sábado, 18 de noviembre de 2017

MALINCHE


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 28 de Septiembre de 2014.
Lo tenía para leer, pero dos cosas me repelían: la autora, no me había gustado lo que antes había leído, y el nombre y la historia. Malinche, por estas tierras es un insulto, una maldición.
Pero ayer, después de cerrar Lupita, aproveché el envión con el que venia y me puse a ello.
No me aburrió, ni lo cerré y me dije ¡qué pérdida de tiempo! Pero tampoco lo cerré y me dije ¡wow, que grata sorpresa!
Ni entre los primeros diez del año, ni entre los peores diez del 2014.
Una cosita entretenida y merengada para un fin de semana al solcito.

Sinopsis (Ed. Suma de Letras)
En este libro, fruto del diálogo entre el trabajo de la imaginación y el de la reconstrucción histórica, Laura Esquivel narra con su estilo intenso y cálido la aventura vital de la mujer que creyó que el extranjero Hernán Cortés pondría fin a los terribles sacrificios humanos  de la religión azteca, pero acabaría en cambio descubriendo la crueldad no menos sangrienta de los conquistadores en su ambición y codicia. Desde la recreación de toda una cultura perdida, con sus rituales y sus costumbres, hasta su destrucción casi total a manos de quienes por momentos creyeron que eran dioses, este relato explora las relaciones entre pueblos y razas e indaga las causas que tantas veces los llevan a enfrentarse.
Un relato inolvidable, que penetra con la misma profundidad en el atribulado corazón de su protagonista y en el complejo corazón de México. Malinche es tal vez la mirada más abarcadora de su autora sobre dos de sus temas esenciales: la tierra mexicana y la condición femenina. 

Malinche (fragmento)

Al Viento.

Uno.


Primero fue el viento. Más tarde, como un relámpago, como una lengua de plata en el cielo, fue anunciada en el valle del Anáhuac la tormenta que lavaría la sangre de la piedra. Fue después del sacrificio que la ciudad se oscureció y se escucharon atronadoras descargas, luego apareció en el cielo una serpiente plateada que se vio con la misma fuerza en muy distintos lugares. Enseguida comenzó a llover de una manera pocas veces vista. Llovió toda la tarde y toda la noche y al día siguiente también. Durante tres días no cesó de llover. Llovió tanto, que los sacerdotes y sabios del Anáhuac se alarmaron. Ellos estaban acostumbrados a escuchar y a interpretar la voz del agua pero en esa ocasión sintieron que Tláloc, el dios de la lluvia, no sólo trataba de decirles algo sino que, por medio del agua, había dejado caer sobre ellos una nueva luz, una nueva visión que daría otro sentido a sus vidas, y aunque aún no sabían claramente cuál era, así lo sentían en sus corazones. Y antes de que sus mentes interpretaran correctamente la profundidad del mensaje, que el agua explicaba cada vez que se dejaba caer, la lluvia cesó y el sol resplandeciente se reflejó en la multitud de espejos, de pequeños lagos, ríos y canales que las lluvias habían dejado repletos de agua.
Ese día, lejos del valle del Anáhuac, en la región de Pai-nala, una mujer luchaba por dar a luz a su primogénito. La lluvia ahogaba sus pujidos. Su suegra, que actuaba como partera, no sabía si prestar oídos a su parturienta nuera o al mensaje del dios Tláloc.
No le costó trabajo decidirse por la esposa de su hijo. El parto era complicado. A pesar de su larga experiencia nunca había asistido a un alumbramiento como ése. Durante el baño en temascal —inmediatamente anterior al parto— ella no había detectado que el feto viniera mal acomodado. Todo parecía estar en orden. Sin embargo, el esperado nacimiento se tardaba más de lo común.


 


A LUPITA LE GUSTABA PLANCHAR


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 28 de Septiembre de 2014.
Primero pensé en escribir que no es un libro para hombres, es esa llamada "literatura para mujeres", y luego me reí de mi un buen rato, porque ¿qué espécimen con bolas se acercaría a un libro cuyo título fuera a Lupita le gustaba planchar? ¡Ni por curiosidad! Para más inri, los capítulos se llaman: a Lupita le gustaba bordar, a Lupita le gustaba chingar, a Lupita...
En fin, ellos se lo pierden, el libro está muy bien.
Reconozco que si no tuviera testigos reales del México que describe el libro, me costaría asumir que es cierto. Pero como los tengo, el encuadre de la historia me pareció muy bueno y la protagonista-no del todo buena, gordita, alcohólica, adicta, fea, policía y calenturienta, me encantó.

Sinopsis (Ed. Suma de Letras)
Una mujer excepcional, un personaje opuesto a la concepción arquetípica de heroína que se grabará a fuego en la memoria de todos los lectores.
De Laura Esquivel, autora del bestseller internacional Como agua para chocolate.
Una parábola moral sobre un mundo en crisis y la búsqueda del amor universal.
Lupita, la protagonista de esta novela, es una antiheroína fuera de serie: una policía poco agraciada físicamente, con problemas de alcoholismo, que ha padecido violencia y sobrevive en un medio donde reinan las apariencias, el dinero y el poder. En su búsqueda del amor, termina involucrada de forma azarosa en el asesinato de un político y debe desentrañar lo que hay detrás del crimen, pues su propia vida está en riesgo.
Con su característico lenguaje accesible y enganchador, un refrescante humor negro y una profunda mirada espiritual, Laura Esquivel traza un fascinante retrato de una sociedad que ha perdido el rumbo, donde casi todos somos un poco Lupita y buscamos algo que nos salve del desamor.

A Lupita le gustaba planchar (fragmento)

A Lupita le gustaba planchar.
Podía pasar largas horas dedicada a esta actividad sin dar muestras de agotamiento. Planchar le daba paz. Consideraba esa actividad como su mejor terapia y recurría a ella diariamente, incluso después de un largo día de trabajo. La pasión por el planchado era una práctica que había heredado de doña Trini, su madre, quien lavó y planchó ajeno toda su vida. Lupita invariablemente repetía el ritual aprendido de su sacrosanta, mismo que iniciaba con el correcto rociado de la ropa. Las modernas planchas de vapor no requerían que la ropa estuviera humedecida previamente pero para Lupita no existía otra manera de planchar y evitar el rociado representaba un sacrilegio.
Ese día, al entrar a su casa, de inmediato se dirigió a la masa de planchado y comenzó a rociar las prendas. Sus manos temblaban como las de una teporocha en cruda, lo cual facilitó su trabajo. Le urgía pensar en otra cosa que no fuera el asesinato del licenciado Arturo Larreaga, jefe delegacional de su distrito, el cual ella había presenciado a corta distancia hacía sólo unas horas.
En cuanto dejó rociada la ropa, se dirigió al baño. Abrió la regadera y dejó correr el agua fría dentro de una cubeta a la cual le puso abundante detergente. Antes de meterse a la regadera abrió una bolsa de plástico y se asqueó del olor que despedían los pantalones orinados que venían aprisionados en su interior. Los puso a remojar dentro de la cubeta y se dio un regaderazo. El agua la despojó del molesto olor a orines que su cuerpo despedía pero no pudo quitarle la vergüenza que traía incrustada en el alma. ¿Qué habrán pensado de ella todos los que se enteraron de que se orinó? ¿Cómo la iban a ver de ahí en adelante? ¿Cómo hacerlos olvidar la patética imagen de una policía gorda parada en medio de la escena del crimen con los pantalones escurridos?

