. Al decirlo le tocó ligeramente el hombro.
Hola, dijo él, quizá un poco sonrojado al volver la cabeza, pero no ebrio, pues hablaba sin farfullar. ¿Qué tal el día?
¿Qué ocurre? ¿Cómo es que estás aquí bebiendo?
No es más que una copita de jerez, dijo Jim, y cogió el vaso e hizo girar el hielo en su interior. Disfrutando la vista.
Algo pasa. Creí que había muerto alguien o algo así. ¿A qué viene ese repentino cambio de conducta?
¿Es que uno no puede ni tomarse una copa? Joder, cualquiera diría que estaba pegando fuego a la casa o escribiendo en las paredes con lápices de colores, o qué sé yo. Tengo cuarenta y un años, soy dentista y estoy en mi casa tomando un poco de Harveys después del trabajo.
Vale, vale.
Alegra esa cara.