miércoles, 25 de noviembre de 2015

VICTORIA


Con nombre de protagonista, quizás algunos piensen que esta es una historia de amor sencilla y tierna, de hecho el autor puso como subtitulo de esta novela "una historia de amor" y así se publicó por primera vez. Yo definiría Victoria más como una historia de desamor, un desencuentro constante entre una noble y un molinero, con un toque de denuncia social, de lucha de clases que coincide más con la narrativa de Hamsun que la novela romántica.
Victoria no sólo narra los amores-desamores de la pareja sino que ahonda en el universo de sentimientos que mueven a los personajes principales y a todos los "secundarios" que impulsan la historia tanto como la pareja protagonista.
No considero que alcance la perfección narrativa de Hambre o Pan, pero ha resultado interesante leer la concepción que Hamsun tiene del universo romántico que, en su pluma, se transforma en trágico. Es pues, Victoria, una historia dura y triste pero, de amor, al fin y al cabo. No encaja a la perfección en la producción literaria del autor y de ahí su originalidad e interés.

Un fragmento descriptivo, en el que se identifica más claramente el estilo literario de Hamsun:

“Sí, ¿qué era el amor? Un viento que susurra entre las rosas… ¡Oh!, no, una fosforescencia amarilla que recorre la sangre. El amor era una música cálida, diabólica, que hace latir hasta los corazones más ancianos. Era como la margarita que, en cuanto llega la noche, se abre plenamente, y era la anémona que a un soplo de aire se cierra y muere al ser tocada. Así era el amor. Abatía a un hombre y de nuevo lo levantaba para volverlo a abatir; hoy me anima a mí, mañana a ti, a otro la noche siguiente, tal es su inconstancia. Pero también podía perdurar, semejante a un sello infrangible, quemar como un fuego continuo, hasta el momento supremo, de tal forma era eterno”