MÚSICA PARA CAMALEONES


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 27 de Septiembre de 2014.
Hace rato que pienso que escribir sobre este libro para esta página, y me bloqueé, no me sale nada, me quedé en blanco.
Así que señor, señora, vaya y léalo. Tiene algunas joyitas, y las que no llegan a diamante, también valen la pena.

Sinopsis (Ed. Anagrama)
"Música para camaleones", un libro que Truman Capote presenta como una obra de literatura documental, bucea con implacable lucidez en la poesía y el horror de la vida; es el espléndido resultado de una necesidad de comunicación directa entre lector y materia narrativa, que Truman Capote buscó febrilmente para conseguir una escritura «sencilla y límpida como un arroyo de montaña». Una prosa en la que pudiera mantenerse al margen del tema tratado, sin influir con su estilo, juicios y opiniones. En palabras suyas: hacer del lector un observador o, mejor aún, el testigo de una experiencia verdadera que, contada bajo tal óptica, resultará mucho más subyugante que si el autor la interpretase al modo clásico. El libro está dividido en tres partes. En primer lugar, seis breves piezas iniciales de magistral concepción y ejecución. Luego, una novela corta, "Ataúdes tallados a mano", lleva a sus últimas consecuencias el enfoque testimonial de "A sangre fría" y relata la espeluznante historia de Quinn, un psicópata solipsista que se dedica a asesinar macabramente a los jurados que en un juicio han votado en su contra. Finalmente, siete Conversaciones y retratos, entre los cuales destacan el magistral texto en el que Capote acompaña a una asistenta en «un día de trabajo» limpiando domicilios, la estremecedora entrevista a un maníaco asesino recluido en San Quintín, la agridulce y famosa semblanza de Marilyn Monroe y, desde luego, el desgarrador autorretrato del autor y su imaginario gemelo, en el que afirmó: «Soy alcohólico. Soy drogadicto. Soy homosexual. Soy un genio.»

Música para camaleones (fragmento)
"La interrupción ocurrió porque yo me encontraba ante un montón de problemas: sufría una crisis creativa, y, a la vez, personal. Como la última no tenía relación, o muy poca, con la primera, sólo es necesario aludir al caos creativo. [...] Aún cuando era bueno, vi que jamás trabajaba con más de la mitad, a veces sólo con un tercio, de las facultades que tenía a mi disposición. ¿Por qué? El problema era: ¿como puede un escritor combinar con éxito en una sola estructura todo lo que sabe acerca de las demás formas literarias? [...] Ahora, me sitúe a mí mismo en el centro de la escena, y de un modo estricto y sobrio, reconstruí conversaciones triviales con personas corrientes. Tras escribir centenares de páginas sobre esas cosas tan simples terminé por desarrollar un estilo. Había encontrado una estructura dentro de la cual podría integrar todo lo que sabía acerca de escribir. Entretanto, aquí estoy en mi oscura demencia, absolutamente solo con mi baraja de naipes. "

EL EXPERIMENTO


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 25 de Septiembre de 2014.
Ya que me dijeron implacable, entonces "implaco".
Prefiero ver un capítulo de Criminal Minds, Spencer me encanta y me creo cualquier cosa que me pasen por bueno.
Prefiero una serie de una hora a este thriller psicológico que se me hizo interminable, me aburrió, perdí muchas horas leyéndolo, en mis tiempos estudiantiles quizás me hubiera colgado con los jueguitos, hoy prefiero otras cosas.
No es que sea un No, es que es un: si te prestas a eso.

Sinopsis (Ed. Planeta)
De la mano de su profesor, dos estudiantes de psicología participan en un experimento que consiste en estudiar el expediente médico de un paciente de una clínica psiquiátrica privada de Berlín, donde hace años tuvieron lugar escenas de horror y que, actualmente, se mantiene cerrada al público. En medio de los acontecimientos se hallan el joven Caspar, un paciente que sufre amnesia, incapaz de recordar quién es, y también un asesino en serie conocido como el Destructor de almas. Tras el ataque a tres mujeres, el Destructor de almas centrará ahora su objetivo en el centro psiquiátrico. Cualquiera puede ser la próxima víctima…

El experimento (fragmento)

“Dicen que las personas sólo reconocen su verdadero yo cuando se enfrentan a situaciones extremas, en esos momentos en que las condiciones no hacen posible que se pueda actuar según los valores enseñados, se haga presente el condicionamiento de muchos años adquirido a través de los padres, la escuela, los amigos y la relación con otras personas externas. Una crisis es como un cuchillo afilado que sirve para cortar fruta; pela la piel de fuera y deja al descubierto el interior; el estado primitivo, sin forma, que generalmente posee un marcado instinto donde la supervivencia domina la moral.”

EL PROFESOR DEL DESEO


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 24 de Septiembre de 2014.
Este hombre me ha dado inmensos gustos y estrepitosas decepciones. Este libro pertenece a las últimas.
Bien escrito está, sí, claro, es Roth, el arte lo tiene, la ironía también.
Pero que protagonista aburrido, que preocupaciones tan tontas, lo que pudo ser perversamente inquietante terminó siendo un bodrio.
Lo que si me pasó, es que me dieron ganas de re-leer Kafka. El profesor de literatura protagonista de la historia le dedica un capítulo interesante. Quizás lo más rescatable de esta lectura.

Sinopsis (Ed. Debolsillo)
Una novela ingeniosa e inteligente sobre la obsesión por el sexo y el miedo al compromiso.
David Kapesh, un personaje recurrente en las novelas de Philip Roth, vive obsesionado por el sexo desde sus tiempos de estudiante. Su abstinencia forzada durante la juventud, sus experiencias desenfrenadas en Londres, su fracaso matrimonial, y la soledad, no hacen más que evidenciar la incapacidad del protagonista para entregarse sinceramente a alguien, para comprometerse y llegar a ser feliz. Este título cierra la trilogía iniciada por El pecho y continuada por El animal moribundo.


El profesor del deseo (fragmento)
El cartel está en cinco idiomas- a tantos fascinan las temibles invenciones de este asceta atormentado, a tantos millones asusta:
(A la tumba de FRANZE KAFKY)
Han elegido, para señalar los restos de Kafka, una piedra blancuzca, alargada, firme, que eleva hacia lo alto su glande puntiagudo, un falo sepulcral que en nada se parece a qualquier otra cosa que haya en su entorno. Esa es la primera sorpresa. La segunda es que el hombre obsesionado por su condición de hijo está enterrado para siempre -¡aún!- entre el padre y la madre que le sobrevivieron. Recojo un guijarro del camino de gravilla y lo añado a uno de los montones de piedrecitas que allí han ido apilando os peregrinos, antes que yo. Nunca he hecho nada parecido por mis propios abuelos, enterrados con otros diez mil, a veinte minutos de mi casa de Nueva York, ni he hecho visita semejante a la tumba de mi madre (…) Las oscuras losas rectangulares que hay en torno a la tumaba de Kafka llevan apellidos judíos muy familiares (…) Levy, Goldschmidt, Schneider, Hirsch… Las tumbas se pierden en la lejanía, pero la de Kafka parece ser la única bien cuidada. Los demás muertos no tienen sobrevivientes que anden por aquí arrancando la maleza y recortando la hiedra (…) Parece que solo el soltero sin hijos ha dejado descendencia entre los vivos. ¿Qué mejor sitio, para que cunda la ironía, que à la tombe de Franze Kafky?

SINFONÍA PARA ANA


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 23 de Septiembre de 2014.
Mientras lo leía, sentía tener en mis manos una reliquia, y un objeto de amor, y un ejercicio docente.
Me recordó los libros que me prestaban mis docentes en secundaria.
Un libro que ha sido prestado muchas veces, que ha sido leído muchas veces, con esquelitas, con nombres de alumnas, con párrafos subrayados.
Un objeto tan hermoso podría tener cualquier contenido que me iba a gustar igual.
Y el contenido no me decepcionó. Amores, adolescentes, primeros tiempos de la dictadura argentina.
Creo que está agotado, pero todos los adolescentes deberían de leerlo. La profe que me lo prestó tiene razón.

Sinopsis (Ed. Corregidor)Ana e Isa son amigas inseparables y van al Colegio Nacional de Buenos Aires, durante la tercera presidencia de Perón en los tiempos previos al Golpe de Estado de 1976. Ambas crecieron con la idea de que hay dos cosas esenciales en la vida: vivir el amor verdadero y cambiar el mundo. Cuando llega el momento de amar para Ana, las cosas no resultan ser tan claras. La presión de su agrupación por haberse enamorado de un joven de otro partido y su propio miedo al debut sexual, la alejan de Lito y la acercan a Camilo. A partir de allí, nada será igual. Su corazón quedará atrapado entre dos pasiones y la realidad política la obligará —a pesar de sus 15 años— a tomar decisiones irreversibles.

Sinfonía para Ana (fragmento)

LA MAÑANA
1974
Era una mañana cálida de marzo. 1974.
Estaba en el recreo de mitad de la mañana con mis ilusiones hechas añicos. Esto suena muy fuerte porque en realidad ahora sé lo que es estar hecha añicos.
Digamos que las cosas no se estaban pareciendo a los sueños despierta que me había procurado en séptimo grado: no estaba en mis planes comenzar primer año rodeada de mujeres. Con toda la primaria me había bastado y sobrado.
Supuse que sería mi karma, que nunca aprendería a tratar con chicos.
Con mis amigas era bastante popular… con sentido del humor… considerada piola… pero bastaba que se acercase un pibe para que me volviera autista… y si la situación me obligaba a hacer un movimiento, seguro que resultaría torpe, muy torpe,extremadamente torpe.
Para colmo, mi mejor amiga, Isabel, sí había entrado al Nacional, como lo llamábamos en ese momento… Con lo cual, en esa mañana tibia de marzo, yo estaba soportando un guardapolvo en la más absoluta soledad.
Estoy exagerando… Decididamente, exagerando… No puedo pensarlo así ni siquiera un solo segundo… No me puedo permitir recordarlo así. La más absoluta soledad es ésta, la de hoy, dos años después…
El año anterior, 1973, durante séptimo, iba todas las tardes a «Ingreso» para prepararme para el examen.

viernes, 17 de noviembre de 2017

LA MUJER QUE SE ESTRELLABA CONTRA LAS PUERTAS



RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 21 de Septiembre de 2014.
Del estilo de "La palabra más hermosa" o de "Tenemos que hablar de Kevin", uno de esos libros que mete tu corazón dentro de tus intestinos, y no lo deja salir.
No es un libro juvenil, para nada. Pero yo se lo daría como lectura obligatoria a cada niña de 18 años.
Que se dejen de joder con Crepúsculo y lean de que van los matoncitos.
La de casos como estos que me toca ver todos los días en mi laburo!!
Un libro muy bueno, sí señor.

Sinopsis (Ed. Norma)
La protagonista, Paula Spencer nos relata su vida, marcada por el maltrato, la agresión y las adicciones. Una narración atrapante en primera persona, que entre tantos hechos aberrantes, deja alguna grieta para el optimismo.

La mujer que se estrellaba contra las puertas (fragmento)

[…] Soy alcohólica. Nunca lo he admitido ante nadie (a nadie le interesaría saberlo). No he hecho nada al respecto; nunca he tratado de dejarlo. Creo que podría hacerlo si realmente lo intentara, si estuviera lista para hacerlo. Siempre me ha gustado beber. Desde que tenía dieciséis años, incluso antes de empezar a salir con Charlo. No recuerdo en qué momento simplemente dejó de gustarme y empecé a necesitarlo.

JESÚS ME QUIERE


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 19 de Septiembre de 2014.
Livianito, tan livianito que te hace volar un rato con él.
No es un librón, no, pero es una lectura para "entre-libros-más jodidos"
Parece que no haber leído Maldito Karma ayuda a que éste te guste más. Por aquello de los listones.

Sinopsis (Ed. Seix Barral)
Marie tiene un gran talento para enamorase del hombre equivocado. Poco después de que su boda haya sido cancelada, conoce a un carpintero. Es un hombre diferente a todos los que ha conocido antes: sensible, atento, desinteresado. Desafortunadamente, en su primera cita él le confiesa que es Jesús. Al principio, Marie piensa que está completamente loco, pero poco a poco se da cuenta de que su historia es cierta. Se ha enamorado del Mesías, que ha venido a la Tierra poco antes del Juicio Final. Marie deberá hacer frente no sólo al fi n del mundo, previsto para el próximo martes, sino a la historia de amor más descabellada de todas las que ha vivido.

Jesús me quiere (fragmento)

Capítulo 1Jesús nunca tuvo ese aspecto, pensé al mirar una Santa Cena que había en el despacho del pastor protestante. Si era un judío árabe, ¿por qué en la mayoría de las imágenes parece uno de los Bee Gees?
No seguí con mis pensamientos porque entró en el despacho el pastor Gabriel, un señor mayor con barba, ojos de mirada intimidatoria y la frente surcada por unas profundas arrugas de preocupación que deben de salirle a todos los que se pasan treinta años
teniendo que cuidar ovejas.
—¿Le quieres, Marie? —me preguntó sin antes saludar.
—Sí… Ejem… Pues claro que quiero a Jesús…, un hombre magnífico… —respondí.
—Me refiero al hombre con quien quieres casarte en mi iglesia.
—Oh…
El pastor Gabriel siempre hacía preguntas así de indiscretas. La mayoría de los vecinos de nuestro pequeño pueblo, Malente, lo atribuía a que se preocupaba en serio por la gente. Yo, en cambio, creía que era, ni más ni menos, un fisgón increíble.
—Sí —repliqué—, claro que le quiero.

ANIMALES DOMÉSTICOS


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 18 de Septiembre de 2014.
No voy a comentar sobre el libro, voy a comentar sobre uno de los cuentos "Deja tu mensaje después de la señal", sólo sobre éste porque los demás, son el relleno, las páginas que hay que cumplir para la edición, o eso sentí yo.
Deja tu mensaje...,  tiene soledad, y hambre, y prejuicios, y depresión, tiene miedos, oscuridades, paredes llenas de luz, gatos y películas porno. Tiene sexo, fantasías, amigos que se separan y amigas que mueren de sida. Tiene tanta cosa en 36 páginas, y son 36 páginas tan bien escritas, y es un personaje femenino tan auténtico que:
1) Se convirtió en mi mejor lectura del año 
2) Me cuesta creer que haya sido escrito por un hombre
¡Esas cosas los hombres no las saben! No digo más.

Sinopsis (Ed. Booket)
Un adolescente incendiario. Una diseñadora que ya no puede disimular su pavor al sida. Un periodista de policiales que sobrevive a las amenazas con alcohol y pastillas. Un empresario textil obsesionado por los celos. El nombre sugestivo de los gatos de unos jubilados cuyos hijos son desaparecidos.
Animales domésticos es un planeo en vuelo rasante sobre las agonías de la clase media.

Animales domésticos (fragmento)

Las figuritas de Federico

Walter, el encargado del edificio apenas pasa los treinta, pero parece menor porque tiene facciones aniñadas y un cuerpo macizo y fibroso que mueve con el desgarbo de un adolescente, vestido siempre de buzo, vaqueros y zapatillas. Si alguien le habla, antes de contestar con su voz aflautada y sumisa, Walter frunce las cejas y, al desviar la mirada, se vuelve un chico tímido y asustado que se ve venir un castigo. Como ahora Federico, acorralado contra la pared de la cocina, con las figuritas apretadas en un puño que esconde en la espalda.
–Dame las figuritas –le sonríe Walter–. Dámelas Federico.
Y Federico se pega a la pared:
–No, pa –porque cada vez que su padre lo llama Federico y no Fede pone alerta.
La sonrisa de Walter es dócil, la misma sonrisa que logra que el consorcio piense que Walter es un portero macanudo, cumplidor y dispuesto. Pero a Federico no lo confunde.
Walter piensa que ese chico no sale a él. Más bien, sale a la madre; tiene su carácter, sus ínfulas. Y, como ella, es engañador y pretensioso. Morocho, cetrino, con ojos impasibles de gato y, cuando le conviene, con los gestos tan rápidos y veloces como lengüetazos de un sapo, Federico atrapa lo que desea y después vuelve a su quietud imperturbable. Cuando está en el departamento, en especial si está su madre, Federico es un muñeco que acapara todas sus atenciones. Gladys lo mima, lo consiente y le habla con diminutivos, infantilizándose. Para ella, Federico es una mascota. Y Walter un actor secundario que entró por equivocación en una escena que no le correspondía.

UNA SEMANA DE VACACIONES


RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 17 de Septiembre de 2014.
La biblioteca de Tarragona está recatalogando el apartado de narrativa. La conocida clasificación decimal Dewey está siendo sustituida o solapada, no lo tengo claro, por el apartado materias (negra, histórica, erótica...) y sin darme cuenta me lleve uno de 'erótica'.
La verdad es que el título, en eso mismo estoy, en una semana de vacaciones... y el grosor superaron a la contraportada. Y no tenía mala pinta...
¿El sexo puede ser sórdido? Sí. ¿Es necesario explicarlo? Quizás ¿Desde la primera palabra? Sin anestesia, no.
Para depravaciones literarias prefiero los clásicos... Tanto, que no hemos llegado ni a la cama. Y mejor no digo desde donde veníamos.

Sinopsis (Ed. Anagrama)
La autora ha escrito esta breve novela como se saca una foto, sin respirar, buscando la precisión, captando el instante. No tardamos en darnos cuenta al leerlo de que el texto posee en sí mismo el poder de suscitar sentimientos a los que la angustia no es ajena. Provoca el sobrecogimiento a través del cual reconocemos uno de los poderes de la literatura: conferir a las palabras todo su poder explicativo y figurativo. Es como si Angot levantara ese velo no para asustarnos, sino a fin de que veamos y comprendamos.

Una semana de vacaciones (fragmento)

Está sentado en el asiento de madera blanca del váter, la puerta se ha quedado entreabierta, tiene una erección. Riendo para sus adentros, saca de su envoltorio una loncha de jamón york que han comprado en el supermercado del pueblo y se la coloca sobre el sexo. Ella está en el pasillo, acaba de salir del cuarto de baño, camina, toma la dirección del dormitorio para ir a vestirse, él la llama, le dice que empuje la puerta.
—¿Has desayunado esta mañana? ¿No tienes hambre? ¿Quieres un poco de jamón?
Se arrodilla ante él, se mete entre sus piernas, que él ha separado para dejarle espacio, y atrapa con la boca un trozo de jamón, que mastica y después traga. Él devuelve el resto de la loncha al papel y le pide que vaya en busca de clementinas a la cocina, que le acaricie el sexo con los labios y luego deposite gajos encima, en equilibrio, que los vaya atrapando mientras le alisa el miembro y desliza la membrana de piel móvil a ser posible hasta el fondo, en todo caso lo más profundamente que pueda. A veces le reprocha que tenga la boca un poco demasiado pequeña. No se lo reprocha, pero le sorprende, lo lamenta. Le dice que es extraño, le pide que haga un esfuerzo, sobre todo que no utilice los dientes, que las mujeres siempre creen que es excitante que te mordisqueen, pero que no lo es.

INICIACIÓN DE UN HOMBRE:1917


RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 17 de Septiembre de 2014.
Un fiasco. Parecen redacciones, muy bien escritas, eso sí, de 'Mi guerra en Francia'. De entrada, esperaba mucho más. En fin, nada más que añadir.

Sinopsis (Ed. Gallo Nero)
Iniciación de un hombre es el exordio literario de John Dos Passos. Publicado en 1920 cayó en el olvido hasta la consagración del escritor estadounidense, casi veinte años más tarde. Dos Passos escribe este relato autobiográfico sobre la masacre y la destrucción de la guerra de trinchera, experiencia vivida como conductor de ambulancias en el frente franco-alemán hacia donde se
alistó como voluntario en 1917. Iniciación de un hombre es un impresionante mosaico de crudas instantáneas de guerra. Un libro que funde la narración biográfica y de formación con la crónica de los convulsos años de la Gran Guerra. En la obra resuena vívida y dramática la crónica del desencanto y de la desilusión de aquella generación entregada a la barbarie de la guerra. Personas que sólo encontraron la salvación en la fe en el hombre y la compasión.

Iniciación de un hombre: 1917 (fragmento)
"Afuera, el aire de los bosques era fresco y puro. Todo estaba envuelto en la bruma, que llenaba los agujeros de las bombas como si se tratase de agua y se enrollaba fantásticamente en torno a los destrozados troncos de los árboles. Una pequeña nube de gas flotaba aún en algunos puntos, atenazando la garganta y haciéndoles llorar los ojos al aspirar el fresco aire del amanecer.
Amanecer en una selva de troncos derrumbados y tierra revuelta. Contra el amarillo del cielo se destaca el resplandor amarillo de los cañones, acuclillados como ranas en una maraña de alambres, montones de metralla y cajas rotas de madera. Las largas y surcadas carreteras, repletas de estuches de granadas, se extienden a la luz amarillenta a través de los asolados bosques; colgando junto a ellas, un enmarañado revoltijo de cables telefónicos. Restos de camuflaje verde gris se agitan contra el ardiente cielo amarillo, y, en torno a los quiméricos árboles, negros y deshojados, verdosas espirales de gas venenoso. A lo largo de los caminos hay camiones volcados, mulas muertas enredadas en sus tirantes, junto a los destrozados furgones, y cuerpos arracimados envueltos en largas chaquetas azules, medio sepultados en el fango de las cunetas. "



HIJOS DEL ANCHO MUNDO


RESEÑADO por Rosi Torres Marino para LIBROS,  el 16 de Septiembre de 2014.
Novelón!!!
Me ha gustado mucho, mucho. Me encariñe con los personajes, me trasladó a Etiopía en una época convulsa y apasionante y hasta me dieron ganas de estudiar medicina a mí que me mareo con un simple análisis de sangre....recomendable cien por cien!!!

Sinopsis (Ed. Salamandra)
Mientras la India celebra su flamante independencia, la abadesa de un convento de carmelitas en Madrás hace realidad uno de sus sueños más audaces: enviar a África dos jóvenes monjas enfermeras con la noble misión de transmitir el amor de Cristo ayudando a mitigar el dolor de los que sufren. Siete años más tarde, en el modesto hospital Missing de Adis Abeba nacen dos varones gemelos, Marion y Shiva Stone. El hecho no tendría nada de particular si no fuera porque su madre es una monja que muere en el parto y su padre un cirujano británico que desaparece sin dejar rastro. Así, los primeros años de los hermanos Stone transcurrirán en el feliz microcosmos del hospital misionero, criados por un pequeño grupo de personas que, con escasos medios y recursos, se afanan en curar a los enfermos. Con el transcurrir del tiempo, sin embargo, ese mundo cerrado y protegido en el que Marion y Shiva comparten su pasión por la medicina se resquebraja ante la presión de los acontecimientos que sacuden Etiopía y que arrastrarán a los hermanos Stone por caminos diferentes, poniendo a prueba su inquebrantable amistad.
Dotado de las virtudes de los grandes novelistas del siglo XIX, el médico y escritor Abraham Verghese —de origen indio y criado en Etiopía—, ha escrito una historia apasionante que sigue a sus protagonistas a través de la India, África y América a lo largo de cinco décadas, creando así un gran fresco de un país desconocido para la mayoría.





martes, 14 de noviembre de 2017

AMANTES Y ENEMIGOS. Cuentos de parejas


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 16 de Septiembre de 2014.
Me lo prestó una amiga hace unos meses y estando en mi brujita de libros lo subía en fila por la autora y lo bajaba en fila por la tapa.
Pero me apetecieron cuentos y le hinqué diente.
No se como hace la autora para que en pocas páginas, te metas en la piel de esas mujeres que tan poco tienen que ver conmigo, o sientas que haces esas cosas que nunca harías. O te decepciones con lamento e hipo.
En un par de días, fui un borracho, fui un enano, fui una mujer fea y fui una china a la que tiran cuchillos.
Si no fuera que devuelvo los libros religiosamente... ¡este me lo quedaba!

Sinopsis (Ed. Alfaguara)
Todos los textos aquí reunidos tratan sobre ese oscuro lugar de placer y dolor que es la pareja: esto es, tratan del amor y del desamor, de la necesidad y la invención del otro. Son historias que hablan del deseo carnal y la pasión; de la costumbre y la desesperación; de la felicidad y del infierno.
Estos relatos, a menudo inquietantes, agridulces, llenos de sentido del humor y de la melancolía del amor, componen un sugestivo espejo de nuestra intimidad más turbia y más profunda, de ese territorio abisal e incandescente que siempre se resiste a ser nombrado.
Los relatos de Rosa Montero. La lucidez y el apasionamiento de una escritora espléndida.
Un hombre alcohólico y triste en busca de una mujer para vivir y para morir, para amar y envejecer con ella& una niña que se siente invadida por la otra, la nueva mujer de su padre: una mujer fea que encuentra razones para sentirse bella e inocente... Una vez más, Rosa Montero nos muestra el lado luminoso y mezquino del alma, a través de historias con un punto en común: la complejidad de las relaciones humanas. Quien haya tenido amantes y/o enemigos se encontrará retratado en estos cuentos, que no son sólo para disfrutar sino también para reflexionar.

Amantes y enemigos (fragmento)

Una pequeña explicación

Aunque como lectora soy una gran aficionada a los volúmenes de cuentos, creo que como escritora prefiero hacer novelas. Y las prefiero porque son más grandes y más anchas, porque te ofrecen más lugar para la aventura, porque suponen un largo e incierto viaje al mundo fabuloso de lo imaginado. Y en ese vasto territorio cabe todo.
Por eso, porque mis esfuerzos narrativos se han centrado más en la novela, es por lo que no he sacado jamás un volumen de cuentos, pese a llevar casi veinte años publicando; sin embargo, con el tiempo he ido haciendo unos pocos, y a estas alturas ya he reunido un puñado. También con el tiempo he aprendido que estas ficciones cortas poseen curiosas propiedades para quien las escribe. Por ejemplo, te ayudan a salir de bloqueos creativos, a recuperar la escurridiza vitalidad de las palabras; y además pueden ser una especie de exploradores narrativos, un globo sonda lanzado hacia un nuevo campo de expresión. Y así, hay cuentos que escribí creyendo que se acababan en sí mismos y que volvieron a aparecer mucho después transmutados o desarrollados en ficciones más largas: como «Paulo Pumilio», cuyos ingredientes retomé once años más tarde para mi novela Bella y oscura.
Pero lo más curioso es que la mayoría de mis relatos (no así mis novelas) tratan de parejas: esto es algo que yo no busqué conscientemente, y de hecho me he dado cuenta de ello hace muy poco. Esas parejas son a veces extrañas y poco convencionales, y en otras ocasiones son un emblema de la más ortodoxa conyugalidad; pero todas las historias hablan en definitiva de la necesidad del otro. Esto es, hablan de amor y desamor, de obsesión y venganza, de pasión o rutina entre hombres y mujeres, hombres y hombres, padres e hijos, humanos y monstruos.

¡VIVIR!



RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 14 de Septiembre de 2014.
Quizás si antes de leerlo, me hubiera tomado unos minutos para googlear a la autora, me hubiera ahorrado un plomo de domingo.
Pero me dejé llevar por la reseña que encontré en la nube y por mis ganas de una distopía pura y dura.
Un fiasco.
90 páginas de una historia entretenida y 20 que arruinan la totalidad.
Un ejemplo maravilloso de como las ideas políticas de un autor, le ganan a la pluma del escritor.


Sinopsis (Ed. Flecha)
En 1926, dos semanas después de cumplir los veintiún años, la joven Alisa Zinovievna Rosenbaum llegó a los Estados Unidos escapando de la URSS con poco dinero y un dominio más bien modesto del idioma inglés. Diez años después, publicó su primera novela, Los que vivimos, usando su nuevo nombre: Ayn Rand. Y dos años más tarde, en 1938, la primera edición de ¡Vivir!, su segunda novela, apareció en Inglaterra como Anthem (himno). En 1946, la obra llegó a España y Estados Unidos, donde ella vivía.
Cuando Rand escribió ¡Vivir!, los coqueteos de los políticos e intelectuales americanos con el comunismo eran tales que los años treinta fueron conocidos en Estados Unidos como la Década Roja. Y lo que siguió fue la alianza con la Unión Soviética de Stalin durante la Guerra Mundial. No es de extrañar que, horrorizada ante el avance de los colectivistas en occidente, Rand les dedicara estas palabras en el prefacio de la edición de 1946:
"Ellos han de afrontar el pleno significado de aquello que defienden o condonan; el específico, exacto y pleno significado del colectivismo, de sus lógicas implicaciones, de los principios sobre los que se asienta, y de las ultimas consecuencias a las que estos principios llevarán. Deben afrontarlo, después decidir si esto es lo que quieren o no."

¡Vivir! (fragmento)

Yo soy. Yo pienso. Yo quiero.
Mis manos... mi espíritu... mi cielo... mi bosque... esta tierra mía... ¿Qué debo añadir? Estas son las palabras. Esta es la respuesta.
Estoy aquí de pie, en la cumbre de la montaña. Levanto mi cabeza y extiendo mis brazos. He aquí mi cuerpo y mi espíritu, he aquí el fin de la búsqueda. Deseaba conocer el sentido de las cosas. Yo soy el sentido. Deseaba encontrar un permiso para existir. No necesito permiso alguno para existir; ni que me den el visto bueno para vivir. Yo soy el permiso y el visto bueno.
Son mis ojos los que ven, y la mirada de mis ojos confiere belleza a la tierra. Son mis oídos los que oyen, y la audición de mis oídos da su canción al mundo. Es mi mente la que piensa, y el juicio de mi mente es la única linterna que puede hallar la verdad. Es mi voluntad la que elige, y la elección de mi voluntad es el único edicto que debo respetar.
He conocido muchas palabras, algunas resultaron sabias y otras resultaron falsas, pero sólo tres son sagradas: "¡lo deseo así!"
Cualquiera que sea el camino que yo tome, la estrella que me guía está en mi interior; la estrella que me guía y la brújula que señala el camino. Señalan en una única dirección. Señalan hacía mí.
No sé si esta tierra en la que estoy es el corazón del universo o si no es más que una mota de polvo perdida en la eternidad. Ni lo sé ni me importa. Pues sé qué felicidad puedo alcanzar en esta tierra. Y mi felicidad no requiere un propósito más elevado para ser vindicada. Mi felicidad no es el medio para fin alguno. Ella es el fin. Es su propio objetivo. Es su propia razón de ser.
Tampoco soy yo el medio para que otros lleguen a los fines que anhelan conseguir. No soy una herramienta para que me usen. No son un sirviente de sus necesidades. No soy un vendaje para sus heridas. No soy un cordero a sacrificar en sus altares.
Soy un hombre. Este milagro de mi ser está para que lo posea yo y lo vele yo, y lo guarde yo, y lo use yo, y sea yo quien se arrodille ante él.


domingo, 12 de noviembre de 2017

POLVO EN EL NEÓN


RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 13 de Septiembre de 2014.
Las road-movie tienen la característica de que el protagonista avanza buscando o huyendo de algo. En este viaje por la ruta 66 los personajes se mueven en un punto de indefinición inicial. ¿Persiguen o escapan?
Un libro conceptualmente raro. La mitad del libro son fotos, preciosas por cierto, y la otra mitad, texto. Se complementan adecuadamente. Las fotos no hacen avanzar la historia pero la puntualizan bien.
Curioso en su justa medida. Para lectores inquietos que creen que lo que pone en la contraportada no es indicativo de lo que pueden encontrar dentro del libro.

Sinopsis (Ed. Tropo)
Un hombre hereda un motel. La carretera como símbolo de libertad, el motel como refugio contra la intemperie. La unión de la palabra de Castán con las fotografías del norteamericano Leyva convierten en el libro en una joya editorial. Carlos Castán inauguró la colección Segundo Asalto de Tropo Editores con su colección de relatos Museo de la soledad (2ª edición en Tropo; más de 11.000 ejemplares vendidos) y es uno de los escritores más prestigiosos y respetados en el género breve en España. Dominique Leyva es un fotógrafo estadounidense afincado en España. Su obra se caracteriza por la reinvención de espacios urbanos y marginales.





ALIAS GRACE


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS,  el 13 de Septiembre de 2014.
Sufrí un poco el año pasado cuando le dieron el nobel a la canadiense, sufrí porque Atwood, que también lo es, y que ha estado nominada chiquicientas veces, esa vez también lo perdió.
Atwood reúne, dos cosas que suelen ser difíciles de reunir, o que a mi, como lectora, me resultan difíciles de encontrar: alguien que cuente una historia que de verdad me resulte interesante, y que además, tenga el arte de contarla bien.
Con este libro, sin embargo, entrar en la parte de "que de verdad me resulte interesante", me costó 200 páginas. Pero una vez entré, agradecí a la autora una vez más.
Muy bueno.

Sinopsis (Ed. B)
Basándose en las nuevas técnicas europeas, el joven médico Simon Jordan entrevista a la reclusa Grace Marks, condenada a cadena perpetua por haber participado en un crimen a los dieciséis años, para rescatar de su memoria aquel violento suceso. Atwood parte de un hecho real para internarse en los lugares más recónditos de la mente y trazar un vívido cuadro de la sociedad decimonónica, sus contradicciones y sus complejidades.

Alias Grace (fragmento)
"Me dirigí al corral llorando a lágrima viva, agarré una preciosa gallina blanca, me la coloqué bajo el brazo y me dirigí al lugar donde estaba la leña y el tajo secándome las lágrimas con el delantal; no me veía con fuerzas de hacer semejante cosa. Jamie Walsh me siguió y me preguntó amablemente qué me ocurría. Yo le pregunté si tendría la bondad de matar la gallina. Me contestó que nada más fácil. Tendría mucho gusto en hacerlo puesto que yo era tan remilgada y sentimental. Agarró la gallina, le cortó limpiamente la cabeza y la gallina decapitada correteó un momento y después se desplomó al suelo agitando las patas. Me pareció un espectáculo lastimoso. Luego desplumamos la gallina juntos, sentados el uno al lado del otro en una de las barras de la valla mientras las plumas volaban a nuestro alrededor. Al terminar, le di sinceramente las gracias por su ayuda y le dije que no podía darle nada a cambio, pero que más adelante me acordaría del favor que me había hecho. Esbozó una tímida sonrisa y me dijo que gustosamente me ayudaría en cualquier otra ocasión en que yo lo necesitara.
Nancy había salido durante la última fase de nuestra conversación y ahora permanecía de pie en la puerta de la cocina protegiéndose los ojos del sol con la mano mientras aguardaba con impaciencia que termináramos de preparar la gallina para cocinarla. Así que limpié la gallina con la mayor rapidez que pude, conteniendo la respiración para no aspirar el olor y reservando los menudillos por si quisieran hacer una salsa con ellos, la enjuagué bajo el chorro de agua de la bomba y la llevé a la cocina. Mientras la rellenábamos, Nancy me dijo: bueno, ya veo que has hecho una conquista. Le pregunté a qué se refería y ella me contestó: a Jamie Walsh, se le nota en la cara que está perdidamente enamorado de ti; antes era mi admirador, pero ahora veo que es el tuyo. Comprendí que estaba intentando recuperar mi amistad tras haber perdido los estribos. Me eché a reír diciendo que no me parecía demasiado buen partido, pues era un simple chiquillo tan pelirrojo como una zanahoria y tan pecoso como un huevo, aunque muy alto para su edad. Bueno, dijo ella, a su tiempo maduran las brevas. El comentario me pareció enigmático pero no pregunté qué quería decir por temor a que ella me considerara una ignorante.
Para asar la gallina tuvimos que atizar bien el fuego en la cocina de verano y preparamos el resto de la comida en la de invierno. Como acompañamiento de la gallina elaboramos un puré de cebollas y zanahorias y para postre pusimos fresas con nata y queso hecho en casa. El señor Kinnear guardaba el vino en el sótano, en parte en toneles y en parte en botellas. Nancy me mandó por cinco botellas. No le gustaba bajar al sótano porque decía que había muchas arañas.
Mientras estábamos ocupadas en esos quehaceres, se presentó James McDermott más fresco que una lechuga. Al preguntarle amablemente Nancy dónde se había metido, él le contestó que, como había terminado todas sus tareas antes de marcharse, no era asunto de su incumbencia, pero si tanto se empeñaba en saberlo, había ido a hacer un recado especial que el señor Kinnear le había encomendado antes de marcharse a Toronto. Nancy replicó que ya se enteraría ella y que él no tenía ningún derecho a entrar y salir justo en el momento en que más se le necesitaba. James contestó que eso él no podía saberlo pues no tenía dotes de adivino. Nancy le dijo a su vez que, si las tuviera, vería que no permanecería mucho tiempo en aquella casa. Pero como por el momento ella estaba muy ocupada, ya hablaría con él mas tarde. Ahora lo mejor que podía hacer era ir a atender el caballo del señor Kinnear que necesitaba que lo almohazaran después del largo viaje, siempre y cuando su alteza real no lo considerara una tarea demasiado indigna de su condición. McDermott se fue a la cuadra con el semblante enfurecido. "



ODISEO. EL JURAMENTO


RESEÑADO por Ricardo Cortat para LIBROS,  el 9 de Septiembre de 2014.
Tengo un recuerdo infantil cinematográfico: Una mujer llorando en un barco mientras se aleja de una ciudad en llamas.
Quizás el recuerdo no es exacto del todo o quizás es incompleto pero durante mucho tiempo me dejó con una gran incógnita, ¿Por qué la secuestraban? ¿Por qué no quería volver con su marido? ¿Por qué esas lágrimas? ¿Realmente l...a ciudad estaba en llamas o se ha convertido en un recuerdo viciado?
‘Odiseo’ nos cuenta, en forma de memorias explicadas en primera persona, desde el nacimiento del hijo del rey Laertes hasta la caída de Troya, y nos muestra como el mundo mítico en el que vive Odiseo se va extinguiendo lentamente: la desesperación y muerte de Heracles o como los Argonautas ceden el trono a sus descendientes o como los últimos semidioses desaparecen entre bambalinas. El mundo de Odiseo cambia con la guerra. Una guerra a, la que sin ser culpable, ha atado a sus amigos con un juramento: Helena elegirá a su marido y esa elección nos unirá a todos como un solo hombre.
Palomitas, estamos ante un bol lleno de palomitas. O ante un baklava chorreante de miel. Un pastelito que hemos comido mil veces y que no deberíamos permitir que se nos olvidara como se cocina. Esos cuentos, esas leyendas y esos dioses mil veces furiosos son los cimientos de nuestro conocimiento. Una receta que a veces es caviar, a veces menú de diario y a veces un simple hojaldre de nueces y miel.
Quizás no sea un plato de alta cocina ni un libro que pasará a los anales pero es un bonito cuento de cómo y por qué micenos, argivos, mirmidones, atenienses o tesalios se juntaron como un solo aqueo ante las murallas de Ilión para librar una guerra por la mujer más bella del mundo. Quizás la única guerra que podría tener sentido.

Sinopsis (Ed. Grijalbo)
La vida de Ulises desde su juventud en la isla de Ítaca hasta que se convierte en guerrero y héroe valiente y honrado, así como en esposo y en padre, y su papel importante en las guerras de Troya. Odiseo o Ulises, el héroe del poema de Homero, el más complejo, el más moderno.
"Mi nombre es Nadie" dice Odiseo, y más de dos mil años después su persona sigue fascinando a los lectores.
Valerio Massimo Manfredi narra esta magnífica aventura desde la primera persona para acercarnos a un protagonista muy humano y cercano. Nos presenta su historia repleta de maravillas y nobles hazañas magníficas desde la infancia de Odiseo en la pequeña isla de Ítaca hasta el final de la guerra de Troya.
Una vez tras otra el guerrero, hombre de estado y diplomático demuestra su inteligencia y su sensatez. Propone acuerdos pacíficos, resuelve conflictos, predica paciencia y lealtad, rodeado por los héroes más orgullosos, tempestuosos y bélicos de la Antigüedad.
Hércules, Paris, Laertes, Penélope, Helena... la lista de nombres, y todos conocidísimos, es larga y todos desempeñan un papel fundamental en este gran drama íntimo y legendario a la vez.
Con Odiseo, Manfredi nos ofrece una aventura épica palpitante repleta de toda la pasión y la emoción que ya disfrutamos con la trilogía de Aléxandros.

Odiseo: El Juramento (fragmento)

Prólogo

¿Cuánto tiempo llevo caminando? Ya no lo recuerdo, no consigo contar los días y los meses. La luna y el sol se confunden. El astro de la noche brilla, a veces, iluminando la infinita extensión nevada con intensidad similar a la del sol y el astro diurno surge del horizonte velado de nieblas como una pálida luna. El hielo refleja la luz igual que el agua.
¿Cuánto tiempo hace que no veo hombres? ¿Cuánto tiempo hace que no veo la primavera, el mar, los quejigos y los mirtos en los montes y entre las rocas? He encontrado lobos. Osos. No me han hecho ningún daño, no me han atacado. No he echado mano al arco y aun así he sobrevivido. Para que pueda llevar a cabo mi viaje.
El último.
He aprendido a hablar conmigo mismo, a tener de compañera a mi mente para que no se evapore con las nieblas. Echo de menos a mi esposa, sus brazos tan blancos y blandos. Echo de menos su pecho tibio y sus ojos negros, negros, negros. Echo de menos a mi hijo, a mi muchacho, el único que he engendrado. Le he dejado que continuara durmiendo. Los chicos tienen un sueño pesado. Me odiará: me había esperado tantos años…


ESTOY DESNUDO y otros relatos


RESEÑADO por Rectoyverso Lecturas para LIBROS,  el 7 de Septiembre de 2014.
Permitid que comparta con vosotros un libro y un autor que acabo de descubrir y que recomiendo no perderse. Es "Estoy desnudo" de Yasutaka Tsutsui, ocho relatos que chocan, impactan, con un sentido del humor cáustico y algo macabro, pero que se disfruta si uno consigue desmelenarse un poco.

Sinopsis (Ed. Atalanta)
Atalanta ha pedido a Yasutaka Tsutsui que seleccione para este volumen los que, a su juicio, son sus mejores cuentos. El resultado, como era de esperar, es insólito.
La crítica ha dicho:
«¿Cuánta gente habrá capaz de articular ecosistemas literarios así de alucinantes, alternando la risa y el horror mientras vapulea lo peor de la sociedad y reivindica la libertad y el arte? Tsutsui es una perla que estaba escondida para el español, y el rescate honra aún más el nombre de su editorial: Atalanta, la cazadora.»

Estoy desnudo y otros relatos (fragmento)

1 (Estoy desnudo)
—¡Fuego! ¡Fuegooo!
Cuando se oyó este grito, yo estaba haciendo el amor con Yasuko Ōno por tercera vez. Para entonces, un humo negro ya se estaba filtrando por debajo de la puerta de la habitación, como si fuera una lengua achatada. Aparté el brazo de Yasuko, que al parecer no había oído nada por el clímax de unos momentos antes, y, a pesar de que ella no quería soltarme, me levanté.
—¡Huyamos! ¡Es un Eliminar palabra repetida
Yasuko emitió un grito lastimero y se levantó sobresaltada. El fuego se había declarado a mediodía en el hotel de citas al que la había llevado. Era evidente que a Yasuko le asustaba mucho más la multitud de mirones que pudieran reconocerla que el hecho de morir abrasada. Y es que yo estoy soltero, pero ella es una mujer casada. Como tardé mucho en encontrar los calzoncillos bajo las sábanas, cuando me había puesto la camiseta de tirantes y los pantalones, el humo ya estaba flotando ligeramente por toda la habitación.


HISTORIA DE MAYTA


RESEÑADO por Rossana Cabrera para LIBROS, el 6 de Septiembre de 2014.
Cuando una ve entrevistas de Vargas Llosa, o lee sus declaraciones a la prensa y siente que le hierve un poco la sangre y se enfrenta a sus libros con enojo, generalmente, el enojo se disipa. Eso me pasa a mi, al menos, el señor de las entrevistas crea personajes que me pueden y sus palabras están enganchadas entre sí de una manera que me encanta.

Bueno.. pues este libro, es exactamente el libro que uno se imagina escrito por ese hombre hervidor de sangres. Me dejó de mala uva. De muy mala uva.

Sinopsis (Ed. Seix Barral)
Mario Vargas Llosa nos arrastra con su prosa hacia Mayta, protagonista de una intentona revolucionaria trotskista que en la novela acontece en 1958. La reconstrucción de la historia de este personaje se lleva a cabo mediante los testimonios de aquellos que lo conocieron y la posterior confrontación de este relato, cargado de subjetivismo, con la realidad. El resultado sólo podrá tener un claro regusto amargo y tragicómico. Así, aparte de conocer a un hombre, personificación de la marginalidad, hijo de un periodo de pasiones políticas y conflictos ideológicos, sabremos también de un momento clave en el devenir de América Latina, un tiempo sombrío, tiempo de reivindicación violenta de los deseos y los derechos, y, finalmente, comprenderemos las limitaciones de la verdad. Porque la historia procede de las ficciones personales. Y el lenguaje de la ficción traiciona inevitablemente la experiencia real.
A menudo infravalorada, esta novela va mucho más allá de las lecturas políticas que en su momento la redujeron. Hoy, además, nos deleita con toda la altura literaria de
Mario Vargas Llosa.

Historia de Mayta (fragmento)

Londres, junio de 2000

I

Correr en las mañanas por el malecón de Barranco, cuando la humedad de la noche todavía impregna el aire y tiene a las veredas resbaladizas y brillosas, es una buena manera de comenzar el día. El cielo está gris, aun en el verano, pues el sol jamás aparece sobre el barrio antes de las diez, y la neblina imprecisa la frontera de las cosas, el perfil de las gaviotas, el alcatraz que cruza volando la quebradiza línea del acantilado. El mar se ve plomizo, verde oscuro, humeante, encabritado, con manchas de espuma y olas que avanzan guardando la misma distancia hacia la playa. A veces, una barquita de pescadores zangolotea entre los tumbos; a veces, un golpe de viento aparta las nubes y asoman a lo lejos La Punta y las islas terrosas de San Lorenzo y el Frontón. Es un paisaje bello, a condición de centrar la mirada en los elementos y en los pájaros. Porque lo que ha hecho el hombre, en cambio, es feo.
Son feas estas casas, imitaciones de imitaciones, a las que el miedo asfixia de rejas, muros, sirenas y reflectores. Las antenas de la televisión forman un bosque espectral. Son feas estas basuras que se acumulan detrás del bordillo del Malecón y se desparraman por el acantilado. ¿Qué ha hecho que en este lugar de la ciudad, el de mejor vista, surjan muladares? La desidia. ¿Por qué no prohíben los dueños que sus sirvientes arrojen las inmundicias prácticamente bajo sus narices? Porque saben que entonces las arrojarían los sirvientes de los vecinos, o los jardineros del parque de Barranco, y hasta los hombres del camión de la basura, a quienes veo, mientras corro, vaciando en las laderas del acantilado los cubos de desperdicios que deberían llevarse al relleno municipal. Por eso se han resignado a los gallinazos, las cucarachas, los ratones y la hediondez de estos basurales que he visto nacer, crecer, mientras corría en las mañanas, visión puntual de perros vagos escarbando los muladares entre nubes de moscas. También me he acostumbrado, estos últimos años, a ver, junto a los canes vagabundos, a niños vagabundos, viejos vagabundos, mujeres vagabundas, todos revolviendo afanosamente los desperdicios en busca de algo que comer, que vender o que ponerse. El espectáculo de la miseria, antaño exclusivo de las barriadas, luego también del centro, es ahora el de toda la ciudad, incluidos estos distritos —Miraflores, Barranco, San Isidro— residenciales y privilegiados. Si uno vive en Lima tiene que habituarse a la miseria y a la mugre o volverse loco o suicidarse.